n Soldados y policías custodian Armenia contra la delincuencia
Se arman civiles para evitar que sus pertenencias sean robadas
n Anuncia Pastrana que por los daños del sismo declarará el estado de emergencia económica y social
Afp, Ap, Dpa, Reuters y Xinhua, Armenia, 28 de enero n Unidades del ejército y la policía fuertemente armadas custodiaban desde hoy esta ciudad colombiana, en donde también cientos de damnificados del terremoto del lunes pasado --provistos con palos, machetes y armas de fuego-- integraron grupos de autodefensa para evitar que las pocas pertenencias que les quedaron sean robadas.
Por lo pronto, el presidente colombiano, Andrés Pastrana, dijo esta noche que los daños provocados por el sismo de seis grados Ritcher fueron mayores a los que se previeron inicialmente, y anunció que convocará este viernes a un consejo de ministros en el que declarará el estado de emergencia económica y social.
En un mensaje transmitido por radio y televisión, Pastrana sostuvo que los efectos del sismo "son más devastadores y muy superiores" a los causados por el terremoto que estremeció a Popayán en 1983, con saldo de 300 muertos, y la erupción del volcán Nevado del Ruiz en 1985, que dejó 23 mil muertos al arrasar completamente un alud de lodo la ciudad de Armero.
Pastrana pronunció su mensaje en Armenia, capital del departamento de Quindío, a donde trasladó su despacho desde ayer. Anunció que nombró al presidente de la Asociación Nacional de Industriales como coordinador general del gobierno para superar la emergencia.
"Esta es una calamidad colectiva donde todos tienen que ayudar", sostuvo el mandatario, e informó que al amparo del estado de emergencia económica y social estudia la posibilidad de crear temporalmente un impuesto del uno por mil sobre todas las transacciones bancarias, adicional al de dos por mil que impuso su gobierno en noviembre y que regirá hasta el 31 de diciembre de 1999.
Tras subrayar que se requiere de una "incalculable" suma de dinero para recuperar totalmente la zona afectada por el sismo, dijo que hay más de 28 mil predios urbanos completamente destruidos.
Señaló que buscará un crédito con el Banco Mundial por 300 millones de dólares y agradeció la solidaridad internacional, en particular de México, Japón, Estados Unidos, Alemania, Francia, Chile, España y Rusia, por el envío de expertos que se sumaron a las labores de rescate.
Al igual que el pasado miércoles, Armenia fue escenario de saqueos. La agencia Ap refirió que decenas de saqueadores, que gritaban que tenían hambre, asaltaron la Plaza de Mercado, pero fueron dispersados con gases lacrimógenos por la policía.
Hubo también denuncias de que grupos de delincuentes estaban a asaltando a personas en las ruinas de sus viviendas, atracando en las calles, y en algunas carreteras cercanas a la zona del desastre regaron tachuelas o montaron retenes para inmovilizar camiones y apoderarse de la ayuda enviada a unos 250 mil damnificados.
La televisión mostró imágenes de personas con revólveres y pistolas dispuestas a rechazar los ataques de los asaltantes, y defender los pocos bienes que se salvaron del siniestro.
Afp relató que cientos de sobrevivientes del terremoto patrullaban las calles de esta ciudad, a 170 kilómetros al oeste de Santafé de Bogotá, armados con palos, machetes y algunas armas de fuego.
Mientras, la ayuda humanitaria comenzó a repartirse mejor, pero aún había desorganización en Armenia.
No hubo reportes sobre la situación de otras decenas de localidades devastadas también por el terremoto, y en donde según reportes hasta ayer no había llegado ayuda.
Luis Beleño, de la Cruz Roja colombiana, indicó que el número oficial de muertos se elevó hoy a 833, mientras que el de los heridos subió a 3 mil 626 y el de damnificados a 250 mil en esta ciudad y otros 19 municipios repartidos entre los departamentos de Quindío, Risaralda, Valle del Cauca, Caldas y Tolima.
Ayuda de los mexicanos
Se informó que 30 personas han sido rescatadas con vida en Armenia, pero los equipos de rescatistas --que incluyen a expertos venidos de México, Estados Unidos, Alemania y otros países-- mantenían una carrera contra reloj pues, estimaron los socorristas, sólo restan entre 24 y 48 horas para encontrar más gente con vida.
El grupo enviado por el ejército mexicano, coordinado por el coronel Héctor Aguilar, incluye además a 18 perros especializados en rescate.
"Los animales han detectado muchos cuerpos bajo los restos, pero no podemos saber si están con vida o no hasta que lleguemos a ellos", dijo el militar a los periodistas que lo abordaron.
"La ciudad está prácticamente destruida, no sólo en las casas y las colonias de menores recursos, sino también en los edificios gubernamentales", añadió.
La situación sanitaria comenzó a complicarse, pues hay un gran número de cadáveres insepultos y los cementerios también resultaron destruidos, por lo que se improvisan fosas comunes.
Asimismo, tras atender a miles de heridos y trabajar sin interrupción durante tres días, médicos, enfermeras y personal administrativo del hospital San Juan de Dios se encuentran exhaustos, sin un centavo y sin un lugar donde poder descansar.
"Hay empleados que están trabajando desde hace tres días, no se han cambiados ropas, no tienen a donde ir porque sus casas fueron destruidas y no hay dinero con que pagarles sus sueldos", dijo Jorge Mario López, director del nosocomio a la cadena radial Caracol.