n Niega que tuviera presiones durante la consulta
Tenderé puentes pero no cederé al chantaje: González Fernández
Alonso Urrutia n En el colofón de la consulta nacional sobre las reglas para la selección de su candidato presidencial, el dirigente del PRI, José Antonio González Fernández, lanzó la advertencia: "Tenderé puentes y seré promotor del diálogo, pero no cederé al chantaje y a la provocación; este juego no permite escuchar la frase: o soy yo o me voy del PRI".
Encuentro con ex gobernadores en el que insistió en que los aspirantes a la candidatura actúen con responsabilidad y, dijo, "estatura política".
Habló de la sensatez, de la unidad partidista y de una apertura democrática del PRI, sin fracturas.
También aludió a la oposición, al sostener que el PRI "no es un partido de un caudillo ni de una familia, ni de un grupo de familias. Tampoco somos algo inventado en un laboratorio de la política".
Largo discurso en el que puntualizó que su recorrido no fue "para dar línea; fuimos a recibir línea; no fuimos a sembrar o a cabildear una fórmula determinada, fuimos verdaderamente a conocer qué es lo que pensaban los priístas".
Luego, en entrevista, dijo no haber detectado ninguna presión de algún grupo en especial para consensar las reglas de la selección. Y señaló que no vislumbraba en el escenario una posible fractura por la definición del procedimiento.
No quiso adelantar conclusiones pero se conoció que hoy mismo habrá de reunirse con el presidente Ernesto Zedillo.
Su discurso en el Polyforum Cultural Siqueiros no olvidó su participación en el proceso mismo que, a decir de González Fernández, será "la de un priísta más".
Señaló que de la consulta realizada a los priístas sobresalían dos demandas centrales: democracia y unidad. En este contexto mencionó que el PRI "sabe ganar y quiere ganar, pero el partido, una vez más, tendrá que cambiar, que ajustarse a la nueva realidad del país para responder a tiempo a su tiempo". Afirmó que la consulta arrojó una coincidencia general en que el PRI necesita avanzar en la consolidación de formas de organización interna más abiertas y más democráticas, porque el partido -definió- vive una "auténtica transición democrática", pues existen nuevas formas de acción política, nuevas corrientes de opinión, "porque existe un debate interno".
Por todo ello, dijo a los ex gobernadores, muchos de ellos consejeros políticos que definirán las reglas, la decisión al respecto será "la primera piedra para un nuevo PRI democrático, plural, tolerante e incluyente".
Ya en entrevista, González Fernández respondió cuestionamientos sobre la postura priísta ante la propuesta de reforma electoral opositora.
"En los términos en que está planteada, ya lo platicamos con María de los Angeles Moreno y Arturo Núñez, el PRI votaría en contra". Sin embargo, acotó que en esta semana se reunirá formalmente con los líderes de las respectivas bancadas priístas en el Congreso de la Unión para determinar cuáles propuestas podrían ser procedentes. No obstante, acotó que serán aquellas que fortalezcan el proceso electoral del 2000, y no pasará ninguna que tenga un marcado sesgo antipriísta.