Gurría insiste en eliminar la tasa cero en alimentos y fármacos
Miriam Posada y Laura Gómez Ť La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) insistió ante representantes del comercio organizado de 13 países en eliminar la tasa cero en alimentos y medicinas, y en quitar exenciones a otros rubros. José Angel Gurría, titular de la dependencia, informó que, junto con el sector privado, se revisa a fondo el sistema tributario con el propósito de llevar ante el Congreso de la Unión ``la mejor propuesta'' sobre el impuesto al valor agregado (IVA) y la tasa cero.
Puntualizó que México crecerá a pesar de la recesión mundial que se espera para 1999, aunque a una tasa menor a la de los últimos dos años. Por ello, dijo, lo que se debe procurar es que el déficit sea financiable, sobre todo con ahorro interno, sin desplazar a inversionistas en México y sin que se presionen las tasas de interés internas. ``Tendremos que ir con mucho cuidado en supuestos como el precio del petróleo y ser cautelosos para evitar que nos vuelva a suceder lo que este año, al ajustar continuamente el presupuesto''.
A pregunta expresa del presidente de la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio (Concanaco), Armando Araujo Montaño, Gurría detalló que el gobierno federal y el sector empresarial revisan el sistema tributario a fin de determinar cual será la mejor manera de tratar la propuesta de eliminar la tasa cero en alimentos y medicinas y aumentar otros impuestos, entre ellos el IVA. El dictamen final, dijo, se basará en las necesidades de la población, aunque también se tomarán en cuenta otros criterios.
Las consecuencias, dijo, podrían ser positivas en términos de recaudación, modernización o simplificación, aunque habría otras en términos de aumento de costos a los sectores o de impacto al índice de precios.
En su defensa de la postura gubernamental, el responsable de las finanzas públicas argumentó que en el sistema tributario se presentan algunos abusos y existe un problema de fiscalización generada ``cuando en la tasa del IVA hay exenciones y se rompe la cascada típica, por lo que se vuelve más difícil la fiscalización''.
También, sostuvo, hay que reconocer que las exenciones a los impuestos al consumo son generalizadas, por lo que no es posible captar con claridad a los grupos beneficiarios cuando se pretende dar estímulos a los sectores más vulnerables. ``Las exenciones del IVA en algunos productos benefician a todos los consumidores de México, necesiten o no el subsidio, como en el caso de la tortilla, de tal forma que si sólo se requiere un peso de subsidio para los grupos más vulnerables el gasto se convierte en dos pesos o más del gasto fiscal''.
Subsidiar a todos los consumidores, sostuvo, no es la mejor forma de generar apoyos, sino la entrega de recursos de manera directa por la vía del gasto, con programas específicos cuyo avance y resultados puedan evaluar constantemente la opinión pública, el Congreso y el gobierno.
Gurría justificó la insistencia oficial en aplicar esta medida al señalar que la tendencia mundial es gravar el consumo y los ingresos de las personas y permitir que las utilidades se reinviertan a fin de incrementar el número de empleos. ``La mayoría de los países tienen tasas del impuesto al valor agregado mayores a la nuestras: Argentina se rige con una tasa de 21 por ciento; Uruguay, de 22, y Chile de 18 por ciento, mientras que la de México es de 15 por ciento y 55 por ciento de los productos están gravados''.
También se refirió a las cargas fiscales de los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), donde los impuestos como proporción del producto interno bruto (PIB) suman 28 por ciento, mientras que en México la aportación por esta vía es de 14 por ciento, y por IVA la recaudación es de tres por ciento del PIB. ``Chile recauda casi tres veces más que nosotros, aunque no es sólo cuestión de una mayor tasa de impuestos, sino de que la recaudación sea más eficiente y con una mejor fiscalización''.