n Se destinará un presupuesto de $9 mil 100 millones
Presentó Zedillo un nuevo plan de combate a la pobreza
Rosa Elvira Vargas, enviada, Puebla, Pue., 5 de mayo n Bajo el principio de que "el verdadero desarrollo de México no puede ni habrá de dejar a nadie en la marginación'', hoy se lanzó desde aquí el Plan Nacional de Atención a Regiones Prioritarias (PNARP), con el cual el gobierno federal realizará 16 mil acciones en las 36 regiones del país que viven la más aguda pobreza y se destinará un presupuesto de 9 mil 100 millones de pesos.
A través de ocho secretarías, en conjunción con las administraciones estatales y municipales, el programa pretende, destacó el presidente Ernesto Zedillo, "abrir nuevas posibilidades de trabajo e ingreso en las regiones más atrasadas, subir el piso social en todo el país y ganar terreno a la pobreza''.
En el Plan se privilegiará el gasto en salud, educación, alimentación, dotación de servicios públicos, así como el aprovechamiento de los recursos naturales y las ramas productivas de cada comunidad y está dirigido a atender a las 91 regiones de todo el país donde, por su aislamiento y marginación, sus habitantes viven en condiciones de extrema pobreza y muchas veces no cuentan con los servicios más indispensables.
Indicó entonces que el programa ''no está partiendo de cero", sino que se trata de acciones ya definidas que fortalecerán las posibilidades de que las regiones consigan un desarrollo más equilibrado. Aclaró que los proyectos contra la pobreza que ya están en operación como Progresa, empleo Temporal, Caminos Rurales, Empresas Sociales y otros, seguirán trabajando como hasta ahora con sus beneficiarios, y dijo que al término de los primeros cien días del nuevo plan se evaluarán sus resultados y se anunciarán nuevas metas para un nuevo e inmediato periodo similar.
De ese modo, subrayó Ernesto Zedillo, se logrará derrotar a la pobreza extrema y se construirá un futuro donde todos puedan vivir mejor a partir de su propio esfuerzo, porque el verdadero desarrollo social debe ser incluyente y sustentarse en la capacidad productiva de la gente y en la justicia social.
Recursos para los pobres
El marco para la presentación del PNARP fue el Instituto Cultural Poblano. Allí, con el sol cayendo a plomo, los 217 munícipes poblanos y sus comitivas esperaron pacientemente durante más de dos horas y media el arribo del Ejecutivo federal, del gobernador Melquiades Morales Flores y los titulares de la Sedeso, Sedena, Marina, Sagar, Semarnap, Ssa, SCT, SRA y Secofi.
Esteban Moctezuma Barragán, secretario de Desarrollo Social, explicó el plan. Dijo que éste busca "fomentar el desarrollo social integral, concentrando esfuerzos, programas y recursos de los tres niveles de gobierno".
Mencionó que, después de un análisis, se concluyó que existen 91 regiones prioritarias en las que prevalecen condiciones de marginación extrema, pero en las cuales, al mismo tiempo, coexisten "grandes potencialidades para la actividad productiva".
En una primera etapa del PNARM, las autoridades atenderán 36 regiones -que abarcan 23 estados-, entre las que destacan: las cañadas, los altos, el norte, la sierra y selva de Chiapas -donde opera el Ejército Zapatista de Liberación Nacional-, la zona maya, la Huasteca, así como áreas marginadas de Guerrero, México, Jalisco, Durango, Veracruz, Oaxaca, Nayarit, y las sierras norte, mixteca y negra de Puebla.
La dotación de recursos y su aplicación, abundó el funcionario, se realizará a través de 25 consejos regionales "plurales e incluyentes", que efectuarán un "análisis de la demanda social" por zonas. El dinero bajará a las poblaciones a través de "paquetes regionales de atención", que serán administrados en cada una de las comunidades por subcomités del PNARM, incluidos en los Coplades.
Así, todas las dependencias involucradas se encargarán de elaborar, asesorar y verificar proyectos de desarrollo desde sus ámbitos de competencia. Los programas Progresa, Procampo y Alianza para el Campo continuarán sus funciones a la par del PNARM.
Moctezuma Barragán resaltó que "la superación de la pobreza debe tener un fundamento ético y moral", antes de resaltar que el gobierno federal destina 60 por ciento de su presupuesto programable al desarrollo social.
Por su parte, el presidente Zedillo mencionó que en Puebla serán beneficiados 119 de los 217 municipios existentes, en los cuales habitan más de un millón 600 mil personas. Señaló que en la entidad poblana se destinarán 3 mil 190 millones de pesos -conformados por recursos de los tres niveles de gobierno- para el Plan. De ese monto, 529 millones irán directamente a la modernización de más de 3 mil 800 kilómetros de carreteras y caminos rurales.
Ante un público primordialmente campesino, el Ejecutivo aprovechó e hizo alusión al Programa Alianza para el Campo, en el que participan 195 mil productores que trabajan en más de 100 mil hectáreas. También habló del Progresa, con el cual se atiende a 214 mil 500 familias de 3 mil 765 localidades en 208 municipios, y se otorgan 236 mil becas educativas.
Apenas iniciada su intervención, Melquiades Morales Flores dijo: "la política del señor presidente tiene raíces populares, constituye un factor de progreso y de solución en todos los ámbitos". Externó que en la primera etapa del PNARM se ejercerán en Puebla 578 millones de pesos.
Un orador que se distinguió entre el presidente, los secretarios y el gobernador, fue Margarito Hernández Hernández, alcalde de San Miguel Eloxochitlán, el municipio más pobre de la entidad y uno de los más marginados de la nación.
El edil externó las carencias de servicios públicos, salud, educación y vivienda que abundan en su pueblo y reclamó políticas gubernamentales que aprovechen la fuerza laboral de su región para que sus paisanos ya no emigren hacia Estados Unidos.
Antes de llegar al lugar que durante 90 años fue la Penitenciaria poblana, el presidente Zedillo encabezó el desfile tradicional que conmemora la Batalla de Puebla, en la que participaron elementos del Ejército, así como de los planteles militares y de la Heroica Escuela Naval. Asimismo, y a lo largo de seis kilómetros, marcharon estudiantes de las escuelas secundarias y de bachillerato de esta capital y de otros municipios del estado, lo mismo que planteles invitados de entidades como Chihuahua y Durango, así como un colegio panameño.
Aunque en esta ocasión el Ejército no hizo, como en 1998, una recreación espectacular de la gesta encabezada por el general Ignacio Zaragoza en 1862, sí mostró parcialmente lo más moderno de su armamento y de sus vehículos de combate y de traslado de tropas.
El desfile duró dos horas, a lo largo de las cuales alrededor de 24 mil estudiantes del nivel medio lucieron, como cada año, variados y vistosos uniformes y las bandas escolares hicieron alarde de versatilidad musical con piezas que iban piezas de Juan Gabriel a Los Beatles.
Como invitada especial acudió en esta ocasión la escritora Angeles Mastretta, quien estuvo en todos los actos que encabezó el Presidente, mismos que concluyeron con una comida en la Casa Puebla. Al término del ágape y por ser la primera visita formal que realiza Zedillo durante la nueva gestión gubernamental, dedicó largo rato a saludar a los asistentes, entre quienes se encontraban alcaldes, empresarios, funcionarios estatales, legisladores locales y federales, y viejos políticos, como el ex gobernador Alfredo Toxqui Fernández de Lara y el ex dirigente campesino Oscar Ramírez Mijares.
También, de salida, el mandatario se encontró con el diputado Salomón Jauli Dávila, que tiene varias proezas cruzando a nado los Estrechos de Gibraltar y de Bering, quien obsequió al mandatario unas gafas oscuras "que le ayudarán mucho cuando corra por las mañanas''. El legislador no se cansaba de alabar a Zedillo como "el primer presidente deportista que tiene México'', mientras le pedía apoyo para aprobar la nueva Ley del Deporte.
A su paso salió también un indígena de Pahuatlán, comunidad de Atla, quien le denunció una disputa por la posesión del agua potable del lugar, con militantes del PRD, a lo que el mandatario pidió de inmediato la intervención del gobernador Melquiades Morales para conciliar en ese conflicto.