Fernando Figueroa Ť En la telenovela El amor de mi vida, que transmite Tv Azteca, la esposa del dueño del periódico le dice a una amiga algo así: ``Fíjate que mi marido me regaló un collar de perlas carísimo; de ese tamaño debe ser la culpa que se carga el muy canijo'' (en efecto, el personaje que interpreta Jesús Ochoa le anda echando los perros a una secretaria buenísima). Cuando mandan a corte comercial, aparece José Ramón Fernández diciendo un rollo parecido a esto: ``El Estadio Azul tiene capacidad para 55 mil espectadores. Se necesitarían 557 estadios similares para albergar a toda la gente que en México tiene hambre; y para acabar con ella, sólo se necesita tu voluntad''. POR UN MEXICO sin hambre sería una campaña maravillosa si, curiosamente, no hubiera coincidido con el informe final de la procuradora suiza Carla del Ponte respecto del origen de las cuentas bancarias de Raúl Salinas en ese país. El sábado 17 de octubre se llevó a cabo un programa, conducido por Jorge Garralda, en el que se recibieron donativos en efectivo y en especie para tan altruista fin. Lograron juntar 10 millones de pesos y se dejó abierta una cuenta bancaria para superar ese monto. El martes 20, la señora Del Ponte decidió confiscar 114 millones de dólares a Raúl Salinas, por considerar que provenían del narcotráfico. El viernes 23, Eduardo Luengo Creel, abogado del hermano del ex presidente Carlos Salinas, dio a conocer documentos en los que se informa que un testigo de la Drug Enforcement Administration (DEA), aseveró que Raúl Salinas transfirió a Ricardo Salinas Pliego, dueño de Tv Azteca, 160 millones de dólares. EMILIO AZCARRAGA JEAN afirmó que ``los despidos masivos ya se acabaron''. Ahora siguen -decimos nosotros-- los despidos por goteo. Tina Galindo, directora de Televiteatro, anunció que el consorcio dirigido por Emilio III ya no quiere saber nada de producciones teatrales. Aunque Televisa seguirá apoyando con publicidad las obras en las que participen sus actores, a partir del 1 de enero de 1999 ya no financiarán nada que no sean telenovelas, programas unitarios o musicales. LEASE COMO CORRIDO norteño: Se caaasaron en Tijuana un par de cantantes de rock/ él vocalista chileno y ella de esa frontera./ Fue el 16 de octubre y no invitaron a la prensa./ El galán es Alvaro Henríquez, gritón del grupo Los Tres;/ ella es nada menos que nuestra Julieta Veneeegas./ Gracias por la no invitación,/ al fin que ni queríamos. DENTRO DE LA gustada sección La casa del jabonero, una anécdota antológica: entre mentadas de madre, la adorada jefa de sección le exigió a sus reporteros entrevistar, a como diera lugar, ¡a Carmina Burana!