Contuvo la dirigencia panista una insurrección de sus legisladores

Alonso Urrutia y Andrea Becerril Ť La insurrección de legisladores panistas en torno al Fobaproa fue frenada ayer por las esferas directivas en sus respectivas fracciones parlamentarias. El vicecoordinador de Acción Nacional en el Senado, Juan de Dios Castro, desautorizó la exigencia planteada la víspera sobre la separación del cargo de Guillermo Ortiz como condicionante: ``no hemos tomado ninguna determinación definitiva sobre el tema. Y que quede eso bien claro, no hay tal decisión'', dijo

Sin embargo, el anuncio de condicionar la aprobación de la iniciativa del Fobaproa a la salida de Guillermo Ortiz del Banco de México motivó la reacción priísta. ``Simplemente, eso es una postura no negociable'', respondió Dionisio Pérez Jácome, coautor de la iniciativa que está por enviarse al Congreso. ``Es una forma de extorsionar, que refleja el conflicto interno del PAN entre duros y blandos'', expresó Rodolfo Becerril, también participante en las negociaciones.

En el interior de la fracción panista en el Senado, el anuncio realizado la víspera por el diputado Abelardo Perales causó malestar, y en reunión privada se vertieron críticas sobre el alcance del anuncio. Senadores panistas dijeron que hay puntos delicados en la discusión interna en que no se ha alcanzado consenso, y que prolongarán el debate para, a partir de éste, asumir una postura.

En las discusiones privadas se ha puesto de manifiesto una abierta confrontación entre senadores y diputados, pues estos últimos han asumido posturas más radicales en torno al Fobaproa, y fueron ellos quienes impulsaron la posición fijada ayer en el sentido de que la iniciativa se aprobaría si el Revolucionario Institucional devolvía el dinero recibido de empresas cuyas deudas están hoy en Fobaproa y, además, se separaba de sus cargos a Guillermo Ortiz y al presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Eduardo Fernández.

Públicamente, Juan de Dios Castro -en ausencia del coordinador Gabriel Jiménez Remus, de viaje en Cuba- enmendó la postura, y consideró que la reacción de la Secretaría de Gobernación en cuanto a atribuir al PAN una intención de linchamiento político es porque carece de información.

Según Juan de Dios Castro, el condicionamiento anunciado ayer por diputados no fue en realidad tal, ``sino la búsqueda de una señal de poder o de facilitar la posibilidad de resolver el problema, ¿Por qué razón? Por una razón que se señaló ayer: el nuevo instituto que nazca del acuerdo con la propuesta que ha realizado el PAN tendría precisamente de directivos a los funcionarios que se han señalado''.

Asimismo, insistió en que su partido no abandonará el diálogo.

-¿Qué respuesta da a lo que dijo ayer la Secretaría de Gobernación?

-Lo entendió como un condicionamiento que impediría los trabajos. No es así, en esos términos, como se dio el día de ayer. El PAN seguirá participando en los trabajos.

-Dice Gobernación que pedir la destitución es una persecución política.

-No hago comentario a eso.

El senador y secretario general del CEN panista, Tarcisio Rodríguez, aseguró que la exigencia del PAN en cuanto a eliminar la impunidad se ha sostenido desde siempre, pero matizó en torno a las condicionantes anunciadas ayer: ``se tomará una postura final del partido por consenso''.

A su vez, el senador Juan Antonio García Villa, quien participó en la conferencia en que se hicieron los anuncios, matizó la postura y expresó que ``nunca se dijo de esa manera'' -en cuanto a condicionar la negociación-; sólo se habló de que ``la separación del cargo de estas personas facilita las cosas''.

-¿La propuesta de ustedes ayer se tomó como una especie de rebelión, ya que Carlos Medina dijo que no estaba condicionada la participación del PAN?

-Tiene razón. Como condición no lo ha planteado el PAN, ni nosotros tampoco, lo dijimos como una fórmula que facilitaría las cosas.

-¿Entonces no hay rebelión?

-Yo no la advierto.

Por lo pronto, el anuncio de los panistas provocó una irritada respuesta de los priístas, quienes los acusaron de chantajear en las negociaciones. ``Es absurdo condicionar un planteamiento de remover a Ortiz a un proceso legislativo'', señaló Pérez Jácome.

Protagonista directo de las negociaciones, este legislador aseguró que en éstas el PAN nunca planteó semejante postura, la cual, en cualquier caso, es inaceptable. ``Ese asunto es absolutamente no negociable; imagínate al PRI tomarse atribuciones de las que no está posibilitado como fracción parlamentaria'', en abierta invasión de atribuciones, pues solicitar la renuncia sólo compete a la junta de gobierno del Banco de México o, en su caso, al Presidente.

Rodolfo Becerril fue más duro y dijo que Acción Nacional confunde la solución del problema con los ánimos de beligerancia. Tras advertir que hay una abierta división entre duros y moderados, aseguró que lo anunciado ``es una forma de extorsionar'', y que además ``eso sería una terrible señal para los mercados, independientemente de que habrá que discutir si procede o no, y ojalá esto no empantane las negociaciones''.