n El rector rechaza dimitir, lo cual es exigencia de opositores al aumento de cuotas
Barnés: el reglamento de pagos, vigente
en tanto los universitarios lo respalden
n Insta a la tolerancia a estudiantes que llaman a la suspensión de clases este miércoles
María Esther Ibarra n Un silencio antecedió a sus palabras. "šAy, por Dios, no, de ninguna manera!", exclamó el rector de la UNAM, Francisco Barnés de Castro, cuando se le preguntó si renunciaría como lo han exigido estudiantes opositores al incremento de cuotas.
Ante el movimiento para lograr la derogación del Reglamento General de Pagos, aseguró que llegará (en mantener la vigencia de este ordenamiento) "tan lejos como la comunidad universitaria esté dispuesta a respaldarnos", al tiempo que hizo un llamado a la tolerancia y al respeto a quienes promueven el paro de 24 horas para este miércoles, y les reiteró que el diálogo es el único camino para resolver los problemas entre universitarios.
En entrevista, luego de inaugurar ayer el octavo Festival de la Cultura 1999, en el Centro Cultural Universitario, negó que entre los estudiantes paristas hubiera violencia, pues convino que están en todo su derecho a disentir, y señaló que lo único que les pedía era externar sus puntos de vista dentro del marco de respeto que "nos merecemos los universitarios, independientemente del camino que escojan, y sin recurrir a la violencia".
De buen humor y hasta bromista con los reporteros, Barnés de Castro expresó su confianza en que los hechos violentos suscitados en las últimas semanas "sean estrictamente casuales".
Esto, en referencia al enfrentamiento ocurrido el miércoles pasado en el Colegio de Ciencias y Humanidades Sur, entre estudiantes de este plantel y un grupo de porros de la preparatoria cinco, hecho que el rector calificó de un "pleito de dos pandillas".
De tal suerte, precisó, "no vamos a permitir que estas cosas ocurran, y los estudiantes que participaron, tanto de uno como de otro lado, con lujo de violencia, serán consignados al Tribunal Universitario".
Especificó que el personal de la UNAM únicamente ha intervenido a fin de restablecer el orden en los planteles en los que ha habido actos de violencia, y para hacer las consignaciones correspondientes, tanto a las autoridades civiles del Distrito Federal como al Tribunal Universitario. En tal sentido, señaló que, en el caso de Inti Muñoz, no le competía juzgarlo.
Durante el encuentro con los reporteros, en tres ocasiones se les insistió sobre la demanda de su renuncia, y reiteró que no lo haría, pero concedió que "están en todo su derecho de plantear sus puntos de vista y defender sus posturas con argumentos".
Barnés dijo desconocer la existencia de un grupo (Deber Universitario: Análisis y Crítica) que estuviera financiado por rectoría o promovido por hijos de funcionarios de la UNAM.
Por otra parte, fueron consignados ante el Tribunal Universitario los estudiantes Gildardo Enrique Velasquillo García y Armando Gómez Martín, por su participación en el paro del pasado jueves 11, acusados de utilizar "mobiliario diverso (entre otro un andamio y sillas) para bloquear las entradas del plantel Vallejo del Colegio de Ciencias y Humanidades". Ambos alumnos son los primeros remitidos ante esa instancia jurídica de la UNAM.
El director del plantel, Ramón Adán Paredes Pérez, presentó la consignación el pasado jueves 18, junto con las actas administrativas en las que se hace constar los hechos, y fotografías y un video.
De acuerdo con la versión de Paredes Pérez, el día del paro, como a las 9 horas, ambos estudiantes se presentaron en la dirección del plantel, junto con un "grupo de personas que se cubrían el rostro", profiriendo amenazas e insultos, para enseguida derribar la puerta de las oficinas del director.
Asimismo, se señala que el estudiante Gómez golpeaba con una barreta la parte exterior de la puerta de dicha oficina, provocando con ello "serios daños", e incitó a otros alumnos a "sacar al director y a su personal, afirmando que iban a tener que salir de un modo u otro".
El director general del CCH, José de Jesús Bazán Levy, afirmó que es lamentable para la UNAM y la institución bajo su cargo el informar de "estas penosas conductas". Sin embargo, se agregó en un comunicado de prensa, "sería más de lamentar el ocultarlas al escrutinio de nuestra sociedad".
A pesar de lo anterior, se informó que ocho adultos y cinco menores que fueron detenidos por participar en el enfrentamiento ocurrido en el plantel Sur del CCH, obtuvieron este fin de semana su libertad bajo fianza, sin importar que tienen responsabilidad en la agresión de dos estudiantes de esa institución educativa.