n Pide unidad y diálogo
En México, pobreza creciente y dolorosas divisiones: CEM
José Antonio Román n Ante un México "fragmentado", con una pobreza creciente que hace más profundas y dolorosas las divisiones, se hace indispensable el diálogo y el respeto a las diferencias, afirma la Conferencia del Episcopado Mexicano, en el documento final de su 66 asamblea plenaria.
El documento hace un análisis sobre la realidad política, económica, social y religiosa del país, en el cual se destaca la necesidad de que el país se mantenga unido, en diálogo y respetando las diferencias entre los diversos partidos y sectores sociales.
Leído por el presidente de la conferencia episcopal y arzobispo de San Luis Potosí, Luis Morales Reyes, el texto de tres cuartillas señala que la Iglesia católica está por la verdad, la vida y la participación ciudadana; y da un "no rotundo a la corrupción y la mentira; un no rotundo al abstencionismo y a la apatía; un no rotundo al dinero fácil y al consumismo".
Durante los cinco días de trabajos de la asamblea plenaria, la jerarquía eclesiástica se reunió también con funcionarios del gobierno federal. El martes por la tarde, los obispos recibieron en su sede de Lago de Guadalupe al secretario de Desarrollo Social, Esteban Moctezuma, quien incluso cenó junto a ellos; y el jueves, "en una visita de cortesía", se entrevistaron con Humberto Lira Mora, nuevo subsecretario de Asuntos Religiosos de Gobernación.
Onésimo Cepeda, obispo de la diócesis de Ecatepec y presidente de la Comisión Episcopal de Comunicación Social, afirmó que ninguno de estos encuentros tuvo un objetivo de carácter político, sobre todo el del secretario de Desarrollo Social ųa quien se le menciona como precandidato del PRI a la Presidencia de la Repúblicaų, ya que durante la reunión, Moctezuma detalló los 13 puntos del Programa contra la Pobreza que lleva a cabo el gobierno federal. El funcionario se ofreció para dar esta explicación al enterarse de que la reunión episcopal abordaría también temas sociales.
Al analizar la situación religiosa que vive el país, los obispos señalaron una creciente preocupación al constatar realidades que contradicen la identidad cristiana del pueblo de México. El texto advierte una "evangelización superficial", que se queda sólo en las formas y tradiciones populares, pero que tiene poca trascendencia en el quehacer social y en la transformación de las estructuras sociales injustas.
De igual forma, el documento destaca que aun cuando se ha incrementado en la última década la cantidad de vocaciones sacerdotales, todavía es insuficiente el número de religiosos para dar un impulso a la nueva evangelización a que ha llamado el papa Juan Pablo II y para responder, de manera eficaz, a los retos de la sociedad contemporánea.
"Una sociedad solidaria sólo puede construirse en la promoción y defensa de los derechos, sin olvidar que todo derecho lleva una obligación correlativa. Anhelamos una sociedad en la que ninguna institución u organismo atente contra la vida ni contra el derecho de todos los hombres y las mujeres para buscar a Dios según el dictamen de su propia conciencia", dice el mensaje de los obispos, quienes durante cinco días analizaron colegiadamente el Sínodo de América, entregado por Juan Pablo II en su reciente viaje a México.
Más adelante se dice que, ante el panorama que vive el país, se pueden encontrar en la doctrina social de la Iglesia pautas para buscar soluciones concretas a los problemas sociales.
de México. Así, ante la globalización de la economía, la Iglesia sostiene que hoy también se hace necesaria e imprescindible la globalización de la sociedad. "Es urgente la solidaridad con la mujer, con los enfermos y los minusválidos, con los marginados del medio urbano y con los más pobres que son los campesinos, los indígenas y los migrantes".
Durante la última conferencia de prensa, a pregunta expresa, el presidente de la CEM señaló que en su oportunidad y como lo ha hecho en las últimas elecciones federales, los obispos presentarán una carta pastoral sobre la sucesión presidencial del año próximo, en la que invitarán a la ciudadanía a participar y a los partidos políticos y al gobierno a conducirse dentro del marco de la ley.
Los trabajos de la asamblea concluyeron poco después del mediodía, pues 40 de los casi 100 obispos que participaron en ella viajaron por la tarde a la ciudad de Tuxtla Gutiérrez para celebrar hoy sábado los 25 años de sacerdote del obispo de esa diócesis, Felipe Aguirre Franco. Hoy por la mañana viajarán otros 20 prelados a la capital chiapaneca para asistir también a la celebración religiosa. El obispo Cepeda explicó que el nutrido número de obispos que asistirán a este evento se debe a que con ello pretenden respaldar la tarea pastoral de Aguirre Franco.