La Jornada 28 de noviembre de 1998

Werner: sin paquete, déficit público de 3%

Notimex, Puebla, 28 de noviembre Ť El subsecretario de Hacienda, Martín Werner, advirtió que de no aprobarse el paquete económico para 1999, el déficit del sector público se elevaría a tres por ciento del producto interno bruto (PIB), unos 120 mil millones de pesos.

Al participar en el último día de trabajos de la 26 Convención Nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, Werner expuso los riesgos que corre la economía del país si el Congreso de la Unión no aprueba esa iniciativa.

Ante la volatilidad financiera de hoy día, y la caída que han registrado los precios internacionales del petróleo, se prevé para el siguiente año un entorno sumamente adverso, reconoció el funcionario de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Incremento de la deuda

Al respecto, mencionó que ``esperamos que las presiones financieras externas sean de tal magnitud, que el costo total de la deuda mexicana se incremente en cerca de 0.8 por ciento del PIB, es decir, 30 mil millones de pesos''.

Ese incremento del costo se derivaría -en parte- ``porque hemos tenido que colocar deuda de menor plazo, porque hoy los mercados no están aceptando los papeles de largo plazo, por lo que los niveles de las tasas de interés han sido más elevadas''.

En cuanto a la parte tradicional de la deuda pública interna y externa, para 1999 se tienen presiones de 0.50 por ciento del PIB y en materia de saneamiento financiero, apoyos a ahorradores, deudores, y capitalización de la banca de desarrollo de 0.27.

A estas presiones, dijo Werner, hay que agregarle menores ingresos provenientes de organismos y empresas, o por la desincorporación de activos del sector público; además de la presión en el gasto programable por incremento de recursos para estados y municipios.

Asimismo, puntualizó, ``tenemos que las presiones sobre las finanzas públicas, tanto de mayor gasto como de menores ingresos, son del orden de 1.5 por ciento del PIB'', dijo el subsecretario de Hacienda.

Esto quiere decir que ``si al déficit que esperamos de cierre para 1998 le sumamos las presiones del siguiente año, en alrededor de 1.5 por ciento del PIB, aproximadamente 70 mil millones de pesos, para 1999 tendríamos un déficit inercial de casi tres por ciento del producto''.

En caso de que no se cambiara nada en materia de ingresos y de gasto, y que se rechazaran las propuestas del gobierno federal, sería realmente difícil financiar un déficit de tres por ciento, equivalente a más de 120 mil millones de pesos.

Al intentar financiar un déficit de esa magnitud, nos encontraríamos con problemas graves en los mercados, como presiones al querer obtener recursos, alza en las tasas de interés y la consecuente eliminación del incremento del ahorro financiero nacional.

En ese este contexto, el próximo año ``estaríamos ahorcando las posibilidades de financiamiento al sector privado y social; en los siguientes ejercicios el costo de servicio de la deuda se incrementaría de manera importante y no habría recursos para el gasto social''.

Previsiones ante la situación externa

El gobierno federal ha tomado en cuenta la difícil situación externa a escala mundial, por lo que -dijo- ``tenemos que enfrentarnos a la coyuntura difícil, pero es responsable para que regrese el déficit público a un nivel manejable que no presione a la economía y permita las condiciones de generación de empleo''.

El funcionario reiteró que a pesar de la austeridad que se plantea en el paquete económico para el siguiente año, el Ejecutivo federal tiene cinco prioridades: seguridad pública, gasto social (programas para combatir la pobreza extrema), infraestructura básica, fortalecimiento del federalismo, y desarrollo del sector rural.

Martín Werner insistió que ``la propuesta del Ejecutivo federal al Congreso de la Unión es responsable, es una política económica que protege el crecimiento, empleo y gasto social.