A media semana, el doctor Zedillo declaró que es ``ineludible'' el impuesto de 15 por ciento sobre el consumo del teléfono, porque con esa medida su administración obtendría poco más de 11 mil millones de pesos para sufragar parte de su gasto programable. Sin embargo, el pasado 4 de los corrientes, Pemex anunció que ha subastado en Estados Unidos y en Europa un paquete de petrobonos con valor de mil 500 millones de dólares, equivalente a 15 mil millones de pesos, que servirán para ``financiar los proyectos prioritarios de sus programas de inversión''.
¿Tiene sentido gastar en obras de infraestructura para extraer más petróleo en este momento, cuando el precio internacional del crudo está por los suelos, debido a la sobreoferta del producto en el mundo? ¿Qué clase de sadismo orienta la decisión de estrangular la economía de las familias y de las empresas, literalmente con el cable del teléfono, cuando el régimen ya depositó en sus arcas 15 mil millones de pesos (en dólares), que representan 135 por ciento de lo que pretende captar por la vía impositiva? Pero interrumpimos nuestras reflexiones porque llega un...
¡AAA! Aviso URGENTE. ¿Usted asistió como espectador a la gran final del fútbol mexicano, el domingo pasado, en el estadio Jalisco? Pues hay dos noticias. Una mala y una buena. La mala: usted fue usado arbitraria e ilegalmente por el gobernador de Puebla, Manuel Bartlett Díaz, y por el de Guanajuato, Vicente Fox (Perot), quienes se burlaron del esfuerzo que usted hizo para comprar su entrada al juego, y utilizaron la imagen de usted y de los suyos, para promover sus respectivas precandidaturas a la Presidencia de la República.
Millones de espectadores en todo el país, vimos con asombro que, en más de una ocasión, usted y los suyos de pronto ``alzaban'' los brazos y ``mostraban'' pancartas para formar un inmenso mosaico gimnástico, que a veces decía ``Bartlett para el 2000'', y a veces ``Vicente Fox'' o ``Amigos de Vicente Fox''. Ahora bien, ¿usted quiere a Bartlett como sucesor de Zedillo?, o por el contrario, ¿usted se considera amigo de Fox? Si no es así, piense en las posibilidades que le ofrece la segunda noticia, esto es, la buena.
Si aún mantiene en su poder el boleto con el cual estuvo en la tribuna donde fue perpetrada en contra de usted esta inaceptable actividad propagandística, póngase en contacto con el buzón electrónico de esta columna y un equipo de abogados lo asesorará, sin costo alguno, para que demande a quienes resulten responsables de haberle causado ``daño moral'' y otros perjuicios.
Ahora que el Fobaproa ha sido legalizado por la santa alianza del PRI y del PAN, los diputados de todos los partidos que votaron en contra viven de sorpresa en sorpresa. Por ejemplo, han descubierto que uno de los bancos que serán ``rescatados'' por usted, por sus hijos, por sus nietos y por los hijos de sus nietos, gracias al ``valiente'', ``patriótico'' y ``verdadero'' acuerdo logrado por el PRIAN, recibirá fondos que serán establecidos por la tasa Libor --la más alta del mundo-- más 5 (leyó bien, cinco) por ciento.
Asimismo, están enterándose de que otro banco, Promex, perteneció en el pasado reciente nada menos que a Guillermo Ortiz, gobernador del Banco de México, en el cual todavía lo recuerdan con afecto. Y por otra parte, aunque el ``diputado'' priísta Enrique Kú Herrera ha desmentido que los miembros de su fracción fueran recompensados con 25 mil pesos por haber aprobado el mayor fraude en la historia de México, en la bancada del PRD se insiste en que el bono en realidad fue de 250 mil pesos, per cápita, y no lo pagó el PRI ni el ``gobierno'' sino los banqueros.
Un alto funcionario de prensa de la Cámara de Diputados, consultado al respecto, dijo al tonto del pueblo que ``es imposible que una cantidad de ese tamaño haya sido entregada por el grupo parlamentario del PRI, porque no tiene tanto dinero en sus asignaciones, pero nada impide que los diputados acepten el premio, si viene de afuera''.
Cierto o no el rumor, por lo pronto el columnista Enrique Galván Ochoa, de lectura imprescindible en materia de dinero, escribió el martes de esta semana que a los representantes del PRIAN en San Lázaro ya les prometieron un bono adicional, ahora de 100 mil pesos, si reúnen la mayoría necesaria para sacar adelante el impuesto al teléfono.
Obstinada en equivocarse todos los minutos, de todas las horas, de todos los días, en todo lo que respecta a la guerra de exterminio contra los indios de Chiapas, la Secretaría de Gobernación ha perdido la valiosa oportunidad de guardar silencio, ahora que la juez Olga Sánchez Contreras --del tercero de distrito en materia penal-- ha otorgado el amparo a 21 observadores italianos expulsados de México, el 10 de mayo por haber visitado el ejido Taniperla, en el municipio autónomo Ricardo Flores Magón, Chiapas.
De acuerdo con Bárbara Zamora, la brillante abogada que promovió la defensa de los expulsados, Gobernación cuenta con diez días hábiles, a partir del 15 de diciembre, para apelar la sentencia. El conteo, sin embargo, se interrumpió ayer, cuando apenas iban tres días hábiles, y se reanudará el mes próximo cuando los tribunales regresen de vacaciones. Si Gobernación no contesta --y ojalá que no lo haga, pese a que Miguel Covián Pérez, su director jurídico, ya prometió lo contrario--, la resolución se volvería definitiva.
En ese caso, con toda seguridad, el resto de los expulsados pediría la anulación del decreto que les impide regresar a México, y el ``gobierno'' cerraría un capítulo absurdo de sus relaciones diplomáticas con Italia, que no entorpece desde luego la buena marcha de sus negocios comerciales con aquel país, pero lo hace objeto de una permanente burla en la Comunidad Europea, donde no hay quien no piense, y lo diga en privado con todas sus letras, que la expulsión fue una auténtica ``imbecilidad'' (la cita es textual).
Después de viajar a Chiapas en mayo, en octubre los italianos expulsados organizaron una manifestación masiva frente a una cárcel de alta seguridad para migrantes que llegan a Europa igual que nuestros hambrientos y desesperados braceros. La protesta se originó por el asesinato de una joven africana, que trabajaba ilegal pero decentemente en Bélgica, y que fue muerta con bestialidad por la policía cuando trataba de escapar de una redada. Los expulsados de Gobernación y miles de jóvenes europeos, se plantaron ante la prisión modelo de Trieste --al norte de Venecia--, y a una voz trataron de romper el cordón de policías antimotines que se aprestaban a desalojarlos. El activista Luca Casarini, vocero de la Asociación Ya Basta en el nordeste de Italia, fue apaleado con tal salvajismo que terminó en un hospital con la cara irreconocible y una costilla fracturada.
Pero cuando más le estaban doliendo las heridas, Luca recibió la visita de la ministra italiana de Justicia, a quien le relató no sólo el objetivo político de la batalla de Trieste, sino la pacifista expedición a Taniperla. En respuesta, el gobierno italiano ordenó la clausura inmediata de la prisión modelo, y la ministra se comprometió a insistir, una vez más, ante las instancias correspondientes en México, para que la expulsión quede sin efecto.
La semana pasada, el 12 de diciembre, mientras el PRIAN culminaba en nombre de la virgen de Guadalupe la inmunda negociación que aprobó el Fobaproa, en Italia, nuestros expulsados zarparon en un barco desde el puerto de Bari y cruzaron el Adriático dispuestos a desembarcar sin papeles migratorios en el puerto de Valona, Albania, para protestar contra la política italiana que expulsa y persigue sin cesar a los desempleados de la ex república socialista que todos los días parten en lanchas, jugándose la vida como los balseros cubanos, para buscar un mejor horizonte en el país de la bota.
Desafiando el peligro que suponen los traficantes de ilegales que custodian con sus lanchas rápidas la bahía de Valona, nuestros expulsados llegaron con bien a tierra firme y, en una ceremonia cocinada previamente con las autoridades albanesas, fueron recibidos como héroes de la paz. Así, en cada paso, los infatigables activistas de la Asociación Ya Basta están convirtiéndose en una fuerza moral semejante a Greenpeace. Sólo que ellos, por sus claras convicciones, bien podrían ser conocidos como Redpeace. A ellos, por todo cuanto se aprecia, les profesan pánico los pobres burócratas de Bucareli.
Si el ``gobierno'' se obstina en ratificar su expulsión, el tonto del pueblo promoverá en breve una iniciativa popular para que sean declarados ciudadanos mexicanos honorarios.
Llegadas las cosas a este punto, no queda sino desear una muy feliz Navidad a Roberto Albores Guillén, gobernador de los paramilitares de Chiapas; a Francisco Labastida Ochoa, secretario de la guerra de exterminio en Chiapas; a Adolfo Orive, estratega de la persecución a muerte contra sus antiguos aliados, los indios rebeldes, y a Emilio Rabasa, coordinador de todas las barrabasadas que se le ocurra decir acerca de Chiapas. Que el 24 de diciembre festejen con los suyos y brinden porque el frío y la lluvia sean implacables con los niños, los ancianos y las mujeres que desde el miércoles duermen a la intemperie, temblando de espanto, en las montañas del municipio autónomo de San Juan de la Libertad. Amén.