La SACM dejó de administrar 75% de las canciones de Lara

Arturo García Hernández Desde el pasado 18 de noviembre, 75 por ciento de los beneficios económicos que genera la obra de Agustín Lara ya no son administrados por la Sociedad de Autores y Compositores de Música (SACM), sino por la española Sociedad General de Autores y Editores (SGAE). Los herederos del autor de María bonita que detentan dicho porcentaje de los derechos, decidieron renunciar a la agrupación que preside Roberto Cantoral, ``por convenir así a nuestros intereses y a la promoción y difusión de la obra'' del músico poeta, cuyo repertorio es considerado el más importante de la canción popular mexicana en este siglo.

Yolanda Santacruz Gasca y el Fideicomiso Carmen Zozaya (representado por Ignacio Lombardo Gil) son los herederos del compositor que optaron por ceder la administración de sus regalías a la SGAE. Por disposiciones testamentarias de Lara, Santacruz Gasca y el Fideicomiso Carmen Zozaya tienen derecho a 25 y 50 por ciento, respectivamente, de los derechos que genere la ejecución pública de sus canciones.

Santacruz -última compañera de Lara- y Marcelo Lombardo señalaron ``la falta de transparencia'' en el manejo de los fondos de la SACM, así como ``el nepotismo y la falta de democracia'' que impera en dicha asociación.

¿Saldrán otros inconformes?

Agustín Lara -expuso Yolanda Santacruz- fue socio fundador de la SACM, proyectada como ``institución sin fines de lucro, una organización gremial que defendiera los derechos de los autores y compositores y que permitiera una convivencia democrática con sentido de justicia y transparencia administrativa que beneficiara a los creadores, herederos y titulares''.

El ``escaso incumplimiento de estos fines por la actual SACM (con Cantoral al frente) y la reiterada negativa de permitirnos la libertad de expresión para exponer esta situación en las asambleas, nos obligó a reflexionar si ésta era la institución a la cual nuestro querido Flaco dedicó buena cantidad de sus esfuerzos, si ésta era la sociedad que él amó y consideró que era el refugio que protegería a los autores y compositores mexicanos''.

Como presidente del comité técnico del Fideicomiso Carmen Zozaya -nombre de otra ex mujer de Lara- Lombardo Gil coincidió con Santacruz y aseguró que la adscripción a la SGAE les asegura ``una mejor distribución de las regalías que genera la explotación de la música de Agustín Lara''.

De las aproximadamente mil canciones que escribió el autor de Noche de ronda, son cerca de 300 ``las que están registradas y funcionan; unas más otras menos''. Por hacer la cobranza y administrar las regalías, la SACM cobraba a los derechohabientes de Lara un porcentaje nunca menor a 30 por ciento; por el mismo concepto, la SGAE retendrá un porcentaje ``nunca mayor a 17 por cientro''.

Santacruz Gasca externó su ``pena'' por tomar esta medida y recurrir a una entidad española, pero -argumentó- por un lado ``Agustín quería mucho a España'', y por otro, ``me da gusto estar en una sociedad transparente y ética que se maneja honradamente''.

La cuestión será ver si otros compositores o sus herederos, también inconformes con el manejo que Cantoral hace de la SACM, adoptan medidas similares.