Situado en la Condesa; vende bebidas sin alcohol
Sincho, bar para los que nadan a contracorriente en el mar sin fondo
Jorge Caballero n Dentro del ombligo de la Condesa se encuentra un establecimiento alterno a los restaurantes que ahora tienen por moda vender vino y pasta: Sincho (Amatlán 84, Condesa), el único lugar en el mundo que tiene un bar en donde se venden bebidas sin alcohol, como Tú y yo (frapé de fresa), No me dejes nunca (coctel de mandarina), Obsesión (sangría), Paz mental (limonada), Ego desinflado (naranjada), Instinto desbocado (piña colada), Nube rosa (fresa colada), Pasión chicana (clamatos). El bar cuenta con música viva de jazz y blues dos veces por semana, jueves y viernes, y los sábados toca y canta Gabino Palomares.
"Sincho se creó porque Liber-ad A.C. fue el ganador del concurso Lucha contra las adicciones en México otorgado por Causa Joven; el resultado fue Sincho, un lugar que ofrece una alternativa distinta a jóvenes y adultos en México. Cuando entras tienes seis opciones distintas: ofrece comida de nivel internacional a bajo precio; puedes tomar terapia gratuita para todas las adicciones; darte de alta en un grupo de autoayuda; leer un libro; consultar especialistas en algún tema relacionado con las adicciones; oír música y comprar diversos tipos de souvenirs", apunta Enrique Arce, presidente de Sincho.
--ƑSincho qué tiene que ver con el movimiento de la new age?
--Nosotros, además de la cuestión espiritual, también buscamos el desarrollo emocional que se propicia con todas las actividades, en donde puedes divertirte sin ningún problema.
En el bar Sincho también se realizan conferencias de especialistas que tratan el tema de las diferentes adicciones. Los miércoles hay funciones de teatro y actualmente presentan Llorar por él, y trata de las relaciones destructivas. Películas como La gran comilona, El hombre del brazo de oro o Transportting. Se venden artesanías, colguijes, pulseras, playeras estampadas con leyendas como Border Line, Hospital Emergencie, con la Oración de la Serenidad y con los siete pecados capitales, todas al frente dicen Sincho, contra las adicciones.
Hay, también paquetes de regalos con dulces, pensamientos y playera, para toda ocasión. Organiza exposiciones; actualmente presenta la muestra fotográfica Dos miradas y un pensamiento de libertad, de Daniel Correa. Tiene a la venta libros de literatura sobre temas que tienen que ver con cuestiones de orden espiritual, moral y religioso, y biblioteca gratuita sobre estos temas para especialistas y público interezado.
"El lugar se abrió para dar trabajo a adictos en recuperación; todas las personas que trabajan en Sincho están relacionadas con las adicciones de manera directa e indirecta y se les paga un sueldo, para que muestren lo productivos que son", apunta Arce.
"La ventaja de estar rodeados de lugares en donde se consume alcohol es que Sincho ofrece una opción distinta, que no hay en el mundo. Esta idea es netamente mexicana, innovadora. El lugar está abierto para todo público", concluye Arce.