n Resultado de la entrada en vigor del TLC
Crecen importaciones de maíz y caen cotizaciones domésticas
Angélica Enciso L. n En los cinco años que tiene en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la producción de maíz ha enfrentado aspectos negativos, debido a que no se ha respetado el periodo de transición para la entrada del grano a México ųconsiderado en 15 añosų, las importaciones se elevaron drásticamente, los precios domésticos cayeron en promedio 40 por ciento y los apoyos con que contaba el cultivo se retiraron.
Lo anterior se advierte en el estudio Maíz en México: Algunas implicaciones ambientales del TLCAN, elaborado por Alejandro Nadal, y editado por la Comisión para la Cooperación Ambiental del acuerdo comercial. Se agrega que los programas que se establecieron con el tratado ųAlianza para el Campo y Procampoų no han respondido a las necesidades del sector.
El cultivo del maíz, que se realiza en 70 por ciento del suelo cultivable del país, se ha mantenido estable, a pesar de la caída de los precios y el aumento en las importaciones, lo cual rompió con las expectativas del gobierno respecto a la restructuración del sector, ya que se preveía que la superficie sembrada de ese grano sería reasignada a otros cultivos.
La producción permanece estable tanto en los estados donde se cultiva con tecnologías más intensivas en insumos y que ocasionan daños ambientales, como en las regiones más deprimidas en las que el cultivo se realiza con técnicas tradicionales.
En el análisis del organismo, en el que participan las dependencias responsables del Medio Ambiente de los tres países de América del Norte, se detalla que existen diversas reacciones de los productores de maíz: tendencia a modernizar el cultivo del grano para enfrentar desafíos planteados por las importaciones; sustitución por otros cultivos, y persistencia en la producción para el autoconsumo y el mercado local.
El organismo analiza los diversos impactos que se presentan en suelos, acuíferos y salud humana, por medio de plaguicidas y los recursos genéticos.
En relación con el último punto, un aspecto novedoso del análisis es el referente a la erosión genética, la cual se presenta con el desplazamiento de los productores de maíz que utilizan la variedad modificada del grano como parte medular de su estrategia productiva.
En México existen 41 razas de maíz y miles de variedades, con lo que México es el centro de diversidad genética de este grano, por lo que el abandono en la producción del grano implica graves consecuencias para la permanencia del material modificado, lo cual también puede ser determinante para la producción mundial.
Asimismo, se indica que el uso de tecnologías modernas, que requieren capital e información especial, puede dejar fuera del alcance a un gran número de productores, y es probable que las biotecnologías orienten la dirección de los cambios técnicos en la agricultura del futuro.
Ante ello, se agrega en el estudio, queda abierta la pregunta de si pueden aprovecharse para un sistema de producción ambientalmente más adecuado o si se agravarán las tendencias orientadas a un mayor uso de insumos sintéticos.
En el texto se menciona que la sustitución de cultivos con el fin de aprovechar los cambios en la estructura de los precios ha sido otra opción para los productores, ya que se tiene la idea de que cultivos más intensivos en mano de obra representan una opción con mayor ventaja comparativa.
En el caso de los cambios de tierras de cultivo a pastizales y plantaciones forestales, los efectos ambientales podrían ser importantes, ya que ello podría llevar a la pérdida de diversidad genética. En tanto, si el cambio es para otros granos los efectos ambientales podrían ser positivos.