Programa insuficiente: PRD y El Barzón; será ``punta de lanza'' de la reactivación, afirma la IP
Georgina Saldierna y Fabiola Martínez Ť Dirigentes del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y de la Unión Nacional de Productores Agropecuarios, Comerciantes, Industriales y Prestadores de Servicios El Barzón rechazaron el nuevo programa de apoyo a deudores propuesto por los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI), por considerarlo como una medida insuficiente para resolver el problema de la cartera vencida.
``Es como un mentolatum'' para aplicarse después del ``trancazo'' dado con el pacto sobre el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa), destacó Jesús Ortega, secretario general del Partido de la Revolución Democrática.
Por su parte, Miguel Contreras, coordinador del sector hipotecario de El Barzón, estimó que al menos 500 mil deudores de crédito no podrán enfrentar sus obligaciones bajo el nuevo esquema que calificó como una ``trampa''.
Explicó que el programa anunciado fracasará porque otra vez se obliga a reconocer el saldo actual y a reestructurar con base en unidades de inversión (UDI), que se indexan al desarrollo de la inflación, lo cual significa operar con tasas variables.
Precisó además, que las quitas o descuentos no son sobre saldo, sino a pagos mensuales, y tampoco se incluye en el programa a aquellos deudores que enfrentan juicios promovidos por los bancos y siguen jurídicamente ante la posibilidad de perder su patrimonio.
Luego de manifestar su rechazo total al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario -sustituto del Fobaproa- y al programa en cuestión, Eugenio Navarro, Javier González, Jesús Hernández y Miguel Contreras, dirigentes de El Barzón, advirtieron que llegarán hasta donde sea necesario.
``No nos importa que nos metan a la cárcel; los barzonistas estamos más unidos que nunca y en enero realizaremos una reunión nacional en la que definiremos las medidas a tomar'', dijo Javier González, coordinador de resistencia civil de esta organización.
En conferencia de prensa los líderes barzonistas argumentaron que en el caso de los sectores agropecuario y pesquero, así como el de la mediana y pequeña empresa los descuentos se aplican solamente a los pagos que se realicen.
Sin embargo, los deudores no cuentan con el dinero para reiniciar sus actividades propias, ``mucho menos para abonar o liquidar de manera inmediata a los bancos y demás acreedores''.
El programa fracasará -insistieron- porque se excluye a sectores de crédito al consumo, compra de automóviles (planauto) y transporte, como si la crisis y las altas tasas de interés hubiera afectado selectivamente a unos cuantos deudores; además, porque se pretende que en seis meses el deudor liquide lo que en cuatro años no ha podido hacer.
Ortega Martínez señaló que el nuevo programa está condenado al fracaso, toda vez que se inscribe en medio de un proceso económico recesivo en el que no habrá empleo ni recursos para liquidar los adeudos.
Advirtió que existe la posibilidad de que se hagan grandes movilizaciones sociales que expresen la inconformidad prevaleciente contra el esquema económico del gobierno federal, en el que se plantean aumentos en tarifas e impuestos aunados a un ``salario de hambre''.
Laura Gómez Flores Ť El programa de apoyo a deudores representa la ``punta de lanza'' para reactivar la economía, aunque será necesario que vaya acompañado por un ajuste de las tasas de interés --para evitar un crecimiento incontrolable de pasivos--, una inflación de un dígito y mantener la estabilidad económica, con el propósito de evitar que quede ``sólo en buenos deseos'', señalaron representantes del sector empresarial.
El presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles, Félix Romano, consideró que de aplicarse la quita de hasta 50 por ciento a créditos hipotecarios ``el sector estaría en posibilidades inmediatas de liquidar sus pasivos con la banca, que a la fecha suman poco más de 4 mil millones de dólares''.
Sin embargo, para evitar que esta situación vuelva a convertirse en una ``bola de nieve'' será necesaria una reducción de las tasas de interés, pues resulta incongruente que en Tijuana, por ejemplo, se pague 35 por ciento y pasando la línea fronteriza sea de 8 por ciento, lo cual representa una competencia desleal.
Situación similar se presenta en el sector comercio, que carga con este problema desde mediados de 1994 y se agravó un año después cuando la crisis estaba en su apogeo, comentó el dirigente del comercio organizado del país, Armando Araujo Montaño, al llamar a las autoridades a no permitir que este programa sea uno más en la lista de soluciones inconclusas.
``Hemos pasado por varios planes pero ninguno ha logrado su objetivo. No obstante, confiamos en que ahora sí tendremos avances y miles de familias serán beneficiadas con este programa, que para el sector empresarial representa la liberación de créditos para seguir creciendo'', manifestó.