n Aumentó la expectativa de vida en México


BM: grave estancamiento, si no se enfrentan rezagos sociales

n El mundo no puede darse el lujo de otra década perdida, alerta

Dpa, Reuters, Afp, Ap y Notimex, Washington, 26 de abril n El Banco Mundial (BM) alertó hoy a la comunidad internacional sobre la necesidad de abordar los rezagos sociales, porque de lo contrario surgirá un nuevo estancamiento económico de consecuencias muy graves. ''Los esfuerzos para mejorar áreas claves del desarrollo humano están en peligro de estancarse en el umbral del nuevo milenio'', señaló el informe intitulado Indicadores del desarrollo mundial.

El presidente del BM, James Wolfensohn, advirtió que ''el mundo no puede darse el lujo de otra década perdida, como la que sufrió América Latina después de la crisis de la deuda de los años ochenta. Hace un año teníamos confianza en que se podrían lograr las metas de reducir a la mitad la incidencia de la pobreza, cortar en dos tercios la mortalidad posnatal e infantil, así como matricular a todos los niños en la escuela primaria. Hoy esas metas están en riesgo, y debemos sacar lecciones de la experiencia reciente para ayudarnos a reformular nuestras estrategias para el futuro''.

En el marco de la reunión de primavera del Fondo Monetario Internacional y del BM, Wolfensohn insistió en que los países en desarrollo deben hacer hincapié en el tema de la pobreza para evitar nuevos colapsos macroeconómicos y financieros, pero evitó dar soluciones concretas a los problemas.

Sobre México, el reporte indicó que la expectativa de vida aumentó de 67 a 72 años entre 1980 y 1997; la mortalidad infantil se redujo de 51 a 31 muertes por cada mil nacimientos y el producto interno bruto (PIB) totalizó 402 mil millones de dólares en 1997. El ingreso per cápita se ubicó en 3 mil 700 dólares en ese año, lo que permitió ubicarlo como nación de ''ingreso medio alto'' entre los países en desarrollo.

Según el BM, el crecimiento promedio poblacional por año de ese país fue de 2 por ciento entre 1980 y 1997 y pronosticó que promediará 1.3 por ciento de 1997 al año 2015. Agregó que el desempleo aumentó de 2.2 por ciento en 1990 a 4.5 por ciento en 1997, mientras que los trabajadores mexicanos laboraron un promedio de 34 horas a la semana, entre 1990 y 1994. El salario mínimo se redujo de un promedio de mil dos dólares entre 1980-84, a 843 dólares en el periodo 1990-94.

Con base en la muestra sobre la línea internacional de pobreza realizada en 1992 por el BM, se sabe que 14.9 por ciento de los mexicanos sobreviven con menos de un dólar diario y 40 de cada 100, con menos de dos dólares.

Las sucesivas crisis en Asia, Rusia y Brasil amenazan con revertir los adelantos que se habían logrado en reducción de la pobreza en esas regiones, mientras en África las tasas de mortalidad adulta aumentaron abruptamente por causa del sida. ''Todas las regiones en desarrollo han perdido impulso en el logro de sus metas de reducción de pobreza'', agregó el informe.

El reporte hizo énfasis en la necesidad de que los países en desarrollo cuenten con mejores sistemas de salud y educación porque de lo contrario, el problema de la pobreza mundial seguirá creciendo.

 

La situación asiática

Entre 1990-97, los países de Asia oriental y meridional, así como las mayores economías en transición (que pertenecían al bloque socialista), estaban creciendo a tasas superiores a 5 por ciento anual, suficiente para reducir en 50 por ciento la pobreza en el año 2015, pero después de la crisis, solamente Asia del sur y China siguen con posibilidades de lograrlo. Asia oriental fue la región más golpeada por la crisis y su ingreso per cápita promedio cayó el año pasado por primera vez desde 1970, indicó el informe.

En Indonesia, la crisis creó 22 millones de nuevos pobres, y para Filipinas los efectos representarán una década adicional para lograr su meta de reducir a la mitad el número de pobres. En los países en desarrollo de Europa y Asia central, la crisis produjo más de cien millones de nuevos pobres.

En los países de la antigua Unión Soviética, en 1989 había 14 millones de personas sobreviviendo con menos de 4 dólares diarios, mientras que a mediados de esta década, el número aumentó a 147 millones, es decir, a una de cada tres personas. El sida también está amenazando el desarrollo de África, donde el 29 por ciento de la población de entre 15 y 49 años de Zimbabwe está infectado por el virus VIH; en Botswana lo está el 25 por ciento, y más de 10 por ciento en otros 9 países subsaharianos.

Aunque el número de personas que sobreviven bajo la línea de pobreza es asombroso, el informe indicó que las tendencias negativas podrían revertirse con tasas de crecimiento económico de entre 4 y 5 por ciento, siempre y cuando no haya nuevos incrementos en la desigualdad. Pero el reporte advirtió que una recuperación rápida no está asegurada, después de que la tasa de crecimiento de los países en desarrollo cayó de 4.8 por ciento en 1997, a 1.9 por ciento en 1998 y de una probable nueva disminución a 1.5 por ciento este año, aunque espera que para el 2000 la tasa de crecimiento promedio volverá a los niveles de 1991-97, cuando promedió 3.1 por ciento.