n La OTAN respondió con la intensificación de los bombardeos


Yugoslavia, dispuesta a acuerdo con Rugova; decreta tregua unilateral

n Insuficiente, la iniciativa, señalan EU y sus aliados n Repudio por el ataque a un pueblo minero

Afp, Ap, Dpa, Reuters, Tanjug y Xinhua, Belgrado, 6 de abril n Yugoslavia proclamó hoy una tregua unilateral y su disposición a llegar a un acuerdo con el líder moderado de origen albanés, Ibrahim Rugova, para encontrar una salida política al conflicto en la provincia serbia de Kosovo y el retorno de los cientos de miles de desplazados, pero la iniciativa fue calificada como insuficiente por Estados Unidos y sus aliados, que intensificaron sus bombardeos contra esta nación balcánica.

En lo que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) calificó de "buenos resultados", aviones de combate realizaron cuatro oleadas de ataques en la noche del lunes al martes, durante la cual alcanzaron cuarteles militares, depósitos de combustibles así como una planta de energía.

Los aviones de la OTAN retornaron a sus bases sin novedad, aseguró la OTAN sin precisar, como ha sucedido desde el comienzo de los bombardeos, el pasado 24 de marzo, cuántos cazas participaron en los ataques que hasta ahora han dejado más de 300 muertos, según Borislav Milosevic, hermano del presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, quien es embajador de su país en Rusia.

Pero en los raids de anoche hubo daños "colaterales" que provocaron la muerte de siete civiles y heridas a 28 más, según balances provisionales recogidos por Afp.

Una bomba de 245 kilogramos guiada por láser y lanzada por un avión estadunidense sobre el pueblo minero de Aleksinac, a unos 200 kilómetros al sur de Belgrado, falló su blanco e impactó contra un edificio de apartamentos, reconoció el vocero del Pentágono, Kenneth Bacon, quien explicó que "una de las razones por las que esto pudo haber pasado es que las nubes hayan interferido con el mecanismo de guía de rayos láser".

"Hay riesgos en toda operación de combate, y esos riesgos pueden ser minimizados pero no evitados", añadió Bacon.

El comandante aéreo de la OTAN, general David Wilby, afirmó que "el daño no es intencional" y es "lamentado profundamente", mientras el secretario británico de Defensa, George Robertson, estimó que en toda guerra ocurren accidentes y que "a pesar de todos nuestros esfuerzos habrá algunas víctimas inevitables en una campaña de esta envergadura y complejidad".

El alcalde de Aleksinac, Slobodan Stevanovic, aseguró que unas 400 viviendas de esa población de 25 mil habitantes quedaron inhabitables.

Los habitantes de Aleksinac, relató Afp, no comprendían lo que ocurrió. "ƑContra qué pudo apuntar la OTAN si no hay ningún objetivo militar en los alrededores?", preguntó Zora Mirkovic, cuya casa quedó con el techo totalmente hundido.

Y es que las bombas de los aviones de la OTAN destruyeron, entre otros, un centro médico, otro de urgencias, una clínica dental, el edificio de la seguridad social y el del banco Jugobanka.

Varias empresas comerciales y una fábrica de instalaciones eléctricas quedaron fuera de servicio, consignó Afp.

Pero si los bombardeos de la anoche fueron mucho más intensos que los precedentes, los de esta noche se perfilaban peor. A las 23 horas se registraron una serie de explosiones en Belgrado; una planta química en Lucani, unos cien kilómetros al sur de Belgrado, fue atacada con siete misiles

También a esa misma hora, pero en Pristina, capital de la provincia serbia de Kosovo, se escucharon 18 explosiones en un lapso de 10 minutos.

En Montenegro, que no había sido bombardeada desde el pasado 31 de marzo, fue destruido un polígono de tiro del ejército, al norte de Podgorica, la capital. Otro proyectil cayó en Zabjela, barrio periférico al sur de Podgorica, en donde se escuchaban intensos tiros de la defensa antiaérea.

Por lo pronto, unas 200 personas, entre ellas el rector y los decanos de las 30 facultades así como estudiantes de la Universidad de Belgrado, se apostaron esta noche en el puente de Brankov, que pasa sobre el río Sava, a fin de protegerlo de bombar- deos de la OTAN; la alianza noratlántica destruyó ya los tres puentes de Novi Sad, la segunda ciudad en importancia de Serbia.

Horas antes, miles de jóvenes se congregaron en el concierto rock, rutina obligada de la población belgradense para manifestar su rechazo a los ataques de la OTAN.

"Solo tengo una vida y la quiero", cantaron miles de jóvenes que portaban una figura de tiro al blanco, que se ha convertido en el símbolo de la resistencia a la agresión de la alianza.

La OTAN rechazó que Belgrado hubiera abatido dos de sus cazas, como lo aseguró la televisión serbia, mientras Hungría denunció que dos aviones Mig-29 yugoslavos violaron ayer su espacio aéreo, aunque lo abandonaron apenas se les acercaron aviones de la alianza atlántica.

El vocero de la OTAN, Jamie Shea, sostuvo que Slobodan Milosevic "es responsable de un tipo de desplazamiento de población que no habíamos visto desde la época de José Stalin", mientras el presidente yugoslavo denunció que "los crímenes de los nuevos nazis han superado los de la Segunda Guerra Mundial. Quienes han ordenado y ejecutado el bombardeo de los mineros de Aleksinac y de sus familias no tienen nada en común con el género humano".

Mientras, los gobiernos de Yugoslavia y de Serbia anunciaron que, tomando en cuenta los recientes encuentros de Rugova con Milosevic y el vicepresidente Nikola Sainovic, decidieron "interrumpir unilateralmente, en honor a las Pascuas, que son la más grande fiesta cristiana, todas las actuaciones del ejército y la policía en Kosovo en contra de la organización terrorista Ejército de Liberación de Kosovo a partir del día de hoy a las 20 horas".

Dispusieron que representantes de los gobiernos federal y de Serbia "empiecen, en colaboración con los representantes albaneses representados por el doctor Ibrahim Rugova, la preparación del acuerdo político", y "preparar conjuntamente" con éstos "el programa para el regreso de los refugiados con la adecuada participación del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados y el Comité Internacional de la Cruz Roja".

La televisión serbia reportó que la tregua comenzó a regir esta noche, y subrayó que más allá de los ataques de la OTAN, la situación en Kosovo era tranquila.

Pero la oferta fue rechazada por Estados Unidos y sus aliados de la OTAN. Justo el pasado 30 de marzo, Milosevic manifestó su disposición a reducir la presencia militar en la provincia serbia de Kosovo, una vez que la alianza atlántica cesara los bombardeos contra su país, pero ese ofrecimiento fue rechazado también.

El presidente Bill Clinton dijo que para detener los ataques Milosevic debe retirar "a su policía militar y sus fuerzas paramilitares" de Kosovo, y aceptar el despliegue de una fuerza internacional "para proteger no sólo a los albano-kosovenses, sino también a la minoría serbia de Kosovo. No estamos a favor de lo crímenes de odio de nadie, sino de hacer posible que retornen todos los refugiados. Y avanzar hacia un marco político basado en los acuerdos alcanzados en Francia".

En tanto, el secretario de prensa de la Casa Blanca, Joe Lockhart, reiteró que no se enviarán tropas a Kosovo, y en similares términos se expresó la secretaria de Estado, Madeleine Albright, quien en un acto con motivo de los 50 años de la OTAN dijo que ésta debe estar preparada para "más Kosovos", y sugirió que Milosevic podría ser juzgado por crímenes de guerra.

El secretario general de la OTAN, Javier Solana, así como los jefes de Estado o de gobierno de Gran Bretaña, Alemania, Italia y Francia, entre otros, también consideraron, por separado, que la tregua decretada por Yugoslavia era "insuficiente".