n La nota vincula al general con el narcotráfico


Desestima Washington lo publicado por NYT sobre Cervantes Aguirre

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 16 de marzo n El Departamento de Estado y la embajada de México cuestionaron los alegatos aparecidos hoy en el diario The New York Times de que altos funcionarios del gobierno de Bill Clinton cerraron una investigación sobre supuestos vínculos del secretario de Defensa de México, general Enrique Cervantes, con el narcotráfico.

"En torno a las altamente especulativas imputaciones contra el general Cervantes, señalamos que es común que los narcotraficantes afirmen falsamente tener contactos de alto nivel en el gobierno mexicano", declaró el vocero del Departamento de Estado, James Rubin. "Continuamos trabajando de cerca con el general Cervantes en la lucha contra el narcotráfico", apuntó.

La embajada de México en esta capital entregó este martes una nota diplomática al Departamento de Estado solicitando que el gobierno estadunidense informe sobre la veracidad o no de las acusaciones que se citan en el Times. La legación calificó la nota como parte de una campaña "de desinformación anual" que se lleva a cabo para coincidir con el debate sobre la certificación y caracterizó el reportaje como "engañoso, tendencioso y difamatorio".

La amplia y bien formulada nota ubicada en la página principal de The New York Times, que ocupa casi una plana entera al interior, está basada en decenas de entrevistas y documentos judiciales, y presenta una serie de interrogantes sobre las decisiones del manejo de la operación Casablanca.

El agente del Servicio de Aduanas que encabezó esa operación, el ahora retirado William F. Gately, comentó al Times que los agentes encubiertos que trabajaban para el gobierno estadunidense habían sido informados en 1998 por banqueros corruptos mexicanos que deseaban blanquear dinero perteneciente al secretario de Defensa.

"El secretario tenía 500 millones de dólares en Nueva York, y otros 500 millones en Holanda, además de 150 millones en la ciudad de México", escribió el reportero Tim Golden, citando información de Gately. El agente de Aduanas dice que se le solicitó más información sobre Cervantes a la CIA, la cual respondió que no contaba con nada que indicara este tipo de actividades. Posteriormente, un banquero sostiene que el dinero no le pertenece sólo a Cervantes sino "a todos ellos, incluyendo al Presidente".

Voceros de la Secretaría de Defensa y de Presidencia negaron estas versiones, afirmando que carecían de todo fundamento, informó el Times.

Después del contacto inicial con el banquero, éste tuvo varias conversaciones más con agentes encubiertos de Aduanas sobre este asunto, pero los emisarios del general que se habían citado con los agentes estadunidenses encubiertos no se presentaron el 22 de abril del año pasado y, un mes después, altos funcionarios del gobierno de Clinton decidieron concluir Casablanca.

Según el diario, el agente Gately, quien se retiró en diciembre de 1998, nunca afirmó que Cervantes estuviera vinculado al narcotráfico, sino sólo cuestionó la decisión de sus superiores en Washington de cerrar una investigación que, en esos momentos, estaba generando nuevas posibilidades para examinar la posible participación de altos funcionarios en la corrupción. "Cualquiera que tuviera ese dinero, valía la pena perseguirlo, fuera el secretario de Defensa o alguien que desconocíamos", comentó Gately.

Pero sus superiores no estaban de acuerdo.

"Obviamente, fue un alegato significativo ųcomentó al diario el comisionado de Aduanas Raymond Kellyų. Había escepticismo sobre esto... Simplemente fue visto (no utilizaré la palabra creíble), pero no fue visto como algo verificado".

El ex agente Gately sospecha que hubo otra razón. "ƑPor qué están sentados sobre este tipo de información? ųpreguntaų. Es porque somos perezosos, o estúpidos, o no existe la voluntad política para entrar en el tipo de investigación en la que nuestro esfuerzo de procuración de justicia podría dañar a nuestra política exterior".

El vocero del Departamento de Estado rechazó este día tal posibilidad, afirmando que Casablanca fue una operación muy exitosa. "Esta operación fue concluida prematuramente debido a intereses más amplios de política exterior", afirmó.

No obstante, aquí circulan repetidas versiones de que varios generales mexicanos están vinculados con el narcotráfico. Una de las "acusaciones criminales" formales en el caso judicial generado por Casablanca obtenida por La Jornada, indica que Alfredo García Suárez, empleado de Banca Serfin, le comentó a un "informante confidencial" de Estados Unidos que "un general en México" deseaba blanquear fondos que tenía en México, Holanda y Nueva York, en lo que parece ser una referencia a los mismos sucesos.

El Times informó que en febrero, agentes de la DEA presentaron información de inteligencia a la procuradora Janet Reno indicando que algunos generales mexicanos podrían haber cooperado con Amado Carrillo. El rotativo indicó que otro grupo de agentes encubiertos de Aduanas en Houston recientemente fue contactado por una persona que decía representar a un general mexicano en busca de un mecanismo para lavar dinero.