PAGINA 9 Ť Lourdes Galaz
La importancia de llamarse Ernesto
* En la UNAM, el rector Barnés más lejos de Dios * El caso Posadas afecta la relación Iglesia-gobierno * A 62 meses de la ejecución de Colosio, los colosistas a la cargada
Mientras los partidos políticos se empeñan en crear cortinas de humo que opaquen los intereses de sus burocracias en la lucha por el poder, acá en el llano la vida sigue y los problemas nacionales son parte de la vida cotidiana del mexicano común y corriente ųa veces no tantoų, que ya ni espera las alianzas ni el arribo de la neodemocracia, el 7 de noviembre.
Y muchos mexicanos, priístas y amigos que los acompañen, se alistan para la fiesta. El Consejo Político Nacional votó por festejar al gran señor de Los Pinos en el día de su santo. šCon 17 millones de votos a favor ųmuchos millones más en contra, muestran las estadísticas oficialesų, Zedillo se merece un regalazo! El festejo es el 7 de noviembre... Todo por la importancia de llamarse Ernesto.
Aquí y ahora, el conflicto de la UNAM es verdaderamente preocupante: los estudiantes, con los maestros y demás asesores en el paro universitario, se montan en su macho y cierran los caminos a las autoridades de rectoría. No se avizora una pronta solución y el rector Francisco Barnés cada vez está más lejos de Dios y más cerca del desempleo. Perdió el respeto y el apoyo presidencial desde hace semanas. Dicen en Los Pinos que midió mal los tiempos y las consecuencias cuando decidió aprobar el nuevo Reglamento General de Pagos.
Los hombres del presidente no aceptan que aumentar las cuotas fue orden presidencial, y si así fuera, comentó alguno, las órdenes se cumplen bien, si no quedas relevado. Y en esas anda el rector Barnés. Tanto es así que el doctor Juan Ramón de la Fuente, con cierta presencia y reconocimiento en el campus universitario, podría llegar a relevar a su amigo Barnés. Total, De la Fuente no tiene mayor interés en continuar en el sector salud y tampoco futuro en la burocracia, ni aspiraciones sexenales en la política que lo mantengan con todo en el gabinete presidencial. Así que no sería de extrañar que luego del cambio en la Secretaría de Gobernación y ahora que Diódoro Carrasco tenga que intervenir ųa querer o noų en el conflicto universitario, de un momento a otro dimita el rector Barnés y la Junta de Gobierno de la UNAM dé su voto a favor de Juan Ramón de la Fuente.
En fin, meras especulaciones propias de los tiempos políticos que vivimos, y que pudieran complicarse en los próximos días con un conflicto que se hace evidente entre los cardenales y obispos ųpor no decir la Iglesia católicaų y el gobierno. Mañana lunes se cumplen seis años de la ejecución del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo en el aeropuerto de Guadalajara.
Cuando el gobierno mexicano y la Iglesia católica vivían aún la luna de miel por la enmienda al 130 constitucional que impulsó el nuncio Girolamo Prigione con su amigo el presidente Salinas de Gortari, el asesinato del cardenal Posadas empañaría las buenas relaciones. Y en el afán de salvar la amistad y la imagen del gobierno, el representante del Vaticano declaró que la Iglesia católica estaba dispuesta a "esperar un tiempo prudente" para que se esclarecieran los hechos. šSeis años podría ser un tiempo prudente!
Se recuerda que Prigione y Salinas de Gortari habían viajado en el avión presidencial de Guadalajara a la ciudad de México, después de las exequias del cardenal. El Presidente "se comprometió a aclarar este crimen. Y yo creo en su palabra". šCómo no creerle a Salinas ųmuchos le creyeronų, si ya le había cumplido con la enmienda constitucional!
Versiones periodísticas nunca desmentidas oficialmente atribuyeron la muerte del cardenal ųquien había sido obispo en Tijuanaų y de otras seis personas, al enfrentamiento de los carteles de Sinaloa y Tijuana. Más aún, el procurador Carpizo y su comandante en jefe de la Policía Judicial Federal, Rodolfo León Aragón (hoy con amparo de la justicia), declararon presuntos responsables a El Güero Palma, El Chapo Guzmán y los hermanos Arellano Félix.
Y el nuncio Prigione convenció al Vaticano de que la muerte de Posadas Ocampo fue un "trágico accidente" ocurrido "en medio de un tiroteo entre dos grupos de narcotraficantes", según declaró en la sede de la Iglesia el vocero oficial del Papa, Joaquín Navarro Valls. Y qué más podría decir que el informe remitido al Vaticano por el mismo señor Prigione, que llegó a Guadalajara la tarde del lunes 24 de mayo de 1993, cuando acudió a recibirlo al aeropuerto el cardenal Posadas Ocampo, a bordo de un auto Grand Marquis, modelo que pusieron de moda los narcos de la época. šHace seis años la Iglesia rechazó que haya sido un atentado o un crimen de Estado!
Hoy, seis años después, el cardenal de la arquidiócesis de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, insiste en que es "inaceptable la versión de la confusión". Y el influyente obispo de Cuernavaca, Luis Reynoso Cervantes, ratifica: "Está descartado que hubo una confusión; ni el fuego cruzado lo admitimos... las conclusiones de la Procuraduría son ridículas".
La averiguación está integrada en 47 tomos. La inició el procurador Jorge Carpizo en el sexenio de Salinas, y la continuó en el sexenio de Zedillo el procurador (panista) Antonio Lozano Gracia, quien cerró de hecho el caso, no sin antes declarar que "fue una investigación verdaderamente exitosa", que llevó a la misma conclusión a la que llegó años antes Carpizo. Un sector de la Iglesia no quita el dedo del renglón, y hace diez meses el procurador Jorge Madrazo reabrió el caso. En julio de 1998, se creó un grupo interinstitucional del que forman parte el obispo de Cuernavaca, el arzobispo de Chihuahua José Fernández, y funcionarios del gobierno (panista) de Jalisco y de la Procuraduría General de la República.
Para mañana se anuncia un informe especial del grupo interinstitucional. Por lo pronto, el obispo Luis Reynoso informó que fue descartada la hipótesis de la confusión y que "queda la versión de un crimen premeditado, resultado de un complot". El procurador Madrazo rechazó el "móvil político en el asesinato" y dijo, en clara alusión a los obispos, que "no se vale seguir presentando verdades a medias y fundadas sólo en conjeturas o especulaciones". Y el nuncio apostólico, Justo Mullor, como su antecesor Girolamo Prigione, declaró hace unos días que tiene "plena confianza" en el trabajo del procurador Madrazo. Hay que esperar el nuevo informe. šSon seis años de la ejecución!
Y hoy se cumplen 62 meses de otra ejecución, la de Luis Donaldo Colosio, también acreditada a las mafias de la narcopolítica. Hay un asesino confeso, sentenciado a 30 años en la prisión de Almoloya, 20 menos que los 50 años que el juez ordenó para el interno de Almoloyita, Raúl Salinas de Gortari, por la autoría intelectual del asesinato de José Francisco Ruiz Massieu. Y la prensa dice que don Luis Colosio Fernández aún exige el esclarecimiento del asesinato de su hijo, mientras llega en la cargada a las oficinas del candidato del Presidente, Francisco Labastida Ochoa. Hace unas semanas, en Magdalena de Kino, Sonora, hubo una comida política, con pancartas y calcomanías tricolores, en apoyo de Pancho Labastida, en el rancho La Aquituni, de la familia Colosio. El gobernador Armando López Nogales encabezó a la bufalada de Sonora.
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