n El EZLN, grupo pequeño y autoritario, dice
Ilegítimo, utilizar las armas
para pedir cambios: Rabasa
Angeles Mariscal y Luis A. Boffil Gómez, corresponsales n Emilio Rabasa, coordinador para el diálogo y la paz en Chiapas, advirtió ayer en Tuxtla Gutiérrez a los 5 mil delegados del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) que participarán en la promoción de la consulta sobre los acuerdos de San Andrés que, a fin de no tener problemas, se atengan a las disposiciones jurídicas de cada estado, toda vez que las autoridades federales no garantizarán su seguridad.
Los delegados zapatistas viajarán el próximo 12 de marzo a diversas ciudades del país. "En la medida en que se sujeten" a las leyes de cada entidad, no tendrán problemas, subrayó Rabasa.
En tanto que ese acto ųla consulta que el próximo 21 de marzo se efectuará en todo el país, en la cual la población podrá opinar si desea la aprobación de la iniciativa de ley sobre derechos y cultura indígenasų no se encuentra enmarcado en el proceso de diálogo, añadió, no contará tampoco con apoyo en la organización logística.
Así, los delegados y coordinadores de la consulta deberán atenerse "a las prohibiciones ya conocidas, como la de no portar armas y la no participación de extranjeros", dijo.
El funcionario aprovechó la ocasión para descalificar a los insurgentes: "La solución al problema chiapaneco no estriba en el método autoritario con el cual un pequeño grupo intenta imponer sus posturas con las armas".
"Es muy legítimo el que quieran cambiar el sistema político de México, están en su derecho de mantener esa postura, lo que no es legítimo es utilizar las armas para demandar este o cualquier otro tipo de cambio", abundó.
Subrayó que el proceso de paz no está supeditado a la firma de un convenio o acuerdo con el EZLN, lo cual "sólo sería un impulso para iniciar el proceso".
Asimismo, instó a los jueces federales que llevan el proceso penal de las 97 personas actualmente detenidas a raíz de su participación en la matanza de Acteal a agilizar las sentencias, cualquiera que sea el sentido de ellas.
En tanto, en Mérida, organizaciones no gubernamentales (ONG) demandaron "paz, justicia y dignidad" para las comunidades indígenas, al recordar un mes más de la matanza de Acteal, Chiapas.
En el parque de la colonia Xoclán, los manifestantes efectuaron una paraliturgia en recuerdo de los 45 indígenas asesinados en esa localidad el 22 de diciembre de 1997. Recientemente, las ONG sembraron 45 árboles, como un homenaje póstumo a los indígenas asesinados.
Después del acto religioso, los manifestantes se dirigieron al Monumento a la Patria, frente al cual realizaron un plantón en recuerdo de los acontecimientos de esa comunidad chiapaneca.
En silencio y en medio de una discreta vigilancia policiaca, las agrupaciones civiles solicitaron también la libertad de los "presos de conciencia" encerrados en el penal de Cerro Hueco, entre ellos el yucateco Luis Fernando Menéndez Medina, acusado de actos subversivos.