n La coalición para el 2000 sería factible, afirma
Hay indicios de que AN volverá
a ser un partido opositor: Ortega
Andrés T. Morales, corresponsal, Veracruz, Ver., 8 de marzo n El candidato a la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Jesús Ortega sostuvo que luego del cambio de dirigentes en el PAN, hay "indicios muy positivos" de que el Partido Acción Nacional retomará el camino opositor, y esto hace prever que una coalición en la contienda electoral del próximo año sea "factible legalmente y necesaria políticamente para arrojar al PRI del Palacio Nacional".
Ortega sostuvo que el PRD está dispuesto a "sacrificar" una eventual postulación de Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo o cualquier otro perredista, en aras de la coalición opositora y "someterse al voto directo del pueblo en las elecciones primarias. Si gana (Vicente) Fox, Dante Delgado o (Manuel) Camacho Solís, será nuestro candidato", enfatizó.
Apuntó que se espera la conclusión del proceso electoral interno del PRD, que elegirá el fin de semana a su dirigente nacional, para que el nuevo líder inicie formalmente los acercamientos con las dirigencias del PAN, PVEM, PT, PCD y Convergencia por la Democracia, y con ellos estructurar una plataforma común y convocar a elecciones internas primarias para seleccionar al abanderado único.
Sin embargo, el aspirante a presidir el CEN perredista desechó la propuesta de Diego Fernández de Cevallos, de seleccionar un personaje "externo", porque ''el candidato único" debe surgir de las filas de las fuerzas opositoras con vocación democrática y de una consulta a su militancia y "no de decisiones cupulares".
Antes de comenzar una gira de proselitismo, Ortega descartó la posibilidad de que el abanderado de una eventual coalición opositora para el año 2000 pudiera ser un "personaje externo" a las fuerzas políticas que se aglutinen o un ex priísta "de oscuro pasado".
Advirtió que el PRD no cesará en su exigencia de "limpiar" las elecciones de Guerrero y esclarecer el asesinato de Aurelio Peñaloza, y si el gobierno federal desestima las vías pacíficas y democráticas para mantenerse en el poder, las amenazas de grupos armados como el Ejército Popular Revolucionario pudieran cumplirse y desatar la violencia no sólo en esa entidad sino en varios puntos del territorio nacional.