La Jornada 27 de octubre de 1998

< Nuevo plan de apoyo antidroga entre México y EU: McCaffrey

Gustavo Castillo y Jesús Aranda Ť México y Estados Unidos establecerán un nuevo mecanismo de cooperación, a través del cual podrán evaluar y coordinar sus esfuerzos de combate al narcotráfico, que se denominará Medición de Rendimiento-Desempeño, se informó durante una conferencia de prensa ofrecida por zar antidrogas de Estados Unidos, Barry McCaffrey.

Aseguró que México ``sellará'' su frontera norte y la zona de la Península de Yucatán al paso de drogas y armas, pues -según cifras del gobierno estadunidense- 50 por ciento de la cocaína y la heroína que se consume en esa nación ingresa vía marítima a través del Pacífico este y el Caribe occidental, luego de arribar a playas mexicanas.

El funcionario estadunidense indicó que en las pláticas con la secretaria de Relaciones Exteriores, Rosario Green, y el procurador Jorge Madrazo Cuéllar se trató ``la cooperación en la aplicación de la ley, el lavado de dinero, la estrategia para combatir las drogas en México'' y la nueva iniciativa.

``Hemos trabajado durante un año para llegar a un punto de vista común de cómo evaluar y coordinar nuestros esfuerzos.''

Cambio de rutas

Al referirse a los nuevos mecanismos para distribuir droga a Estados Unidos, el encargado de la lucha antinarcóticos en ese país reconoció que en México ``los días fáciles de vuelos con carga se terminaron. México ha terminado con ese tipo de contrabando''.

Sin embargo, mencionó que mucha droga entra por Panamá y después por la carretera Panamericana, y trata de cruzar la frontera. Pero hay otras maneras, como el contrabando desde Haití y Jamaica, donde llega la droga en lanchas rápidas de Colombia.

Refirió que ``durante los últimos siete u ocho años, los patrones de tráfico de droga han cambiado de manera significativa y se ha vuelto más difícil la situación para las organizaciones criminales, por lo que han respondido con nuevas técnicas''.

Los Amezcua, ``una amenaza''

Barry McCaffrey aseguró que el poder que tienen las organizaciones de traficantes de drogas constituyen ``una amenaza para la seguridad nacional, tanto de Estados Unidos como México'', y en particular refirió que los presuntos narcotraficantes Jesús, Luis y Adán Amezcua Contreras ``son una amenaza para ambas sociedades''.

Aunque mencionó tener expectativas de que sean extraditados a Estados Unidos, reconoció que su enjuiciamiento ``es un reto para ambas sociedades''.

Indicó que en Estados Unidos se piensa que ``los hermanos Amezcua han dominado con su agresividad y violencia el mercado''.

Al respecto, Jorge Madrazo dijo: ``En este y en cualquier caso de extradición, lo que debe tomarse en cuenta es que no sólo depende de la voluntad del órgano ejecutivo, sino que también existe una intervención decisiva de los jueces''.

El encargado de la Oficina Nacional de Política para el Control de Drogas de Estados Unidos aseguró que en su país las estrategias de combate han reducido en 50 por ciento el número de consumidores de estupefacientes, aunque reconoció que seis de cada 100 personas usan narcóticos.

Informó que en las cárceles estadunidenses existen 1.7 millones de personas, 50 por ciento de las cuales se vieron involucradas en delitos relacionados con el narcotráfico; que esa nación gasta anualmente 36 mil millones de dólares para arrestar y encarcelar a los delincuentes, y que en los últimos siete años se duplicó el número de presos sujetos a procesos por delitos contra la salud.

Expuso que las autoridades no tolerarán a los ciudadanos ``estadunidenses que violen la ley mexicana y busquen refugio en su país de origen''.

Indicó que México cuenta ya con el marco jurídico correcto para enfrentar el lavado de dinero, y que esa actitud también la han asumido países como Panamá y Colombia.

Finalmente, durante la conferencia de prensa ofrecida en la PGR, señaló que con los mecanismos para combatir el lavado de dinero no sólo se identificarán los recursos de procedencia ilícita, sino que también se tomarán los bienes adquiridos por los narcotraficantes y que éstos serán entregados a los pueblos, empezando por los recursos que existen en Europa y Estados Unidos.

Por otra parte, la canciller Rosario Green planteó a McCaffrey la necesidad de que los mecanismos bilaterales de cooperación antidrogas se basen en el respeto a la soberanía nacional, la integridad territorial y al marco jurídico, y lo instó a que su país reconozca la información ``puntual y precisa'' que hace México sobre las detecciones y erradicaciones de cultivos, así como los decomisos.

Entrevistada al término de la ceremonia del 53 Aniversario de Naciones Unidas, Green dijo que en el encuentro con el funcionario estadunidense se habló también sobre la necesidad de realizar ``algunas modificaciones'' a la estructura del Grupo de Contacto de Alto Nivel (GCAN), y sobre los temas bilaterales a tratar en la reunión que se realizará en diciembre en Washington.

Trascendió que el secretario de la Defensa, general Enrique Cervantes Aguirre, se reunió también con el zar antidrogas, toda vez que cada vez es mayor el peso de las fuerzas armadas en el combate al narcotráfico.

Durante la tarde McCaffrey se entrevistó con el presidente Ernesto Zedillo, a quien informó de los resultados de la lucha conjunta que ambos gobiernos llevan a cabo en contra de la producción, distribución y consumo de drogas. El mandatario mexicano refrendó la decisión gubernamental de reforzar las políticas de combate a los estupefacientes.