La Jornada 24 de noviembre de 1998

No descarta Hacienda un ajuste al nuevo presupuesto

Antonio Castellanos Ť El comportamiento negativo del precio internacional del petróleo amenaza con recortar el gasto público de un billón 40 mil 935 millones de pesos programado para 1999, caracterizado por Acción Nacional como ``pan y palo'' para la población y que busca beneficiar a los secretarios de Gobernación y de Desarrollo Social.

El subsecretario de Egresos de la Secretaría de Hacienda, Santiago Levy, manifestó que en los últimos días el precio del petróleo ha mostrado un panorama muy malo que podría provocar la revisión de los programas macroeconómicos en enero o febrero del año próximo, si el precio del petróleo queda por debajo de los 11 dólares calculados en la iniciativa presentada al Congreso.

Al reunirse con integrantes de la Comisión de Programación y Presupuesto de la Cámara de Diputados, el funcionario sugirió incrementar los ingresos --no explicó si vía impuesto o aumento de precios y tarifas del sector público-- en caso de presentarse un fenómeno adverso en el mercado petrolero, antes de recortar el Presupuesto de Egresos.

Destacó que el gasto ya está ``demasiado ajustado. Es deseable tener un gasto mayor pero esto no fue posible, y por ello se afectó el gasto de inversión en educación, lo cual es muy lamentable'', afirmó.

Levy hizo una amplia exposición de la propuesta gubernamental, y al responder a la afirmación de que el Presupuesto de Egresos tiene un perfil de ``pan y palo'' para la población, destacó que en ningún momento se ha pensado en beneficiar a alguna personalidad como lo sugirió el diputado panista Carlos Arce.

El incremento de 200 por ciento en los programas de seguridad obedece a que la delincuencia se ha incrementado en todo el país, mientras el gasto social se canaliza hacia los estados donde se calcula que habita 60 por ciento de la población con menores ingresos.

El subsecretario de Egresos afirmó que el gasto del Poder Ejecutivo será ajustado en los programas de apoyo a estados en el ramo 23, Conasupo, Ferrocarriles, Aeropuertos y Servicios Auxiliares, PIPSA y otras dependencias y entidades del Ejecutivo. Esto dará un total de 20 mil 775 millones de pesos.

El mayor recorte se hará con la desaparición gradual de la Compañía Nacional de Subsistencias Populares durante el próximo año, y que representará un total 6 mil 872.4 millones de pesos. Los subsidios generalizados desaparecen y la mayor parte se dedica a apoyar programas dirigidos a las familias con menores ingresos.

El funcionario negó de manera categórica que en el programa de saneamiento financiero se esté suponiendo considerar como deuda pública los recursos destinados al Fondo Bancario de Protección al Ahorro. Definitivamente esto no puede hacerse porque todo lo concerniente al Fobaproa todavía está a discusión, afirmó.

Para 1999 el costo financiero de la deuda representará un total de 185 mil 958.8 millones de pesos, cifra que será 43 mil 669.5 millones pesos mayor a la ejercida en 1998, y del total de esta última, 15 mil 666.8 millones serán recursos para proteger el patrimonio de los ahorradores depositado en los bancos comerciales.

Al apoyo a deudores que incluye créditos hipotecarios, beneficios adicionales a la planta productiva nacional, acuerdos de financiamiento y fomento a la micro, pequeña y mediana empresa, así como respaldo al sector agropecuario, entre otros, se destinan únicamente mil 277 millones de pesos.

Levy detalló que a la deuda interna se irán 16 mil millones de pesos y a la externa 6 mil 952 millones. Para el débito de Petróleos Mexicanos y de la CFE se destinarán mil 431 y 2 mil 451 millones de pesos adicionales.

El funcionario destacó durante su exposición que no habrá recorte para los estados y municipios; tampoco para los poderes Legislativo y Judicial ni en el Instituto Federal Electoral, cuyos proyectos de presupuestos de egresos fueron incluidos en la iniciativa.

Expuso que los proyectos de presupuesto de los poderes Legislativo y Judicial, del IFE y del ramo 33 aumentan 13.1 por ciento en términos reales, mientras el del Ejecutivo será de 3.1 por ciento, lo que representa 17 mil 485 millones de pesos.

Dijo que la inversión impulsada por el sector público ascenderá a 211 mil 394 millones de pesos, de los cuales 127 mil 398 millones (60.3 por ciento), corresponden a proyectos financiados con recursos presupuestarios. Los 83 mil 996.9 millones de pesos restantes se refieren a proyectos de inversión financiada.


Ciro Pérez Silva Ť El secretario de Hacienda y Crédito Público, José Angel Gurría, llegará hoy ante el pleno de la Cámara de Diputados con respuestas a una serie de interrogantes que le fueron proporcionadas con anticipación.

Sabe, por ejemplo, que durante su comparecencia los diputados de oposición cuestionarán el alcance de las metas mínimas propuestas por el gobierno en el Presupuesto de Egresos para 1999.

Publicadas en la Gaceta parlamentaria desde el pasado viernes, en un hecho sin precedentes, las preguntas que los diputados formularán al funcionario van desde la pretensión oficial de establecer un impuesto al servicio telefónico -mientras se propone reducir 50 por ciento el impuesto a las bebidas alcohólicas-, hasta el hecho de que con las metas propuestas en un año electoral, el Ejecutivo pretende mejorar la imagen de su gobierno y beneficiar a su partido en las elecciones del 2000.

Corresponderá al Partido Verde Ecologista de México abrir la sesión de preguntas sobre la Ley de Ingresos, y el mismo orden prevalecerá el próximo jueves, cuando Gurría asista nuevamente a plantear lo relativo al Presupuesto de Egresos.

Los verdes cuestionarán al funcionario sobre la propuesta de lograr una meta inflacionaria de 13 por ciento para 1999, cuando se están programando aumentos importantes a la gasolina, energía eléctrica, servicio telefónico y otros bienes y servicios, además de saber qué se puede esperar para el bienestar de las familias, si se pronostica que el crecimiento en el consumo privado será de 1.9 por ciento en términos reales, a diferencia de este año, cuando creció 7.3 por ciento.

El Partido del Trabajo cuestionará la política impositiva, a la que califica de ``grave error'', ya que debilitó la capacidad de maniobra del gobierno federal ante contingencias internacionales como la baja en el precio del petróleo. Además se preguntará al secretario si ha llegado el momento de revertir la política fiscal de desgravación ``indiscriminada'' al ``gran capital y la élite del dinero'', para volver a situar al sistema fiscal dentro de los parámetros de la normatividad impositiva mundial.

A su vez, los panistas prepararon nueve preguntas para que Gurría responda sobre la prudencia y la congruencia de proponerse metas constantes de crecimiento que eviten los frenos y arranques tradicionales en la economía, y no determinarlas por cuestiones electorales, o cómo se sancionará a las personas físicas que adquieran mercancías sin obtener los comprobantes por las compras que realicen.

El PRD, manifestará ``serias dudas'' sobre las metas mínimas propuestas por el Ejecutivo, luego de subrayar que los cálculos a las variables macroeconómicas hechos por el gobierno el año pasado fueron ``notablemente erróneos''. Cuestionará también la promesa de mantener el deterioro de las condiciones de vida e ingreso de la población, a cambio del ofrecimiento de que en el mediano y largo plazos (a partir del 2000) los mexicanos mejorarán sus condiciones de vida.

``¿Cuál es la razón por la que se reitera, con una terquedad incomprensible a la luz de los pésimos y costosos resultados obtenidos, la continuidad de esta política? ¿Cómo realiza el gobierno sus proyecciones? ¿Con qué bases el gobierno supone que la ciudadanía creerá en sus pronósticos económicos?'', plantearán los diputados perredistas a Gurría.

En su turno, los legisladores priístas ponderarán el contenido del paquete fiscal para el próximo año.