PAGINA 9 Ť Lourdes Galaz
Juego político con nuevas reglas
* Sólo dos aspirantes en la lista oficial del priísmo * Los panistas quieren consulta a la base para ratificar a Fox * Cárdenas seguro y el PRD en busca de dirigentes
Luis Felipe Bravo Mena lo expresó muy claro: a la militancia panista "no le sería agradable, ni ve con facilidad, que pudieran coaligarse PAN y PRD". Y Pablo Gómez, el dirigente perredista, dice que su colega de Acción Nacional "está más interesado en una alianza con el PRI que en mostrar al PAN como una auténtica oposición". El panista le responde que "ellos (los perredistas) tienen ya su estrategia y les sería, obviamente, más interesante arrinconar al PAN hacia una posición en la que el PRD tome ventaja".
A diario los medios reproducen los dimes y diretes de los líderes que oficialmente son opositores al gobierno y su partido, mientras en el Revolucionario Institucional se hacen bolas con las reglas y se acorta la lista de presidenciables. Aunque parezca de Ripley, en la lista oficial de aspirantes a la candidatura priísta aparecen únicamente el secretario de Gobernación, Francisco Labastida, y el gobernador Roberto Madrazo.
Más expuesto por estos días al juicio público, el secretario de Bucareli ve afectada su figura con el conflicto universitario (lo dicho: se llevaron el ring a la explanada de Rectoría) y el caso Chiapas, pues con todo y la última declaración que hizo en Yucatán su jefe Zedillo, Labastida saldrá raspado en la junta convocada por el sub Marcos y el EZLN en La Realidad. Y a propósito de la UNAM, los politólogos estiman que habrá vías de solución cuando entre en funciones un nuevo secretario de Gobernación. También entonces habrá luz verde para la reforma electoral, anunciada tras la concertacesión de la directiva del PAN y los hombres del Presidente.
Y aunque las reglas priístas se conocerán el lunes 17, Miguel Alemán y Esteban Moctezuma ya fueron descartados. La razón, dicen en el PRI, son los años: a uno le sobran y el otro no tiene los suficientes (al margen la opinión de la cantante Masiel: un cuarentón no es un niño; está maduro para saber bien lo que hace. Y Esteban cumplió 46). En el otro bloque, el extraoficial, Humberto Roque ni cuenta, pasa de comparsa. Manuel Bartlett avanza, a sabiendas de que terminará apoyando con todo al hijo del otro gobernador tabasqueño, Roberto Madrazo. Este gobernador, va en caballo de hacienda, dicen sus publicitas y lo confirman los cuadros medios priístas, con quienes el de Tabasco tiene arraigo desde sus tiempos de talachero en el tricolor; se le recuerda, sobre todo, como uno de los más activos operadores de Colosio antes, durante y después de la histórica XIV asamblea ųlo reconoce hasta Pepetoño González al concluir su muy personal consulta. Además, los responsables de la publicidad del gobernador aseguran que los promocionales en radio y televisión lo han colocado como puntero en las encuestas, hasta en las ordenadas en Los Pinos. (Atención: ya comienzan a publicarse en los diarios comentarios y artículos por demás obsequiosos a Roberto e Isabel Madrazo).
En fin, allá los priístas y su mala cabeza. Acá en el llano, los del perredé también esperan las reglas claras que ofreció Pablo Gómez para la nueva elección de dirigentes nacionales. Se prepara el Consejo Nacional y en junio habrá un nuevo reglamento, que servirá también para postular ųmejor dicho: ratificar, a Cárdenasų al candidato presidencial. Por lo ponto, los aspirantes a la presidencia del CEN ya andan en campaña. Ayer sábado, Jesús Ortega ratificó que va nuevamente por la presidencia del sol azteca, en una junta a la que asistieron cuadros y líderes del partido de una veintena de estados. La senadora Amalia García también decidió volver a jugársela y anda de gira por el país haciendo proselitismo. El otro contendiente, el también senador Félix Salgado, hace campaña con declaraciones a la prensa; propios y extraños advierten que el de Guerrero se sumará a otra causa.
Nuevas reglas también tendrá el Partido Acción Nacional. En la asamblea convocada por la directiva para fin de mes, se revisarán los estatutos partidistas, sobre todo en lo que respecta a las formas para elegir a los candidatos de ese partido. Y es que con eso de los nuevos tiempos y la nueva democracia partidista, también en el PAN quieren consultar a la militancia.
Tradicionalmente la elección de los directivos y de los candidatos a puestos de elección popular se realiza en un consejo estatal o nacional, según sea el caso. Hace unas semanas cuando eligieron a la directiva nacional, y después del fiasco priísta y del fraude perredista, los del PAN recibieron algunas críticas malintencionadas con referencia a que unos 300 distinguidos militantes son los que deciden en su partido.
Comentaba hace unos días la ex secretaria general Cecilia Romero que en un sondeo de la directiva se muestra que los panistas quisieran una consulta a la militancia y a los adherentes (simpatizantes, les nombran en el PRI) que defina a su candidato presidencial. Más aún, advertía la señora Romero, podría consultarse a una base de 300 mil panistas y adherentes que se hayan registrado en las listas del partido seis meses antes de dicha consulta.
De que habrá nuevas reglas en el PAN no hay duda. Los panistas reformarán sus estatutos y organizarán una consulta abierta a la militancia que ya quisieran los priístas inventores de esa moda en la democracia partidista. La cuestión es, entonces, quiénes serían los candidatos, o bien cuántos candidatos se someterían a la consulta. La verdad es que hasta ayer sólo estaba apuntado el gobernador de Guanajuato. Y es que como están las cosas, ningún panista que se respete se prestaría como comparsa para perder una primaria contra Vicente Fox.
La campaña del guanajuatense ya no la para ni Diego. Dicen los Amigos de Fox que en un año han logrado establecer una red de más de 200 mil simpatizantes dentro y fuera del PAN. Si hasta hace unas semanas se cuestionaba la estrategia de campaña y a los Amigos de Fox, ahora la directiva panista está convenciendo al panismo tradicional (los ortodoxos, custodios de las buenas costumbres y del proyecto político) de lo rentable que será para el partido la candidatura de Fox: tiene bien organizado el financiamiento de la campaña y hasta una estrategia que permitiría al PAN asegurar el triunfo en el 2000.
Así el panorama, se advierte que las coaliciones quedarán para mejor ocasión. La reforma electoral va, con el voto de PRI, PAN y PVEM a favor de lo acordado hace diez días en Los Pinos: transparencia en los gastos de campaña; mayor equidad en el acceso a los medios de comunicación; mayor fiscalización de los recursos partidistas para campañas políticas, y cancelación de la fórmula que asegura una sobrerrepresentación en el Congreso a la primera mayoría.
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