n El presidente Zedillo me hizo explícito su desacuerdo, admite Chrétien


Cuestionó México el papel de Canadá en el conflicto de Kosovo

n La preocupación se extiende también a los refugiados, precisa la canciller Rosario Green

Rosa Elvira Vargas y Enrique Méndez n México hizo explícito ayer su desacuerdo con Canadá por su posición, como país miembro de la OTAN, en el conflicto en la zona de los Balcanes, admitió el primer ministro canadiense, Jean Chrétien, luego de sostener un encuentro privado con el presidente Ernesto Zedillo.

Chrétien, quien realiza una visita de Estado al país, señaló: ''En mi reunión con el presidente Zedillo discutimos la posición de Canadá, como país de la OTAN, y él me dijo que está en desacuerdo con nosotros y refrendó los principios de la política exterior de México''.

En abono a lo anterior, la canciller mexicana, Rosario Green, resaltó que Zedillo lo que habría hecho ante el visitante canadiense fue defender la posición de México, la cual es internacionalmente conocida e incluso está plasmada en la Constitución, y se refiere a la oposición a la amenaza o al uso de la fuerza, donde quiera que ésta se utilice.

Se trata entonces, añadió la funcionaria, de una oposición a la OTAN ''exclusivamente'', pero en este caso, la preocupación mexicana se extiende también a los refugiados y a aquellas políticas que pretenden acabar con grupos por cuestiones étnicas o religiosas.

Para la secretaria Green, otro tema de este conflicto bélico que es importante para México tiene que ver con el uso de la fuerza sin aprobación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que es quien tiene la posibilidad de dar un mandato preciso a algún organismo regional, como es en este caso la OTAN.

Hemos negociado de buena fe...

Por su parte, Jean Chrétien había argumentado que él, por su parte, explicó al mandatario mexicano ''hasta qué punto hemos negociado en buena fe, tanto en Belgrado como con los kosovares a través de las conversaciones de Rambouillet, y que (Slobodan) Milosevic sabía perfectamente bien cuál era la alternativa al no firmar esos acuerdos''.

El ministro indicó que la cuestión de la limpieza étnica en Yugoslavia es algo que lleva dándose desde hace varios meses. ''Ustedes saben que la juez de la corte trató de ir en diciembre para verificar, tanto la evacuación como cuestiones de matanzas de los kosovares, así que el señor Milosevic sabía perfectamente bien a qué se atenía'', añadió.

La visita de Estado a México de Chrétien se da un año después de que no pudo encabezar entonces el llamado team Canadá, debido a una serie de tormentas de hielo que afectaron varias provincias de su país. Ayer, fue firme al defender la participación canadiense en el conflicto de Kosovo.

Planteó así que en las negociaciones de Rambouillet todos, incluyendo a los rusos, querían que se firmara un acuerdo y que todos, también, sabían que si ese documento no era suscrito por Milosevic, ''se iban a realizar los bombardeos. Lo único que nosotros queremos, y que todos quieren, es la paz y ésta es muy fácil para Milosevic: sólo debe permitir que los refugiados puedan regresar a sus hogares en condiciones de seguridad y con eso nosotros quedamos contentos''.

Y advirtió enseguida: ''Si él continúa con la limpieza étnica, si sigue echando a estas personas de sus casas y expulsándolos de su país, entonces nosotros estamos allí para protegerlos''. También comentó que Canadá está dispuesto a recibir a cinco mil refugiados albanokosovares en su territorio.

Chrétien finalizó el tema de la participación de su país en el conflicto yugoslavo, asegurando no tener información sobre un eventual emplazamiento de misiles rusos hacia la zona de conflicto.

La situación de Chiapas

En la misma conferencia de prensa, el ministro canadiense declaró que en sus conversaciones privadas con el presidente Zedillo ''discutimos la situación de Chiapas'', donde el mandatario mexicano le ofreció un informe sobre los avances que se han logrado, aunque admitió que ''subsisten problemas''.

Jean Chrétien consideró que ''evidentemente, es difícil (resolver) cuando no hay acuerdo por una de las partes para que haya participación del gobierno central'', pero enfatizó que el presidente Zedillo ''sí me ha asegurado que no hay intenciones de utilizar la fuerza en una situación como ésta''. Dijo que a su vez, expuso al mandatario las preocupaciones canadienses en ese tema y cómo se manifiestan de manera abierta en su país, y que a cambio recibió un informe ''muy cándido, muy abierto, y el debate fue muy franco''.

Momentos antes del encuentro con los periodistas ųque la delegación canadiense decidió cambiar de hora y de sede y realizarla en la propia casa presidencialų se habían signado los siguientes documentos bilaterales: Declaración de objetivos de la relación bilateral México-Canadá y Plan de Acción; Tratado entre los dos gobiernos, concerniente a la prestación de servicios por satélite; Acuerdo modificatorio mediante canje de notas diplomáticas del Convenio Sobre Transportes Aéreos entre los dos países, de 1961.

Asimismo, se signó una declaración conjunta entre la Secretaría de Salud de México y el Departamento de Salud de Canadá, para realizar actividades de cooperación relacionadas con tabaquismo, envejecimiento, abuso de drogas y otras sustancias, vigilancia epidemiológica y técnicas de laboratorio, sida, salud ambiental y sanidad internacional.

Por último, los dos países firmaron una carta de intención sobre la cooperación en materia de tecnología e información sobre incendios forestales, entre la Semarnap y el Servicio Forestal Canadiense.

En la ceremonia oficial de bienvenida, que tuvo lugar en el Campo Marte, el presidente Ernesto Zedillo expresó al visitante que a mexicanos y canadienses los animan los mismos valores fundamentales como la libertad, la democracia y la justicia, y los alientan objetivos claros como la edificación de una nación con buenas oportunidades para todos y equidad social.

Resaltó asimismo, que los dos países avanzan hacia una alianza estratégica donde se examinan, con ''espíritu abierto y diálogo constructivo'', temas tan variados como el fomento a la educación, la promoción del turismo, los asuntos laborales, el combate al narcotráfico, la protección del medio ambiente y la cooperación para el desarrollo.

Zedillo dijo a Chrétien que lo recibe un pueblo que se esmera en conseguir un crecimiento dinámico y duradero como base para la prosperidad, y que está resuelto a que su normalidad democrática sea la base de su estabilidad política, y a que la ley sea invariablemente la base de la justicia.

En respuesta, el ministro canadiense dijo que los dos países comparten una dedicación a la democracia y al régimen de derecho, y que tienen intereses y valores que los hacen socios naturales.

Cena en Palacio Nacional

Por la noche, en la cena que se le ofreció en el Salón de la Tesorería de Palacio Nacional, Jean Chrétien reconoció el compromiso del presidente Ernesto Zedillo con la reforma política, con el impulso de libre comercio y de la seguridad no sólo nacional sino de otros países, ''que es ejemplo'' para otros gobiernos.

Además, expresó que Canadá se siente orgulloso de haber trabajado con el gobierno mexicano en el impulso de la prohibición del tráfico de armas ilegales y de la destrucción de minas antipersonales, así como en la ayuda que se ha otorgado a las víctimas de estos artefactos en Centroamérica. Como durante todo el día, Chrétien se refirió a las bondades del Tratado de Libre Comercio que, dijo, en cinco años ha llevado prosperidad a los países que lo suscribieron.

Por su parte, el presidente Ernesto Zedillo se refirió al sustrato común de los dos héroes míticos de Canadá y México: Asdiwal y Quetzalcóatl, quienes ''salvaron a sus pueblos de la más terrible de las amenazas: la muerte por hambre''.

Mientras que Asdiwal obtuvo una inagotable producción de alimentos con los objetos mágicos que le entregó su padre, Quetzalcóatl, con la ayuda de las hormigas, encontró una montaña de maíz. Estos ejemplos, señaló Zedillo, representan el bienestar que las sociedades humanas deben buscar con unión y ahínco.