La Jornada 13 de diciembre de 1998

Pinochet se desdice y niega que acusó a GB de haberlo ``secuestrado''

Reuters, Afp y Dpa, Londres, 13 de diciembre Ť El periódico inglés Sunday Mirror insistió hoy en su versión de que Augusto Pinochet acusó a Gran Bretaña de haberlo ``secuestrado'', pese a las negativas de los asesores del ex dictador chileno, quienes aseguran que éste no ofreció entrevista alguna.

Colin Myler, director del Sunday Mirror, dijo estar asombrado por el desmentido de los abogados y asesores de Pinochet, al afirmar que el ex ministro de Finanzas de la dictadura chilena (1973-90), Sergio de Castro, dejó en claro ``que ofrecía al periódico la opinión y sentimientos del senador, que serían publicados por el rotativo''.

Desde Santiago de Chile, donde llegó hoy procedente de Londres, De Castro dijo que había hablado con el diario izquierdista ``a título personal'', y negó haber entregado un cuestionario escrito a Pinochet, actuando como supuesto intermediario de la publicación londinense.

``Todo es falso. Ellos (los periodistas) me pidieron una entrevista y yo se las di'', agregó el economista, un estrecho colaborador de Pinochet.

La víspera, uno de los abogados del ex dictador, Patrick Robertson, dijo que las opiniones de De Castro ``son cosa suya, y el general Pinochet no tiene comentario que hacer, ni ahora ni en un futuro cercano'', acerca de las circunstancias de su detención en el Reino Unido.

El diario, cuya tirada ascienda a casi dos millones de ejemplares, dice hoy textualmente: ``Hablando exclusivamente para el Sunday Mirror, a través de su cercano amigo y ex miembro del gabinete, Sergio de Castro, el general Pinochet dice: `soy víctima de una traición'''.

``Me mantienen ilegalmente en contra de mi voluntad, los hombres que están detrás (de ese complot) no son otra cosa que criminales. El ministro del Interior, Jack Straw, es en este sentido un secuestrador, y Tony Blair no merece confianza'', dice el ex dictador en la supuesta entrevista difundida cuando se cumplen 58 días de su detención.

``Fui invitado a Gran Bretaña por el gobierno y me recibieron oficialmente'', señaló Pinochet según la publicación, y agrega que ``ahora sé que todo el tiempo estuvieron organizando un complot a mis espaldas''.

En Londres, el senador del partido chileno derechista Renovación Nacional, Ignacio Pérez Walker, dijo a Afp que Pinochet ``habla a través de sí mismo y nunca por medio de terceras personas''.

En cuanto a las declaraciones de De Castro, consideró que es ``un hombre inteligente y serio, nunca se va a arrogar la representación del general''.

Al ser interrogado sobre si considera que Pinochet está secuestrado, dijo que ``muchas personas podrían pensar, con buenos antecedentes, que lo está, víctima de una emboscada, que lo dejaron entrar a Inglaterra con rango de VIP para después cazarlo y ponerlo en la situación en que se encuentra''.

Augusto Pinochet fue detenido el 16 de octubre en Londres a pedido del juez Baltasar Garzón, y la Cámara de los Lores confirmó su arresto el 25 de noviembre. El ministro Straw determinó la semana pasada que podían proceder las audiencias respecto de la solicitud de extradición del magistrado español, que acusa al ahora senador vitalicio de asesinato y tortura de ciudadanos españoles durante su régimen.

El ex dictador chileno, de 83 años, acepta que podría estar en Gran Bretaña un año luchando contra la solicitud de extradición, pero es optimista en cuanto a que va a poder regresar a Chile, dijo hoy Peter Schaad, coordinador de una campaña para liberar a Pinochet. ``No creo que esté deprimido en estos momentos'', agregó.

Schaad negó también que la entrevista publicada por el diario Sunday Mirror sea auténtica, al considerar que el ahora senador vitalicio no acusaría a Londres de traición. ``No lo pondría en términos tan fuertes, pero él se siente muy amargado sobre lo que le ha pasado desde el 16 de octubre, considerando la estrecha cooperación que han tenido históricamente los dos países, especialmente durante la guerra de las islas Malvinas''.

En tanto, los exiliados chilenos en Londres se instalaron hoy, como cada día -pero en menor cantidad-, después de la comparecencia del ex dictador ante la justicia británica el viernes, en las proximidades de su residencia en Wentworth, al sudoeste de la capital británica.

``No dejaremos de venir, sobre todo después de que la policía nos indicó que él escucha las consignas que le lanzamos con altavoces'', dijo Nicole Drouilly, una de las coordinadoras de los exiliados, quien aseguró que la policía, ``nos ha alabado por el nivel de orden que demostramos en nuestras manifestaciones''.