n Legisladores regresan a comisiones la propuesta presidencial
Fracasa acuerdo para integrar
la junta de gobierno del IPAB
n Ayer venció el plazo establecido; quedó abierta la negociación de los partidos con el Ejecutivo
Mireya Cuéllar n La Comisión Permanente del Congreso de la Unión regresó ayer a comisiones --Primera y Tercera-- la propuesta del Ejecutivo con los nombres de los vocales que se integrarían a la Junta de Gobierno del Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB) al no lograrse el aval de los 25 diputados y senadores (dos terceras partes) marcados por la ley.
La decisión de no rechazar tajantemente la propuesta --consensada por PRI, PAN y PRD-- permite a los partidos mantener abierta la puerta de la negociación con el Ejecutivo.
Si bien el Congreso no pudo cumplir con el plazo legal --que se venció ayer-- para nombrar a los vocales y poder instalar hoy la Junta de Gobierno de la institución que sustituirá al Fobaproa, regresar el dictamen a comisiones permitirá que cualquiera de las cuatro propuestas del Ejecutivo --Alejandro Creel, Carlos Enrique Isoard, Adalberto Palma y Angel Antonio Palomino-- pudiera incluirse en la negociación final, lo que facilita la negociación. Un veto definitivo habría ''complicado las cosas'', comentaron los legisladores.
La sesión fue de mero trámite. Las fracciones llegaron con el acuerdo de votar el dictamen para cumplir con el procedimiento legislativo --19 sufragios a favor (PRI); 4 en contra (PRD) y 9 abstenciones (PAN)-- y como nadie quería ''lastimar'' el proceso de negociación --se dijo en los pasillos-- que ya está fuera de San Lázaro, tan sólo se fijaron posturas y no hubo debate. Durante las sesiones, normalmente los partidos disponen de 15 minutos para fijar posiciones, ayer decidieron que fueran de cinco.
El presidente de la Comisión Permanente, Porfirio Muñoz Ledo defendió --en una entrevista posterior-- la decisión de regresar el dictamen y no declararlo desechado, argumentando que así era el procedimiento correcto, pues al no lograrse las dos terceras partes, la comisión dictaminadora debe volver a estudiar el caso.
Por Acción Nacional fue a la tribuna Carlos Medina Plascencia. Anunció que mientras el gobierno mantenga una actitud que no favorece la construcción de acuerdos ''mantendremos una política claramente distante del Ejecutivo Federal''.
Dijo que su partido había realizado un esfuerzo serio para lograr con el gobierno ''un acuerdo político de gran aliento'' por lo que no puede tolerarse que solamente la agenda presidencial se sitúe sobre la agenda nacional ''el compromiso fue una agenda incluyente y equilibrada de las fuerzas políticas y el gobierno no ha cumplido''.
El PRD, en voz de Jorge Silva, justificó su participación en las negociaciones: ''a pesar de que nos opusimos a la iniciativa que dio vida al Fobaproa II, debemos ver nuestra participación a futuro, con el mejor ánimo de hacer consensos que permitan una administración limpia y transparente'' del IPAB.
Asimismo, agregó que su partido rechazará cualquier ''acuerdo en lo oscurito, cualquier tipo de negociación que pueda resultar un cochupo y poner en entredicho la calidad del Poder Legislativo''.
Fidel Herrera Beltrán, del PRI, defendió la propuesta del Ejecutivo y dijo que como grupo parlamentario ''tendremos toda la voluntad política para construir los acuerdos necesarios que hagan válida la operación de este instrumento (el IPAB) tan necesario para la sana marcha de la economía''.
La única recriminación fue para el PAN: ''no podemos confundir la construcción de acuerdos con los caprichos personales o de partido, y por encima del tiempo (agotado legalmente) tendremos todo el necesario para lograr un acuerdo''.
La falta de debate propicio muchas interrogantes. En entrevista, el panista César Jaúregui dijo que la falta de acuerdo --cuando menos con su partido-- es porque el gobierno ''incumplió su palabra'' porque se había comprometido --en diciembre pasado-- a que en un periodo extraordinario se revisaría la Ley Orgánica del Congreso, el artículo 115 constitucional y otros temas, y el PRI no cumplió, así que ''tenemos una gran desconfianza'' y ''hasta que no haya un resolutivo, como dice el dicho, que estén todos los pelos de la burra en la mano, no podemos hablar de acuerdos, no tenemos esa confianza''.