n Si llega a México será detenido, advierte la PGR
Suspenden a Cabal Peniche 13 de 16 órdenes de aprehensión
Notimex n El juez quinto de distrito en materia penal, Pablo Jesús Hernández Moreno, negó suspensión de amparo al ex banquero mexicano Carlos Cabal Peniche, respecto de la solicitud de extradición que formalizó el gobierno de México a su similar de Australia.
Empero, el magistrado determinó ų''ya que no son delitos graves''ų concederle la suspensión definitiva en contra de 13 órdenes de aprehensión, de un total de 16 que están giradas en su contra, condicionando a Cabal Peniche a que cuando ingrese a México se presente en el término de tres días ante los jueces que llevan estos procesos legales para que se le siga el juicio correspondiente.
Posición de la procuraduría
Por la noche, la Procuraduría General de la República (PGR) no admitió dicha suspensión y aclaró que si Carlos Cabal Peniche arriba a territorio nacional ''ingresaría de inmediato a prisión, ya que enfrenta una orden de aprehensión girada por juez federal por el delito de lavado de dinero, que la ley considera como delito grave''.
Asimismo, informó la procuraduría, el juez ''aumentó el monto de la caución solicitada a Carlos Cabal Peniche, de 3 a 4 millones de pesos''.
Esta garantía se le fijó al ex banquero para que, en caso de que el acusado sea traído a México, pueda gozar de libertad provisional, siempre y cuando haya cumplido con la presentación del monto ante el mismo juez en cualquiera de las formas que establece la ley, sea billete de depósito o dinero en efectivo.
Con está resolución, Cabal Peniche ųdetenido en Australiaų de ser extraditado a México no podría ser detenido por lo que refiere a esas 13 órdenes de aprehensión, diez de ellas por violaciones a la Ley de Instituciones de Crédito y tres por el delito de fraude genérico.
No obstante, tiene una orden de aprehensión en su contra librada por el juez primero de distrito en materia penal por el delito de lavado de dinero, por lo que de ser extraditado podría ser detenido y se le negaría la libertad provisional, ya que el ilícito está considerado en las leyes mexicanas como grave.