La Jornada 28 de noviembre de 1998

CONTINUA LA ACTIVIDAD DEL POPO; EL SEMAFORO, EN AMARILLO

Francisco Guerrero y María de los Angeles Velasco, corresponsales, y La Jornada de Oriente Ť Otras dos explosiones ocurrieron ayer en el Popocatépetl, con lo que sumaron seis en un periodo de 24 horas entre el viernes y el sábado, lo que originó nuevamente expulsión de material incandescente. Sin embargo, las autoridades informaron que la situación no representa especial riesgo, y las comunidades vecinas a la montaña retornaron a la calma.

El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) informó que luego de los tres estallidos del viernes se presentaron ayer dos explosiones en el volcán de mediana y alta magnitudes, a las 2:42 y 10:21 horas. Esta última fue la exhalación más fuerte y arrojó material incandescente que cayó fragmentado a 1.5 y 2 kilómetros del cráter. También originó una columna de vapor de agua, gases y ceniza que se elevó hasta 3 mil metros sobre la cima, pero no se reportaron daños en ninguna comunidad cercana.

Sólo en el poblado de Tlacotitlán, estado de México, se informó sobre una lluvia de cenizas a la 1:30 del sábado, que no causó perjuicios.

Esos fenómenos volcánicos continúan atrayendo a turistas y curiosos, y según informes de la policía municipal, ayer varias decenas de camiones y vehículos particulares llegaron hasta el Paso de Cortés para admirar el espectáculo que ofrece la enorme pluma sobre el Popocatépetl. En ese punto los comuneros establecieron un retén para cobrar el acceso a los visitantes.

En Tetela del Volcán, Morelos, regresaron a la calma los habitantes de las 10 comunidades más cercanas al coloso, luego del aumento de la actividad en los últimos tres días.

El director de Protección Civil estatal, Anselmo Sotelo Parra, dijo que fue oportuna la medida de enviar brigadas de información, apoyadas por elementos del Ejército Mexicano, para evitar que la alarma aumentara, debido a que los pobladores relacionan la actividad del Popo con la del Volcán de Colima.

Informó, asimismo, que este sábado no hubo reportes de lluvia de ceniza en las comunidades y municipios morelenses cercanos a Don Goyo.

Puntualizó que el programa Fuerza de tarea Popocatépetl se mantiene activo los 365 días del año, y el destacamento militar enviado a la zona de alto riesgo permanecerá para mantener el cordón de seguridad establecido por el Cenapred y evitar que las personas se acerquen a menos de siete kilómetros del cráter.

Tanto el Cenapred como el Centro de Monitoreo de Morelos reportaron que la actividad sísmica del volcán se mantuvo en niveles bajos desde las 01:30 horas de ayer, no obstante los eventos explosivos.

Sotelo Parra explicó que se han dado instrucciones a la población para que protejan las fuentes de abastecimiento de agua , tenga a mano sus documentos personales así como un maletín de primeros auxilios y se mantenga atenta a los mensajes radiofónicos que informan continuamente sobre las condiciones que guarda el coloso y emitirían indicaciones precisas en caso de que se determinara la evacuación de las zonas de riesgo.

El gobierno de Morelos, en tanto, dio a conocer que el próximo lunes se iniciarán los trabajos de rehabilitación de caminos en el tramo Tetela-Hueyapan-Alpanocan, que corresponden a la ruta cinco de evacuación de la zona de riesgo.

Por su parte, el investigador del Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder) de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) Javier Salgado Pareja, dijo que es previsible que continúen ese tipo de explosiones y exhalaciones en las próximas horas.

Los corresponsales de ese centro, instalados en la zona de riesgo, informaron que los lugareños se encuentran en calma y en constante comunicación con las autoridades encargadas del Plan Operativo Volcán Popocatépetl para actuar de forma inmediata en caso de que se registre un aumento en la actividad.

Por el momento, señaló, la actividad volcánica no implica riesgo para la población y por eso el semáforo continúa en amarillo.


Matilde Pérez U., enviada, Tetela del Volcán, Mor., 28 de noviembre Ť Presionado por las protestas de habitantes asentados en las faldas del Popocatépetl, el gobierno del estado ordenó realizar trabajos para ``mejorar'' las condiciones de los caminos vecinales que servirían de rutas de evacuación en caso de una emergencia volcánica.

Residentes del poblado morelense de Ocuituco consideran que el ``pésimo'' estado de esas vías dificultaría una posible evacuación si la actividad del coloso se tornara peligrosa. Sin embargo, hace unos cuantos días una cuadrilla de apenas seis hombres con picos y palas comenzó la tarea de emparejar 10 de los 14 kilómetros del camino que enlaza a esta comunidad con la carretera Cuautla-Xalostoc, tramo que actualmente se recorre en 45 minutos.

En situación similar se encuentran los caminos vecinales de Hueyapan, Jumiltepec y Tetela del Volcán. Allí los señalamientos son aún insuficientes y los letreros que los identifican como ``ruta de evacuación'' carecen de la numeración que se les ha asignado.

Los pobladores se preguntan si habrá suficiente transporte para salir rumbo a alguno de los refugios, cuya ubicación ignoran. En Tetela del Volcán hay quienes, como doña Aurelia, proponen que los sitios de reunión sean las iglesias de los barrios, porque ``son los sitios más conocidos por la gente''.

Pero si bien las recientes explosiones del Popocatépetl sobresaltaron a los habitantes de Tetela del Volcán, Ocuituco, Hueyapan, Jumiltepec, esos eventos no parecen intimidarlos los suficiente como para que interrumpan sus actividades cotidianas o la celebración de sus tradiciones.

Así por ejemplo, los pobladores de Tetela del Volcán no dejan de acudir, todos los fines de semana, a la plaza de toros localizada en las faldas de Don Goyo.

``Esa costumbre es como sembrar y preparar las fiestas religiosas'', comenta Alvaro Morales Castro, representante de Protección Civil en ese municipio, donde sobresale un ex convento dominico del siglo XVI.

Morales acepta que existe tensión entre las familias del lugar, pero ``están bien informados y saben qué hacer si se impone la alerta roja''.

Por su parte, las autoridades de Protección Civil del estado aseguran que en esa región ya se han realizado varios simulacros de evacuación, y uno más se llevará a cabo en Ocuituco, en los próximos días.

Mientras la gente de Yecapixtla, Tlacotepec de Amilpas, Zacualpan de Amilpas,Temoac, Popotlán y Metepec se pregunta dónde están los albergues, si son los necesarios y si habrá tiempo para llegar a la carretera que lleva a Cuautla en caso de emergencia, las autoridades del gobierno afirman que las cuatro rutas de evacuación, que confluyen en esa vía, son suficientes, y que los organismos de protección civil están preparados para desalojar a 80 mil personas.

Posible, anticipar 72 horas un gran evento en el coloso

El vulcanólogo Javier Salgado Pareja, del Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder) de la Universidad Autónoma de Puebla, asegura que un evento muy grande en el Popo puede preverse con 72 horas de anticipación, tiempo suficiente para avisar a los pobladores que salgan de sus comunidades.

Indicó, sin embargo, que para proceder a una evacuación hay que considerar varios elementos como la información sísmica, si las emisiones de vapor de agua y ceniza son explosivas, las transformaciones en la composición química de aquéllas y en los manantiales alrededor del coloso, los cambios drásticos en el magnetismo y las deformaciones que se presenten en el cuerpo del volcán.

Con base en información del Cenapred y en el análisis de imágenes de satélite, el especialista puntualizó que aún no se conjuntan esos factores, y resumió que ``entre más complicada es una erupción, más fácil es prever el desalojo de la población''.

Preocupados por proteger a los cerca de 300 mil habitantes que estarían en riego en caso de una erupción del volcán, los integrantes del Cupreder han realizado un intenso trabajo entre la población que podría resultar afectada.

Han repartido, por ejemplo, 20 mil micas de información con pormenores sobre la ruta de evacuación que corresponde a cada comunidad. En ellas es posible guardar documentos personales y contienen 11 instrucciones sencillas para enfrentar una contingencia. Otras 10 mil de esas micas serán repartidas a los habitantes de Atlixco.

Está ya definido que en una fase uno, 28 comunidades tendrían que ser evacuadas y sus 61 mil 300 habitantes trasladados a 192 refugios temporales.

En una fase de riesgo moderado, ocurriría lo mismo con otras 38 poblaciones, con 56 mil 478 personas para 174 refugios, y en un riesgo menor, se evacuarían 10 comunidades con 62 mil 464 pobladores, todos de la mancha urbana de Atlixco, que estarían en 180 refugios.

En los albergues, abundó Manuel de Santiago, del área social del Cupreder, hay suficiente lugar para todos, aunque el espacio con que contaría cada persona sería de dos metros cuadrados y no de 3.05 metros, como lo determinan las especificaciones internacionales.

Una de las situaciones que sigue preocupando al personal de Cupreder -organismo que trabaja en coordinación con el gobierno del estado- es que la contingencia se presente en un día de mercado en Atlixco, ya que la población flotante es cercana a las 100 mil personas, pero se calcula que en seis horas podría desalojarse a la población de esa zona.

Especialistas de Puebla y Morelos no descartan que se presenten congestionamientos en las vías de salida hacia lugares más seguros; sin embargo, esperan que la extensa información que se ha distribuido y la organización de la población faciliten las acciones de seguridad, planeadas para salvaguardar a cientos de miles de personas.