n El régimen, aún muy centralizado en el Presidente


Cárdenas: el PRD tiene todo

para ganar en el 2000

n Considera correcta su decisión de entrevistarse con Carlos

Salinas para buscar que se limpiara la elección de 88

Julio Hernández López n Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano considera que fue correcta su decisión de entrevistarse en 1988 con Carlos Salinas de Gortari para buscar que se limpiase aquella elección presidencial, sobre todo a la luz del entorno que había en aquel momento, en medio incluso de propuestas que "flotaban en el aire, que estaban en el ambiente" de buscar salidas no constitucionales, violentas, al movimiento cardenista. También considera correcto haber optado por la organización partidista, por la persistencia en la vía electoral, en aquellos momentos exacerbados.

Casi 11 años después, Cárdenas reflexiona en una de las oficinas de la casa de Galileo 81, en Polanco, donde suele atender algunos asuntos sin la presión de la vida citadina agolpada en el Zócalo de la ciudad de México.

-Yo considero que lo sustancial ya está dicho. No creo que haya mucho más qué decir -establece el michoacano con amabilidad, los antebrazos descansando sobre la mesa de madera barnizada de la pequeña sala de trabajo en la que se realiza la entrevista.

De cualquiera manera, acepta dar un paseo sobre el tema. Repite que su único planteamiento fue buscar que se limpiase la elección. Advierte que la organización política que impulsaba su candidatura era "muy laxa, muy desarticulada", y que aquella formación integrada por la Corriente Democrática y el Frente Democrático Nacional (FDN) tenía "muchas dudas, incertidumbres de cómo seguir" luchando.

Cumplir los compromisos

-ƑQué valoración política le queda de todo este episodio? ƑLe dañó a usted como figura política, a su partido?

-Yo no vería mucho más que esto: primero, lo que ya he dicho, mi compromiso de discreción respecto a este encuentro. Fue mi compromiso. Había compromiso. Creo que es importante que uno cumpla los compromisos que asume.

Es de tarde. Las paredes son blancas. El ingeniero se ha puesto a contraluz, de espaldas a un pequeño jardín interior.

"No. No siento que aporte mucho más el que se haya conocido o no ese asunto para aclarar qué sucedió en el 88. Creo que los acontecimientos del conocimiento público allí están. El camino, la trayectoria que siguió cada quien allí están."

Y entonces trae a la memoria fantasmas conjurados.

"Había también una situación de fuerte confrontación, de temores. Había quien hablaba de caminos de violencia. Yo no digo que en el FDN hubiera quien pensara que esa era la salida. Nunca hubo ningún planteamiento serio que dijera algo distinto a que la salida debería ser la salida constitucional. Pero, pues, flotaba en el aire, estaba en el ambiente, y este fue el clima en el que se dio la reunión. Esa sería la otra consideración..."

-ƑUsted cree, ahora, que en algún momento del 88 debió ser más beligerante, emprender medidas más enérgicas?

-Yo creo que se tomaron las decisiones que se debían tomar. Estoy convencido de que el haber buscado una salida a toda esta movilización que se dio a partir del 88, hacia la formación de un partido político, de buscar una salida por la vía de la organización, de la participación política de la vía electoral, fue y ha sido una salida correcta.

-ƑEso fue finalmente lo trascendente?

-Yo considero que esto es lo que habría que valorar. Ahora, lo demás es construir escenarios de lo que se pudo hacer y no se hizo. Y, bueno, donde cada quien tiene su versión.

La palabra empeñada

-ƑFue un error no haber difundido oportunamente ese encuentro?

-Yo no lo considero así. Yo considero que, si había una palabra empeñada, había una palabra empeñada. Y en un frente democrático, en un conjunto de organizaciones que estaban desarticulándose, que estaban ya... que tenían muchas dudas respecto a cómo seguir, en donde estaba por calificarse la elección, y era necesario mantener viva la movilización, que era el único instrumento que tenía el FDN para tratar de hacer valer sus posiciones, fue correcto haberlo hecho. Porque, bueno, no había confianza en términos generales para haber dado a conocer un hecho como éste, que podría haber tenido un efecto desmovilizador.

-Hay quienes estiman que la revelación del encuentro Cárdenas-Salinas precipitó que el jefe del Gobierno capitalino se destapara como aspirante presidencial.

-No; eso ya estaba anunciado desde tiempo atrás. Siempre he dicho que cuando se lance la convocatoria buscaré participar, cumpliendo los requisitos que se soliciten.

-ƑEn qué escenario futuro ve a Porfirio Muñoz Ledo?

-Bueno, yo lo veo en la contienda electoral del PRD. Yo lo veo como un precandidato más en esta elección interna.

-ƑCree que sigue habiendo espacio para Muñoz Ledo en el PRD?

-Bueno, si él lo quiere, yo no veo que vaya a carecer de él.

A un lado de la oficina cardenista están en reunión los senadores priístas cuyo grupo es identificado con el nombre de esa calle de Polanco. Unos metros dividen las construcciones. En las afueras se confunde el movimiento de vehículos, choferes y ayudantes de uno