La Jornada 10 de noviembre de 1998

Del agua sólo nos defendemos, no la manejamos: González de León

Angel Vargas Ť Al desecar sus lagos, ríos y arroyos, los habitantes del Valle de México ``no hemos manejado el agua, sólo nos hemos defendido de ella'', señaló ayer Teodoro González de León, durante la inauguración del congreso Vuelta a la ciudad lacustre. El agua en la ciudad de México, problemas y soluciones.

Para el prestigiado arquitecto, el problema del agua que es la más ``urgente'' de resolver en la capital de la República, se ha esquivado y en su lugar se atienden, ``aunque nunca con el ritmo deseado y con muchos contratiempos'', el transporte subterráneo, la restructuración vial, los libramientos externos y las redes de comunicaciones.

Pero, ¿qué tiene que ver lo urbano con la cultura? La respuesta, en voz del titular del Instituto de Cultura de la Ciudad de México (ICCM), Alejandro Aura: ``La función propositiva de la cultura tiene la obligación de auxiliar a la sociedad en la búsqueda de mejores formas de vida''.

Aura, quien precedió en el uso de la palabra a González de León, justificó el papel que como organizadora del mencionado congreso tiene la institución a su cargo. Si bien al ICCM no le corresponde adentrarse en la actual distribución de papeles de obra pública, como las construcciones hidraúlicas, agregó, sí tiene la responsabilidad de crear las condiciones para que ``las mentes más esclarecidas se manifiesten en un clima de libertad y respeto''.

Ante el jefe de gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas, y del gobernador del estado de México, César Camacho, González de León consideró equivocada la decisión de realizar las obras del drenaje profundo en lugar de crear una serie de lagos en el valle de México, tal y como lo propuso hace más de 30 años el ingeniero Nabor Carrillo en el Proyecto Texcoco.

``Con el drenaje profundo se dejó escapar 90 por ciento del agua que penosamente la naturaleza sube a este valle pasando la barrera de los 3 mil metros. Dependemos de otras cuencas para abastecernos de agua y hemos provocado desastres ecológicos, como el del Valle de Lerma. Como (el agua) no es suficiente, tenemos que bombear intensivamente dentro del valle y (con ello) acelerar el hundimiento del centro de la ciudad, que sigue los ritmos de los años cincuenta.''

El arquitecto indicó que aún se está a tiempo de realizar el Plan Texcoco, que retomado por el Taller Ciudad de México de la Facultad de Arquitectura de la UNAM es la principal propuesta del congreso. ``La mancha urbana invadió Chalco, pero todavía queda espacio para un proyecto de gran dimensión como es la reinvención de la ciudad lacustre'', dijo, luego de subrayar que esta propuesta sólo puede cobrar fuerza y, consecuentemente, llegar a realizarse si se involucra con ella la sociedad civil.

El congreso será clausurado hoy, a las 18 horas, en el Antiguo Colegio de San Ildefonso (Justo Sierra 16, Centro Histórico).