Nadie gana con promover el enfrentamiento, dice el Presidente
Rosa Elvira Vargas, enviada, Toluca, Méx., 30 de octubre Ť En México hay que dejar a un lado las conductas de enfrentamiento, pues ``nadie gana promoviendo la destrucción'', expresó el presidente Ernesto Zedillo, y convocó a todos los actores de la vida política nacional a desechar intereses particulares o de grupo y asumir ``la responsabilidad que les corresponde'' para que el país logre enfrentar las difíciles circunstancias externas. Reiteró entonces que su gobierno aplicará, invariablemente, las acciones ``que juzguemos necesarias'' para proteger el crecimiento económico.
Todos, gobierno y sectores políticos -afirmó-, deben cumplir su parte para que México salga adelante. Por ello, debe colocarse por delante el interés de la nación y sumar fuerzas para que el país siga el camino del crecimiento, pues ese es el único medio para desplegar políticas sociales que atiendan los gravísimos rezagos que aún subsisten.
Zedillo, que en gira por el estado de México puso en marcha nuevas instalaciones educativas e inauguró una tienda departamental y tres fábricas de la empresa Fomento Económico Mexicano (Femsa), resaltó el hecho insoslayable de los grandes retos que enfrenta la nación, tanto por la caída en los precios internacionales del petróleo como por la inestabilidad financiera mundial.
Mencionó que este último fenómeno ha significado, entre otras cosas, que recursos externos que antes estaban disponibles para el financiamiento de la economía nacional, hoy no lo estén e incluso no se contará con ellos ``por un plazo que podrá prolongarse durante algún tiempo''.
Y aunque de entrada había ponderado la posición mexicana respecto de la crisis financiera, y una vez más había puesto de relieve que este año el país tendrá una de las tasas de crecimiento más grandes del mundo, precisó que hacia los próximos dos años, los desafíos nacionales estriban esencialmente en proteger al máximo posible el desarrollo de la economía y la generación de empleos.
Iniciativa y disciplina, antídoto
Las que en todo momento el mandatario definió como ``circunstancias adversas'' de la economía internacional han tenido ya, dijo, un efecto negativo en México y ello se resentirá también ``en los años por venir''. Como antídoto para ello, Zedillo apeló a la iniciativa y a la disciplina como formas para reducir ``en la medida de lo posible'' tales efectos adversos. Los fundamentos de que se han dotado los mexicanos desde hace ya varios años, indicó, permiten una fortaleza en la economía de la que antaño se carecía.
``Antes, cualquier evento de carácter externo que resultase perturbador para nuestra economía, se magnificaba hacia adentro y nos causaba daños mucho más grandes de los que correspondían a esa perturbación externa'', expuso. Pero hoy, subrayó enseguida, gracias a la disciplina y a la congruencia que ``seguiremos aplicando'', México ha logrado minimizar esos efectos negativos.
Pero esa congruencia y esa disciplina económicas, resaltó Zedillo, deben mantenerse y es importante que todos los que tienen responsabilidades para con el país ``cumplan la parte que les corresponde''.
Tres párrafos que adquirieron especial significado, sobre todo a la luz de los debates actuales en materia económica, fueron destinados por el Presidente para señalar: ``Nadie gana promoviendo la destrucción. Nadie gana promoviendo el enfrentamiento. En ese enfrentamiento todos perdemos y por eso todo mundo tiene que asumir la responsabilidad que le corresponde'', dijo.
Planteó que es el momento, ante las difíciles circunstancias externas, de que todos antepongan el interés de la nación al particular o de grupo. ``Que dejemos a un lado las conductas de enfrentamiento para poder sumar...'', apuntó.
La agenda presidencial inició temprano en Satélite, con la apertura de otra sucursal de El Palacio de Hierro, donde la familia Bailleres invirtió 40 millones de dólares y se dará empleo permanente a 900 personas. Más tarde, en Toluca, puso en marcha tres nuevas plantas del grupo Femsa. La primera es una ampliación de la Cervecería Cuauhtémoc-Moctezuma, que de este modo aumentará ciento por ciento su producción en las diez marcas de la bebida que le pertenecen. La segunda, una planta de empaques dedicada a la producción de latas para la industria de bebidas y alimentos, donde en los últimos tres años se han invertido 34 millones de dólares, y la tercera, una megaplanta de Coca Cola con una capacidad de producción anual de 115 millones de cajas unidad y en la que se invirtieron 66 millones de dólares.
Asimismo, en Texcoco, Zedillo puso en funcionamiento un nuevo campus de la Universidad Autónoma del Estado de México. Ahí destacó los avances de la educación superior en este sexenio y reafirmó el compromiso de su administración para con las universidades cuya matrícula, dijo, pasó de 1.4 millones de alumnos en 1995, a 1.8 millones este año, lo que cubre la meta que se había fijado originalmente.
Frente a un buen número de los 2 mil 213 estudiantes de las nuevas instalaciones, el Presidente dijo que el país necesita jóvenes intelectual y físicamente sanos.
Más adelante, mencionó que el programa oficial para el mejoramiento del profesorado apoya a más de 5 mil 300 docentes de universidades estatales, y destacó el crecimiento en el número de universidades tecnológicas que se han inaugurado este sexenio, pues de siete que había a su inicio hoy funcionan 36. Respecto de los institutos tecnológicos, informó que operan 153 en toda la República. Frente a todo ello, estableció que el gobierno dota de las herramientas necesarias para ``el más prometedor de los presentes''. Por último, en Tejupilco, el titular del Ejecutivo puso en marcha la nueva Universidad Tecnológica del Sur de la entidad, en un acto al que el gobierno estatal convocó a más de seis mil personas.