n Informe de Actividades 1998 del consulado mexicano en Los Angeles


La frontera norte, trampa mortal desde 1994

n Los operativos estadunidenses desplazaron el cruce de indocumentados a puntos más peligrosos

David Aponte n Desde hace cinco años, al comenzar los operativos antiinmigrantes, la frontera México-Estados Unidos es una trampa de muerte para muchos mexicanos que buscan ingresar al territorio estadunidense. Pero el interior no es menos peligroso; el condado de Los Angeles registró 101 muertes violentas de connacionales --con armas de fuego y blancas, por suicidio y accidentes automovilísticos-- en 1998, de acuerdo con un informe elaborado por el consulado mexicano en esa ciudad de California.

Los migrantes de origen mexicano padecieron los abusos de los traficantes de seres humanos, la violencia en las calles de Los Angeles y, al mismo tiempo, las redadas de los elementos del Servicio de Inmigración y Naturalización en fábricas y residencias para la virtual "caza" de indocumentados, se indica.

El Informe de Actividades 1998 del consulado general de México en Los Angeles, a cargo de José Angel Pescador, expone que ese año fue uno de los más trá- gicos en la historia de la migración mexicana hacia Estados Unidos por el número de muertos en la franja (aproximadamente 300, de acuerdo con datos de la Secretaría de Relaciones Exteriores), principalmente en el condado Imperial, vecino a la ciudad de Tijuana.

Las medidas antiinmigrante de EU han tenido "cierto éxito"

En el documento se señala que, desgraciadamente, las cifras otorgan cierto éxito a las medidas antiinmigrantes que Estados Unidos puso en práctica en otros puntos fronterizos para combatir este fenómeno socioeconómico, en la medida en que desplazan a los migrantes hacia áreas más peligrosas de cruce.

"Esta representación consular efectuó campañas de información dentro de la comunidad mexicana para evitar que sus familiares cruzaran la frontera por esos puntos; además, brindó apoyo económico a connacionales para que trasladaran a México los restos de sus seres queridos que fallecieron de este lado en circunstancias diversas. La problemática fronteriza se vive de cerca en esta ciudad, toda vez que más de 60 por ciento de los migrantes tiene como destino final o enlace Los Angeles", agrega.

El documento explica que el consulado ofreció asistencia a los familiares de los migrantes muertos en Los Angeles, fundamentalmente para los trámites ante las oficinas del forense, del seguro social, de crímenes violentos, las agencias funerarias y los patrones, así como la gestión de visas humanitarias, recuperación de pertenencias, llamadas telefónicas y localización de familiares en México.

En un listado presenta el número de migrantes mexicanos que murieron y fueron atendidos en esa circunscripción de la representación consular en 1998: 204 connacionales, de los cuales 101 perecieron en condiciones violentas --por arma de fuego o blanca, suicidios o accidentes automovilísticos.

Según las estadísticas del consulado mexicano en esa ciudad californiana, 24 connacionales fallecieron por tiros de arma de fuego y 77 por arma blanca, suicidios y accidentes automovilísticos.

Del total de mexicanos fallecidos en Los Angeles durante 1998 en circunstancias de violencia se desglosa: catorce en enero, siete en febrero, diez en marzo, cinco en abril, nueve en mayo, diez en junio, doce en julio, diez en agosto, siete en septiembre, cinco en octubre, siete en noviembre y cinco en diciembre.

La representación mexicana ubicó en 32 años el promedio de edad de los migrantes que murieron en hechos violentos en esa ciudad californiana.

El informe detalla otros aspectos de violencia que encararon los connacionales: abusos de traficantes de seres humanos en el lado mexicano y redadas del SIN en fábricas y residencias en el interior de Estados Unidos.

"Lamentablemente, este año se recibieron 14 denuncias sobre graves conductas ilícitas de los traficantes de migrantes, principalmente en la zona de Los Algodones, Baja California. Los delitos más frecuentes en este rubro fueron el secuestro de personas que iban a cruzar la frontera, la violación de menores de edad y el abandono de los migrantes en el desierto, sin agua y sin provisiones", señala.

Todas estas denuncias fueron canalizadas a las autoridades competentes de México, se asegura, además de que se inició una campaña de información entre la comunidad mexicana con el objetivo de que no pusieran la vida y la integridad de sus familiares en manos de los traficantes de migrantes.

Autoridades federales de EU, implicadas en arbitrariedades contra mexicanos

Los abusos contra connacionales ocurrieron también en el interior del territorio de Estados Unidos, con la participación de las autoridades federales.

El texto del consulado explica que las autoridades migratorias estadunidenses realizaron operativos de localización y redadas en fábricas y residencias para detener a migrantes indocumentados, a principios de 1998.

"El consulado general de México manifestó que este tipo de medidas eran discriminatorias y violatorias de los derechos humanos, por lo que se promovieron inmediatamente reuniones con las autoridades del SIN. Las conclusiones de dichas entrevistas redujeron considerablemente las acciones y se logró que las autoridades migratorias informaran previamente a este consulado cuando iban a darse este tipo de diligencias, dando margen a que el personal del Departamento de Protección (de la representación mexicana) vigilara que se cumpliera con el procedimiento legal y se respetaran los derechos humanos de nuestros compatriotas", detalla.

No obstante los esfuerzos diplomáticos, precisa que el consulado mexicano no ha logrado que las autoridades estadunidenses encargadas de la aplicación de la justicia lleven a cabo la notificación consular correspondiente a la representación de México cuando detienen a los connacionales indocumentados. La dificultad obedece a la estructura y sistema gubernamental de California, y particularmente al de Los Angeles, aclara el documento.

Más de 20 mil repatriados en 1998

El reporte consular agrega que en el periodo de referencia, 20 mil 746 migrantes fueron repatriados a México desde Los Angeles por las autoridades migratorias de Estados Unidos: 5 mil 762 con antecedentes criminales, 4 mil 749 sin antecedentes delictivos y 10 mil 235 por salida voluntaria.