n Opinan representantes de varios partidos
El conflicto por las cuotas puede enrarecer más el clima político
Andrea Becerril y José Antonio Román n En medio de acusaciones contra dirigentes del Partido de la Revolución Democrática, y con el exhorto de encontrar una pronta solución al conflicto en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), representantes de PRI, PAN y del Grupo Democracia 2000 advirtieron que el conflicto en la máxima casa de estudios podría irse por un camino sin control que enrarecería aún más el ambiente político del país.
El dirigente nacional del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, acusó a "algunos elementos del PRD ųno dio nombresų, de intervenir directamente en el conflicto universitario, y asentó que aquellos partidos políticos que se sientan tentados a usar la violencia para resolver conflictos, definitivamente no pueden ser opción para el pueblo de México. "No es a través de la violencia ni a través de la injerencia de intereses políticos de la universidad como se puede ayudar a resolver los problemas de esta institución que es valiosa, importante e imprescindible para el progreso de los mexicanos".
Por separado, la presidenta de la Comisión de Educación del Senado de la República, Elba Esther Gordillo, afirmó que nunca como hoy hemos necesitado buscar elementos conciliadores y negociadores para solucionar el conflicto en la UNAM sin afectar a los estudiantes, pero tampoco los intereses de la institución.
La también dirigente del sector popular del PRI señaló que en estos asuntos siempre hay mucho de político, pero creo que falta claridad de lo que realmente está en juego: lo de las cuotas es importante, pero lo central, de fondo, es que se requiere una reforma fiscal integral que otorgue mayores recursos para la educación, un presupuesto que la ponga como prioridad. Es uno de los temas, dijo, que se tratarán en la reunión que los integrantes de la Comisión sostendrán con el rector Francisco Barnés.
Jorge Avendaño, dirigente de la corriente denominada Democracia 2000, afirmó que el conflicto en la UNAM tiene su origen en el uso político que pretenden dar al conflicto de las cuotas los aspirantes a la candidatura presidencial. Agregó que los aspirantes utilizan la discusión sobre las cuotas para tener un parámetro sobre quién puede obtener el voto de los universitarios de cara a las elecciones del año 2000, y ahí están metidos todos los aspirantes, aunque aclaró que "del PRI no digo nada, para no meternos en problemas".
Sin embargo, el priísta no dudó en señalar a Diego Fernández de Cevallos y al PRD de tener grupos afines, involucrados en el conflicto de la UNAM. Para ellos, comentó, la universidad se ha convertido en un laboratorio político, en una arena.
Luis Felipe Bravo Mena señaló que el PAN considera "atendible" la propuesta de que los alumnos aporten recursos en la medida de sus posibilidades económicas, para financiar su preparación y liberar así dinero que puede ser utilizado en soportar y apoyar a quienes más lo necesiten, mejorando al mismo tiempo la calidad profesional de los universitarios.
La propuesta en todo caso, agregó el dirigente nacional de Acción Nacional, hay que discutirla y analizarla, pero sin violencia y dentro de la universidad.
"Llamamos la atención en un rechazo y condena a la injerencia de organizaciones o de intereses políticos ajenos a la universidad, cuyo verdadero propósito es obtener una rentabilidad política o electoral ante esta situación, o generar condiciones de violencia, inestabilidad y confusión que, según sus cálculos, les pueden resultar favorables para un escenario electoral.