Avanza el diálogo entre zapatistas y la sociedad civil
Hermann Bellinghausen, enviado, San Cristóbal de las Casas, Chis., 21 de noviembre Ť El EZLN se comprometió hoy a respetar las condiciones particulares de cada municipio al que acudirán sus 5 mil delegados para efectuar próximamente la consulta nacional sobre derechos y cultura indígenas. El comandante Tacho aseguró esta noche que no se excluirá a nadie y que la consulta será el primer triunfo democrático de los acuerdos de San Andrés.
Al dirigirse a la plenaria de la mesa de trabajo sobre cómo deberá ser la consulta, el delegado zapatista también dijo que el proceso de consulta respetará los procedimientos y tradiciones de cada municipio para ejercer la democracia: votos, asambleas comunitarias y otros mecanismos.
Después de un largo día de trabajo que había sido fructífero, según el ánimo del millar de participantes, el comandante Tacho aseguró que el EZLN, después de analizar las propuestas de procedimientos y fecha surgidas de este encuentro, definiría las preguntas y el momento de la consulta.
Propuso la creación de comités de trabajo a nivel estatal y nacional, y que éstos iniciaran sus actividades incluso antes de que quede constituida la comisión promotora de la consulta.
Dijo que la experiencia de la marcha de los mil 111 zapatistas al Distrito Federal sirve de antecedente, ya que fue exitosa. También propuso que se incluyera en la consulta a los jóvenes de 12 a 15 años.
``No hay que dejarse, el pueblo tiene que aprender a mandar'', dijo Tacho, y agregó que la sociedad también puede analizar y decidir, y que es el gobierno el que no lo ha permitido.
Estas declaraciones se dan en el contexto de un encuentro al que acudieron más de 3 mil delegados, de 400 organizaciones sociales, procedentes de 27 estados de la República.
Consenso y cordialidad
Las propuestas y los consensos para organizar la consulta nacional convocada por los zapatistas avanzaron hoy en el encuentro de la sociedad civil con cordialidad, y hasta con gracia, en marcado contraste con los nubarrones que se tendieron entre ayer y hoy sobre el diálogo del EZLN con la Cocopa.
Dentro de El Carmen, en la mesa del encuentro dedicada a discutir los mecanismos para organizar la consulta, las intervenciones fueron inusitadamente breves y concisas, y en un ambiente de respeto que no siempre caracteriza esta clase de reuniones políticas.
No fue una mesa de personajes, ni siquiera de grandes temas. Amas de casa, profesores, militantes gays, estudiantes, representantes ejidales, urbanas madres con su bebé en brazos, sindicalistas, artesanos y dirigentes indígenas, gente de la calle con más ganas de ponerse de acuerdo que de imponer su opinión, ofrecieron una lección cívica que me dicen que hizo decir al doctor Pablo González Casanova: ``Esta reunión demuestra que los viejos tenemos muchas cosas que aprender''.
Sencillez de la mayoría, y paciencia de todos. La gente no se salía ni interrumpía. Cómo decirlo: era un encuentro horizontal entre iguales que no vinieron a sacarse los ojos ni la lengua.
Una profesora universitaria comentaba: ``Hemos avanzado mucho. Basta recordar cómo fue la Convención Nacional Democrática. Ahora somos más tolerantes. Hemos aprendido a escuchar, y a decirnos las cosas''.
Hoy también, y por primera vez, los empresarios chiapanecos hicieron oír su voz en un encuentro de esta naturaleza. Y a pesar de las diferencias, fueron escuchados sin sobresaltos por la concurrencia. Los empresarios reconocieron las condiciones de vida injustas e inaceptables en que viven los indígenas de Chiapas, y consideraron que una solución pacífica sería en bien de todos, fomentaría la productividad y el empleo.
Paradójicamente, mientras la interlocución del EZLN con la Cocopa, y la comisión misma entraban en crisis de manera preocupante, las personas de todo el país que se reunieron hoy en El Carmen demostraron que en la tolerancia caben el campo y la ciudad, el movimiento urbano popular, las organizaciones estudiantiles, los trabajadores y hasta los patrones, la búsqueda de consejo, el aprendizaje de la democracia.
Y de sonrisas a sonrisas, los enviados de Gobernación hacían hoy la suya de oreja a oreja ante el desencuentro de la Cocopa con los rebeldes, así como, en otro ámbito, los participantes al encuentro de la sociedad civil con los zapatistas sonreían del contento de estarse entendiendo.
La solidaridad de la población sancristobalense, por otro lado, permitió superar airosamente la estrechez económica para atender al cinturón de paz. Las aportaciones de arroz, frijol y tortillas permitieron cubrir las necesidades de cientos de personas.
Como decía una mujer que trabaja de voluntaria en la cocina comunal: ``Cuando hay ganas, hasta sin dinero salimos adelante''.
También la actriz Ofelia Medina, una vez más, ofreció su trabajo con fines solidarios. La recaudación de dos funciones de su espectáculo Sor Juana hoy, que dio este día aquí, fueron donados para el encuentro, mientras los músicos de La Bola, buenos roqueros, han estado tocando estas noches en un centro nocturno de San Cristóbal para donar sus ganancias, con el mismo fin.