La Jornada 8 de diciembre de 1998

Destaca Cárdenas la decisión del mandatario visitante de poner fin al conflicto con la guerrilla

Ricardo Olayo Ť Al declarar huésped distinguido al presidente de Colombia, Andrés Pastrana, el jefe de gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas, destacó la labor del mandatario por su capacidad para intentar la negociación con los líderes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), a pesar de los ``fuertes intereses internos que en esa nación sabotean y retrasan cualquier intento de avenimiento''.

Del seguimiento de esta experiencia de gobierno se pueden derivar lecciones para resolver en forma civilizada el conflicto en Chiapas, subrayó Cárdenas en el mensaje que dio previo a la entrega de las llaves de la ciudad y la medalla con el escudo de la metrópoli.

Pastrana estableció que en Colombia también hay ``incomprensibles políticas externas'' que critican el retiro de las fuerzas armadas en una extensa zona sur, ``lo cual es evidentemente más importante que las actividades de vigilancia aérea para el combate al narcotráfico, las cuales se interrumpirían o disminuirían temporalmente con la desmilitarización de esos territorios''.

Esta política de reconciliación nacional del presidente colombiano, con tres meses en el cargo, no significa renunciar a la responsabilidad de erradicar la producción y transporte de drogas, ``sino que es fundamental ganarse la confianza de los rebeldes para abrir un proceso irreversible de paz, lo cual a la larga ayudaría más a esa erradicación que las mismas tareas policiacas de patrullaje''.

Este escenario, agregó Cárdenas, ``ayuda a reflexionar en lo difícil que es alcanzar la paz mediante la concertación política y lo inamovible que parecen ser algunos criterios en varios círculos de opinión, principalmente del exterior, sobre cómo y con qué orden de prioridades se debe acometer la lucha contra el flagelo del narcotráfico en nuestros países''.

Estableció que la experiencia colombiana en asuntos de pacificación interna debe ser seguida por México y el continente con esperanza, y estar atentos a las lecciones que se pueden obtener para lograr un acuerdo civilizado en Chiapas.

Coincidencias

La recepción a Pastrana ocurrió ayer a las 13 horas, con un dispositivo de seguridad más estricto que el dedicado a visitantes anteriores. En el Salón de Cabildos, Cárdenas dio la bienvenida a la delegación colombiana, nombró huésped distinguido y entregó las llaves al mandatario colombiano.

En su discurso, Cárdenas encontró ``afinidades esenciales entre dos pueblos que han sorteado los avatares de su propia evolución'', y dijo que Pastrana fue el primer alcalde electo en Santafé de Bogotá y ahora está al frente del gobierno nacional colombiano, por lo que le deseó éxito en los objetivos de su mandato que comienza.

Luego, Pastrana dijo que conoce la complejidad de gobernar una gran capital y recordó que él y Cárdenas fueron los primeros elegidos democráticamente para encabezar el gobierno en ciudades importantes. Dijo que se sentía como en su propia casa y parte de la familia latinoamericana, y auguró el fortalecimiento de los vínculos ``para enfrentar unidos los retos que nos depara un mundo que avance hacia el futuro con ímpetu vertiginoso''.

Al final de la reunión, se trasladaron al patio del Antiguo Palacio del Ayuntamiento para brindar con el gabinete de sus respectivos gobiernos. Luego, el jefe de gobierno capitalino acompañó hasta la puerta a Pastrana, quien estaba acompañado por una comitiva integrada por una decena de automóviles y escoltas.

En declaraciones a los reporteros, Cárdenas dijo que observa problemas comunes en seguridad, servicios y también disposición a compartir experiencias. Se le preguntó si considera que Pastrana --hijo de un ex presidente-- y él pudieran reunirse nuevamente como jefes de Estado, y respondió: ``Eso no lo sabemos pero lo más importante es que hoy esté aquí el presidente Pastrana y ello reafirma lazos de amistad con Colombia, ya de por sí muy cercanos''.