Ofrece la clase gobernante de Venezuela su apoyo a Chávez
David Aponte Ť Los gobiernos de los países latinoamericanos ``tenemos que darle la mano'' al mandatario electo de Venezuela, Hugo Chávez. Hay que tratar de llevarlo al Grupo de los Tres (G-3) y buscar que continúe en ese foro, opinó ayer el presidente de Colombia, Andrés Pastrana.
Durante una reunión con periodistas mexicanos, convocada por el Premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, el mandatario colombiano dijo que el ex militar venezolano y el gobierno de Colombia tienen interés en fortalecer la relación bilateral.
Por el momento, la cancillería colombiana ya tiene instrucciones para establecer contacto con el equipo de Hugo Chávez, principalmente para comenzar el diálogo e invitarlo a que visite Colombia, expresó.
Pastrana comentó que existe un marcado interés de Colombia por mantener al presidente electo de Venezuela en el esquema del G-3, foro integrado por México y esas dos naciones latinoamericanas.
En ese interés, Colombia estaría dispuesta a adelantar la próxima reunión del de este grupo, prevista para mayo de 1999. ``Nosotros pensamos que debemos atraerlo y darle la mano'', expresó.
Gabriel García Márquez manifestó que el triunfo del ex militar golpista era ``inevitable'', debido a la actual situación de Venezuela. Lo más importante ahora es ``ayudarlo'' por el bien de la nación venezolana y de América Latina.
``(Chávez) tomó el poder en las urnas. Es una victoria electoral'', ripostó el escritor cuando un reportero mencionó que el presidente electo de Venezuela intentó en el pasado un golpe de Estado militar.
El presidente Andrés Pastrana sostuvo una reunión privada con directores de medios de comunicación, periodistas y columnistas mexicanos, para dialogar sobre diferentes temas de la agenda nacional e internacional. El escritor y periodista García Márquez propuso al manda- tario que el contenido de la conversación se publique.
En su intervención, Pastrana habló del triunfo de Chávez, del proceso de paci- ficación en Colombia, del mecanismo de certificación antinarcóticos del gobierno de Estados Unidos y de la nueva relación político-diplomática entre su país y Washington.
El presidente hizo un breve resumen de los contactos entre su gobierno y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y de la buena voluntad de las partes para comenzar el proceso con la zona de distensión y la desmilitarización de cinco municipios de influencia guerrillera.
``Actualmente, hemos pedido a la guerrilla una tregua para el fin de año, como un gesto de paz y no de guerra. Los paramilitares han anunciado una tregua del 20 de diciembre al 6 de enero. Entonces, el país espera un gesto de paz de la guerrilla.
``Nosotros sabemos que hacer la paz en la guerra es un asunto complicado y difícil. Pero hay que hacerlo, y creo que están dadas las condiciones para que el gobierno y la guerrilla se sienten en la mesa de las negociaciones'', manifestó.
Posteriormente, el presidente colombiano descalificó el proceso de certificación antinarcóticos del gobierno de Washington, con el argumento de que es un mecanismo unilateral, injusto y de recriminación. Por tal motivo, México y Colombia apoyan la iniciativa de la Organización de Estados Americanos orientada a una evaluación de la colaboración de los países del hemisferio en la lucha contra las drogas, indicó.
Pastrana agregó que Estados Unidos comete un error al ver el problema del tráfico de estupefacientes con una óptica represiva, sin tomar en cuenta la situación de las comunidades campesinas de la región y sin un proyecto de desarrollo alternativo.
En cuanto al tema de la relación Colombia-Washington, consideró que ambos países tratan de recomponer los nexos, después de cuatro años de tensiones. En ese sentido, dijo: ``Nosotros vemos hoy un clima distinto en Estados Unidos''.