En riesgo, el futuro de la educación superior, expresa Bolívar Zapata
Alonso Urrutia y Andrea Becerril Ť La reducción de 8 por ciento en el presupuesto destinado a la educación superior amenaza la producción del conocimiento, ``que es el capital social para el porvenir de México como nación soberana'', sostuvo, Francisco Bolívar Zapata, presidente de la Academia de Ciencias. Agregó que la reducción del gasto en investigación ``pone en peligro el futuro de México''.
Al reunirse con integrantes de la Comisión de Ciencia y Tecnología del Senado, representantes de diversas instituciones de educación superior solicitaron formalmente a los legisladores modificaciones en la asignación de los recursos de este sector, a fin de no paralizar numerosos proyectos ligados al desarrollo económico y social del país.
En respuesta, el presidente de la citada comisión, Francisco Salazar Sáenz, coincidió en que reducir el gasto para la ciencia y la investigación realmente compromete el futuro del país. Agregó que en la actualidad, 90 por ciento de los estudiantes de educación superior están inscritos en instituciones públicas, por lo que no es admisible que ``se castigue o se restrinja o que se siga limitando la educación superior''.
Bolívar Zapata sostuvo que en el caso particular de la UNAM, la disminución del presupuesto ``nos obliga a reducir, de una manera muy importante, el ritmo de trabajo que hemos conseguido y representa un obstáculo muy importante al buen funcionamiento de laboratorios y bibliotecas''.
El académico dijo que además la reducción presupuestaria tiene un efecto multiplicador de problemas, toda vez que alentará un rezago en el equipamiento, ``lo que evidentemente afectará el grado de competencia que se ha conseguido, la calidad de la producción editorial, así como la buena marcha de los posgrados que atienden la matrícula más importante de este nivel de estudios en México''.
La reunión fue convocada para analizar la iniciativa que pretende modificar el marco jurídico que rige a las instituciones dedicadas a la ciencia y la tecnología. En ella estuvieron presentes el director del Conacyt, Carlos Bazdresch; el director adjunto de Investigación Científica de la UNAM, Jaime Martuscelli Quintana; y Alfonso Serrano Pérez, director adjunto de Centros SEP-Conacyt.
Los representantes de las instituciones de investigación externaron su preocupación porque ``si esta propuesta se ejecuta o se aprueba de la manera en que está planteada, cercenaría de una manera muy profunda el esfuerzo que se ha venido incrementando a través de muchos años en este renglón''.
Bolívar Zapata dijo que muchos de los proyectos de investigación que realiza actualmente la UNAM están ligados a problemáticas importantes del país en el área de salud, en la de combate a la pobreza y en la de demografía, entre otros.
En la reunión se expuso que si se afecta la investigación científica, humanística, social y tecnológica ``no puede haber educación superior de calidad, pues la investigación cumple un papel estratégico en la educación superior contemporánea''.
Se planteó que la UNAM ejerce una sexta parte de lo que se invierte en el país en ciencia y con ello apoya más de 2 mil 500 proyectos de investigación anualmente.
En este contexto, los académicos consideraron paradójico que si la investigación responde y se vincula a la solución de la problemática social, ``se limite su funcionamiento y se obstaculice su potencialidad''.
Durante su intervención, Salazar Sáenz dijo que si bien en los últimos años se ha desarrollado la universidad privada, en la actualidad sólo representan 10 por ciento del total de instituciones de educación superior, lo que obliga a sostener los apoyos a la educación pública.