n Sugieren descentralizar


Investigadores del INAH piden que la sociedad participe en el instituto

Gustavo Castillo García n Investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) propusieron que esa institución se abra a la participación de la sociedad civil en la toma de decisiones, que transforme sus estructuras administrativas y operativas para hacerla más eficiente y también que dichos cambiosvayan acompañados de una reforma legislativa acorde a los tiempos actuales y circunstancias político-sociales para evitar que el organismo actúe con una ley desfasada en la protección del patrimonio cultural.

Al participar en la mesa redonda La Protección del Patrimonio Cultural de cara al Nuevo Milenio, los investiga- dores coincidieron en la necesidad "impostergable de descentralizar la actividad del INAH, sin que eso signifique su desaparición".

Los investigadores Luis Gerardo Morales, Felipe Solís, Carlos Aguirre, José Luis Sierra y Felipe Lacouture expusieron la necesidad que tiene el INAH de tener una mayor visión de lo que significa el patrimonio cultural de México, a partir de que "no existen expresiones homogéneas en todo el país", sino policulturales, por lo que Aguirre señaló: "el instituto debe ser sensible a la participación de la sociedad civil en la toma de decisiones".

Si bien durante el debate se consideró que existen grupos y cotos de poder que se han generado en su interior, "la experiencia debe aprovecharse para no repetir errores y ser más eficiente a partir de una nueva concepción de lo que es el patrimonio cultural actual y pasado".

Carlos Aguirre puntualizó: "La sociedad ha perdido confianza en el INAH, debido a intereses de distintos tipos, debe recuperarla acrecentando los conocimientos con que se cuenta".

El investigador señaló en su exposición que es necesario descentralizar al INAH, pero de una manera en que estados y municipios sean corresponsables del cuidado del patrimonio cultural del país y no sólo mediante medidas administrativas.

Por su parte, Miguel Angel Fernández subrayó la necesidad que tiene el instituto de "dejar de ser un monopolio de investigación y protección del patrimonio cultural, porque la sociedad debe ser la primera que detente el patrimonio, pues ella lo reclama".

Felipe Solís insistió en reiteradas ocasiones la necesidad de contar con una legislación actualizada para mejorar la labor del INAH, ya que, dijo, "existe un desfasamiento entre la estructura legal y la legislación".

Agregó que es necesario "romper estos gremialismos", debido a que sólo en INAH tiene la capacidad actual de investigar y proteger el patrimonio histórico en todos los campos a través de sus investigadores.

Luis Gerardo Morales dijo que se hace necesario discutir al interior del INAH "cómo crear nuevos espacios de decisión, por lo que se requiere redefinir y revisar una nueva forma de trabajo en medio de la pluralidad".

Al referirse a los retos del instituto para las próximas décadas, Felipe Solís consideró que el INAH debe realizar "autoanálisis, revisarse al interior, saber con lo que cuenta y ver si la ley le ayuda para llevar a cabo su tarea de protección del patrimonio en los ámbitos generales o no".

En ese sentido, Felipe Lacouture indicó que debe adaptarse a una nueva visión del patrimonio, "de acuerdo a la sociedad actual, debe crear una infraestructura para dar pie a la ley y también a la cultura, porque no le es posible trabajar de manera aislada de otras instituciones relacionadas", como lo es el INBA.

José Luis Sierra consideró que la dependencia debe abrirse y reconocer que la sociedad mexicana está viviendo una mayoría de edad, "que hay grupos y fuerza que han tomado de una manera muy responsable lo que por muchos años fueron tareas exclusivas del INAH".

Carlos Aguirre manifestó que en el corto plazo "el reto que tiene es justamente una defensa efectiva del patrimonio", en el cual la sociedad sea parte actuante.