Estoy dispuesto a que investiguen si tengo nexos con el narco: Villanueva

El gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva Madrid, se declaró dispuesto a dejar de lado su fuero constitucional a fin de que la Procuraduría General de la República (PGR) pueda realizar, sin ningún impedimento, ``una amplia investigación'' sobre su persona y aclare las acusaciones que se han hecho en su contra por presuntos vínculos con el narcotráfico.

``No voy a escudarme en el fuero constitucional que tengo por ser gobernador del estado; estoy en toda la disposición de colaborar en todos los sentidos'', aseveró al ser entrevistado en un noticiero radiofónico de la capital del país en torno a la información publicada ayer en el periódico estadunidense The New York Times, donde se asienta que funcionarios de la PGR habrían asegurado que Villanueva Madrid es investigado en el marco de una amplia operación antidrogas.

En Chetumal, el mandatario admitió que las reiteradas notas periodísticas que lo ligan al tráfico de estupefacientes le crean ``una mala imagen'' que espera poder limpiar porque, sostuvo, ``tengo la conciencia limpia, no tengo problemas''.

Sin embargo, consideró que si ya existe una investigación de la PGR en su contra podría deberse a la petición que él mismo hizo al respecto a las autoridades desde el año pasado, cuando también se difundió información que lo vinculaba al negocio del tráfico de estupefacientes.

Asimismo, negó tener conocimiento de que Cancún se haya convertido en un importante centro de operaciones del narco y dijo ignorar todo lo relacionado con los decomisos de droga que se efectúan en la entidad que gobierna. ``No somos competentes en el control de la droga y el narcotráfico, esa es una facultad exclusiva de la PGR. Realmente no tengo ningún acceso a las investigaciones de la procuraduría; ningún gobernador tiene acceso a información de este tipo'', argumentó.

Villanueva Madrid, quien concluirá su gestión el próximo 5 de abril, indicó que desconoce la razón por la que su nombre ha sido vinculado al narcotráfico en más de una ocasión, pero recordó que acusaciones similares en su contra fueron ventiladas por la prensa a finales del año pasado y principios de éste, basadas aparentemente en informes ``de la inteligencia mexicana y de la Interpol'', sin que pudiera comprobársele nada al respecto. Eran señalamientos sin fundamento, sostuvo, ``con intención dolosa y de mala fe'' utilizados por los periodistas.

En tal sentido consideró que la nota de The New York Times ``no necesariamente tiene la verdad'' y dudó que el procurador general de la República, Jorge Madrazo Cuéllar, haya afirmado que ``no bastaban las declaraciones personales de inocencia'' en alusión a su caso, como se afirma en la publicación.

--¿Considera esto como un enfrentamiento con el procurador Madrazo? --se le cuestionó en Chetumal, durante la colocación de la primera piedra de la construcción de unas oficinas de la logia masónica Belisario Domínguez.

--No, de ninguna manera, porque finalmente lo que tenemos son notas periodísticas. Pero me pongo a disposición para que se hagan las investigaciones más amplias que deban hacerse.

--¿Usted demandará a los medios de comunicación que lo vinculan con el narcotráfico?

--No, porque no se trata de estar discutiendo esto con los medios, ya que están manejando una información. En los casos anteriores hay que recordar que no fue información fidedigna, cuando salió a fines de 1997 y lo aclaré.

--¿Y en este caso es fidedigna?

--¡Cómo voy a saber yo si es fidedigna! Ellos sabrán. A lo que voy es que el año pasado y a principios de 1998 se aclaró que todo era mentira. En este caso, a lo que voy es que es una información otra vez sobre lo mismo; necesariamente tiene que aclararse, pero no tiene que ser por la vía de la demanda.

No obstante, en la entrevista radiofónica indicó que determinará qué hacer una vez que analice con sus abogados la información y realicen ``las consultas necesarias ante la autoridad competente''.

Al referirse a Oscar García Dávila (quien según el rotativo estadunidense es jefe de seguridad del narcotraficante Ramón Alcides Magaña y que fue contratado por la Judicial del estado para dirigir operaciones en Cancún), Villanueva Madrid --cuya fortuna no ha querido cuantificar pese a crecientes cuestionamientos periodísticos-- dijo que ``como es lógico yo no conozco cualquier vinculación que pueda tener. Eso lo puede saber sólo la Procuraduría''.

``El que García Dávila (actualmente prófugo) haya trabajado en la Judicial no quiere decir que tenga un nexo en ese sentido conmigo. Hay que dejarlo claro. Pero lo importante es que estoy a disposición para todo lo que quieran investigar de la forma más amplia'', añadió, con expresión tensa.

--En 1997, cuando también se le acusó de nexos con el narcotráfico, habló con el procurador Madrazo. Al final, afirmó que no había investigación en su contra, pero el fiscal Herrán Salvatti dijo a The New York Times que usted no está exonerado.

--El (Herrán Salvatti) sabrá lo que dice. En todo caso, prefiero ponerme a disposición y que hagan las investigaciones que correspondan. Yo recuerdo esa declaración de Herrán que se dio en febrero de este año, a través de un periódico capitalino, donde decía que a petición mía se había investigado y que estaba limpio. Por eso lo mejor es que esto se atienda en términos de la ley --manifestó Villanueva. (Javier Chávez Ataxca, corresponsal)