n Protesta de investigadores del INAH frente al Senado

Impugnan la iniciativa para legislar sobre patrimonio cultural

n Teresa Franco, directora del instituto, no los recibe

Renato Ravelo n Investigadores sindicalizados del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se manifestaron frente a la Cámara de Senadores para hacer patente su inconformidad con la iniciativa de Ley General de Patrimonio Cultural y denunciar que no los ha recibido María Teresa Franco, directora del organismo, no obstante los ofrecimientos iniciales de diálogo.

Media centena de trabajadores anunciaron asimismo que las movilizaciones continuarán cada miércoles, como una forma de protestar contra la iniciativa que ''plantea en un lenguaje deliberadamente oscuro, abrogar la ley que hoy, continuando una tradición propia del Estado mexicano, defiende el patrimonio arqueológico mueble e inmueble".

Los investigadores entregaron en el Senado un documento en el que puntualizan: ''La iniciativa maneja al patrimonio cultural como mercancía, permitiendo que se especule y comercialice, encubriendo bajo el coleccionismo en general la acumulación y acrecentamiento de piezas arqueológicas, lo cual hoy es lo único expresamente prohibido".

Si además, consigna el documento, ''se suma la pretensión de que esta actividad estará reservada a quienes tengan recursos 'que garanticen su protección', para personificar la figura del 'buen coleccionista', la limita en consecuencia a grupos de poder, perdiendo así su carácter de propiedad nacional. Entonces está claro que la iniciativa responde a intereses mercantiles y favorece a un reducido número de ciudadanos con enorme poder económico".

La propuesta legislativa que ingresó el 28 de abril al Senado de la República, consideran los investigadores sindicalizados, ''restructura al INAH y desaparece dos de sus áreas de funcionamiento: la de museos para convertirlo en una entidad técnico-ejecutiva, desde donde el instituto lleva a cabo la difusión de su producción científica y el patrimonio cultural; y la de docencia, que comprende la Escuela Nacional de Antropología e Historia y la Escuela de Restauración y Conservación".

Los investigadores cuestionan que la instancia que definiría las tareas del INAH estaría conformada -en caso de aprobarse la iniciativa- por un consejo de gobernadores y secretarios de Estado, pues argumentan que serían criterios ''políticos y coyunturales" y no ''científicos" los que imperarían.

Explican que la iniciativa afecta además el contexto jurídico de su relación laboral, por lo que piden que se desista de la iniciativa de Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación.

Jalisco: miembros del SNTE rechazan la iniciativa; cuestionamiento en QR

Cayetano Frías, corresponsal, Guadalajara, Jal., 19 de mayo n Trabajadores de museos y zonas protegidas, dependientes del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), externaron su total rechazo a la iniciativa presentada por el senador panista Mauricio Fernández Garza que pretende abrogar la Ley Federal de Monumentos y Zonas Arqueológicos, así como modificar las leyes orgánicas del Instituto Nacional de Antropología e Historia y del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).

Rigoberto Zavala Márquez, secretario general de la sección D-III-2 del SNTE, indicó que los trabajadores están preocupados porque en la iniciativa se proponen cambios en la relación laboral, pues uno de los artículos transitorios establece que cualquier normatividad que se oponga a la nueva ley quedará automáticamente sin aplicación.

Luego del análisis que hicieron las investigadoras Guillermina Sánchez y Graciela Abascal, encontraron que desaparece la docencia, por lo que las escuelas que tiene el INAH en el Distrito Federal y en Ciudad Juárez ya no existirían oficialmente, y esto preocupa a los maestros que prestan ahí sus servicios.

A nombre de los 110 trabajadores y los 21 investigadores del INAH en Jalisco, el dirigente sindical solicitó a los senadores que den marcha atrás en la aprobación de dicha iniciativa y que en lugar de una nueva ley se revise la existente, ya que contrario a lo que afirma el senador panista Fernández Garza, no es obsoleta y ha servido de modelo a los países de Latinoamérica e incluso a algunos europeos.

Recordó que Fernández Garza confesó que trabajó cuatro años y medio en esta iniciativa, situación que causa extrañeza entre los investigadores del INAH, los cuales por ley debieron haber sido consultados.

Explicó que en Jalisco el INAH tiene bajo su custodia cinco museos, así como dos centros ceremoniales, patrimonio que podría estar en riesgo con la desaparición de la estructura del instituto.

En otro orden, el investigador del INAH Fernando Cortés de Brasdefer, criticó hoy en Chetumal la propuesta de Fernández Garza. De acuerdo con la agencia Notimex, Cortés afirmó que no se puede disponer con alevosía del patrimonio arqueológico, que pertenece directamente a los indígenas descendientes de cada una de las culturas autóctonas que existen en el país.

Al acudir a la Legislatura de Quintana Roo para demandar el respeto de las leyes vigentes, el especialista consideró que de aprobarse la iniciativa esa riqueza podría ser subastada, pues se facultaría a la iniciativa privada para comercializar tales bienes.