n Paro el jueves, y huelga si persiste la propuesta de incremento: estudiantes
Hace el rector Barnés un llamado imperativo a defender a la UNAM
n Pese a las divergencias entre escuelas y facultades, el consenso es mantener unido al movimiento
María Esther Ibarra n El rector Francisco Barnés de Castro hizo ayer un llamado "imperativo" a defender a la Universidad Nacional Autónoma de México para evitar que la máxima casa de estudios "sea, una vez más, rehén de grupos que recurren a la violencia para lograr sus fines, en detrimento de la vida académica y del prestigio" de la institución.
Barnés de Castro manifestó lo anterior ante la ratificación por parte del movimiento estudiantil del paro de mañana jueves, de su ultimátum de preparar la huelga si el rector no retira su propuesta de incremento de cuotas, y de llevar a cabo un diálogo con carácter público a más tardar el 23 de marzo en el auditorio Che Guevara de la Facultad de Filosofía y Letras.
Bajo ese contexto, la Asamblea Universitaria Estudiantil, a efectuarse hoy por la tarde en el auditorio Che Guevara, de la Facultad de Filosofía y Letras, se prevé candente ante las posturas que se discutieron ayer en las escuelas y facultades en torno al diálogo ofrecido por Barnés para discutir su iniciativa de reforma al Regla- mento General de Pagos.
Aun cuando se suscitaron divergencias en las asambleas de escuelas y facultades, hubo consenso en cuanto a mantener unido al movimiento estudiantil para frenar el llamado Plan Barnés, principalmente mediante las movilizaciones dentro y fuera de la UNAM, pues temen que el máximo dirigente de la institución no cumpla con su ofrecimiento de diálogo público.
Ante esto, en el documento En defensa de la Universidad Publica: Contra la Violencia y la Intolerancia --enviado a ayer a los medios de información-- Barnés aseguró que a pedido de un grupo de consejeros universitarios alumnos, invitó a los estudiantes a ampliar el diálogo. "Expresé que no hay plazos irrevocables, y que la única preocupación era que en lugar de propiciar un verdadero diálogo, se insistiera en la estrategia de descalificar sin razones, polarizar las posiciones y enconar los ánimos".
Agrega: "Como respuesta a esta invitación, se ha recibido una tácita negativa y una convocatoria a la intolerancia y a la violencia, en lugar de propuestas que enriquecieran la que está a consideración del Consejo Universitario". En contrapartida, enjuicia el rector, "se hace un llamado a un paro de actividades, programado para este próximo jueves, a impedir que sesione el Consejo Universitario y, eventualmente, a una huelga general...Todo ello no hace sino dificultar el diálogo y propiciar indeseables enfrentamientos".
Interrogados en torno al mensaje del rector, Rodrigo Figueroa, del Consejo Estudiantil Universitario (CEU), y Bolívar Huerta --este último a título personal-- coincidieron en que "es una clara provocación para enfrentar a los estudiantes y generar un conflicto".
El representante ceuista calificó de "antiuniversitaria y porril" la declaración de Barnés y le exhortó a "asumir una posición de verdadero universitario y ser congruente, pues en días pasados hablaba de diálogo, y hoy fomenta un clima de linchamiento contra quienes se oponen a su reforma".
En tanto, en la asamblea de la Facultad de Ciencias se suscitó un enfrentamiento entre grupos por la disputa del liderazgo en el plantel. Por una parte, integrantes del Comité Estudiantil Metropolitano (CEM) y el Bloque Universitario de Izquierda (BUI) acusaron a los de la Red de Estudiantes Universitarios (REU) y al CEU de "boicotear al movimiento y estar haciendo el juego al rector Barnés", al haberle solicitado que durante tres meses abriera un consulta para discutir la actualización de las cuotas.
La confrontación se originó también por la consulta que un grupo de estudiantes hizo entre la comunidad de Ciencias, a fin de determinar si los acuerdos adoptados en asambleas anteriores tenían consenso.
Higinio Muñoz y Marjorie González, del CEM, y Leticia Contreras, en su carácter de comisión "provisional" de prensa, rechazaron estar divididos y afirmaron que el movimiento estudiantil saldrá adelante. Sin embargo, enjuiciaron que la Red y el CEU se "vayan por la libre" y hayan integrado la Coalición Democrática Estudiantil con la pretensión de arrogarse la representación de los estudiantes.
Huerta y su condiscípulo Alfonso Bautista cuestionaron algunas "prácticas viciadas" en las asambleas que se efectúan en la facultad, pues a "quienes no estamos a favor de una propuesta inmediatamente nos desconocen y adoptan actitudes estalinistas", y ambos aclararon que reconocen a la asamblea como la máxima instancia de decisión.
En Psicología, en las asambleas del turno matutino y vespertino, se sometió a consenso un documento de la Coordinadora Estudiantil en el que se rechazó la "intentona" de aprobar el plan Barnés. Jorge Mendoza, estudiante de posgrado, informó que la postura de Psicología es de diálogo público y de que el rector asista personalmente a éste.
En Economía, la asamblea decidió parar el jueves, por 228 votos, 22 en contra y 3 abstenciones. Isaac Acosta, Fernando Limón, consejeros universitarios, y Francisco Cruz Retama, encabezaron la reunión, en la cual también se ratificó iniciar la huelga, de no retirar Barnés su propuesta y aceptar el diálogo público.
Por otra parte, seis estudiantes de la Facultad de Derecho entregaron al rector Barnés una carta pidiéndole una fecha "tentativa" para el diálogo y así argumentar su desacuerdo con la propuesta de incrementar cuotas. También le pidieron incluir en dicho diálogo la "fiscalización eficiente y transparente" de los recursos de la UNAM.