Davidow demanda a México acciones más enérgicas contra los polleros

Jorge Alberto Cornejo, corresponsal, Tijuana, BC, 20 de noviembre Ť El embajador de Estados Unidos en México, Jeffrey Davidow, aseguró que a su gobierno le complacería ``ver más determinación de las autoridades mexicanas en el combate al tráfico de indocumentados, con acciones más severas en contra de los traficantes''.

A la vez lamentó los decesos de los 345 migrantes indocumentados que han muerto en su intento por burlar a la Patrulla Fronteriza durante los últimos cuatro años en esta región; sin embargo, advirtió que Estados Unidos no retrocerá en su política migratoria.

En conferencia de prensa ofrecida la víspera en la sede del consulado general de Estados Unidos en Tijuana, Davidow indicó que no se espera un incremento en la migración indocumentada de mexicanos hacia el vecino país del norte, como consecuencia del incremento en los impuestos y el precio de la gasolina en el país.

Davidow indicó que mientras en Estados Unidos los traficantes de personas reciben ``todo el rigor de la ley'' a través de juicios y penalidades severas, es lamentable que ello no ocurra de este lado de la frontera, donde viven esas personas.

``Yo creo que hay necesidad de más esfuerzos de este lado de la frontera para cazar, encontrar y enjuiciar a los coyotes y polleros, quienes no lo piensan dos veces para dejar morir a un migrante en el desierto; ellos son los criminales y no las personas que intentan cruzar sin documentos'', dijo.

El embajador estadunidense indicó por otra parte que la única solución viable al problema migratorio es el desarrollo a largo plazo de México, ``para que no haya tantas personas que quieran salir para trabajar por presiones económicas aquí'', puntualizó.

De acuerdo con datos oficiales, la Patrulla Fronteriza aprehendió aproximadamete a un millón 516 mil migrantes indocumentados a lo largo de la frontera suroeste de Estados Unidos, en el año fiscal comprendido entre el primero de octubre de 1997 y el 30 de septiembre de 1998. La gran mayoría de ellos eran mexicanos y fueron deportados a territorio nacional.

Durante ese mismo año, la Patrulla Fronteriza descubrió o conoció de 254 decesos de migrantes indocumentados, los cuales se registraron en su mayoría en los meses calurosos del verano, aunque algunos tuvieron lugar durante el invierno, a consecuencia de las bajas temperaturas.

De las mismas cifras se desprende que de los 254 migrantes que murieron tan sólo en un año, 84 fallecieron debido a la prolongada exposición al sol, y otros 84 se ahogaron.

El tráfico ilegal de personas genera en México ganancias estimadas por las autoridades entre los 420 y 560 millones de dólares anuales, a por lo menos 400 grupos delictivos dedicados a esa actividad en el país, distribuidos en todo el territorio nacional, pero principalmente en la franja fronteriza con Estados Unidos.

Esas cantidades representan entre 6 y 8 por ciento de los 7 mil millones de dólares que según la Organización Internacional para las Migraciones genera el tráfico de indocumentados a nivel mundial.

Las importantes cantidades de dinero que reciben los grandes grupos de traficantes, de las cuales el Servicio de Inmigración y Naturalización (SIN) de Estados Unidos estima que operan ocho en el territorio mexicano, asistidos por una red de cerca de 400 pequeñas bandas, propician además otros delitos relacionados, como el lavado de dinero y, en algunos casos, el tráfico de estupefacientes utilizando a inmigrantes como ``mulas de carga''.

No obstante, el arresto de polleros, como se les denomina comúnmente a los delincuentes dedicados al tráfico ilegal de personas, se ha incrementado considerablemente en el país durante los últimos tres años, aun cuando existen serias limitaciones legales que hacen más difícil la labor de los miembros de los grupos Beta.

Estas limitaciones incluyen la necesidad de detener a los traficantes de personas en flagrancia de delito mediante la impugnación directa de por lo menos dos de los migrantes.