Las fuerzas armadas chilenas reiteraron su ``apoyo irrestricto'' al general
Enrique Gutiérrez, corresponsal, y agencias, Santiago, 18 de octubre Ť La marina, la aviación civil y la policía de carabineros se solidarizaron hoy con el ex general Pinochet, y apoyaron las gestiones que realiza el gobierno del presidente de Chile, Eduardo Frei, para obtener su libertad bajo el argumento de que el ex dictador tiene inmunidad diplomática.
El canciller José Miguel Inzulza afirmó que Chile tiene programados todos los caminos en el caso que afecta a Pinochet, luego de reunirse con un grupo de legisladores oficialistas para considerar la situación. El juez de la Audiencia Nacional española, Baltasar Garzón, comenzará el lunes el estudio de la extradición de Pinochet, a quien logró hacer detener el viernes, en Londres.
Insulza sostuvo que no está prevista una expulsión del ex general por parte del gobierno británico, porque, dijo, ``Pinochet no ha hecho nada en Londres'', y descartó que Chile esté presionando a las autoridades inglesas para que expulsen al ex militar. En todo caso, añadió, el gobierno no representará a Pinochet, actual senador vitalicio, ante el tribunal londinense.
En tanto, centenares de seguidores del Partido Comunista marcharon por el centro de esta capital para celebrar la detención de Pinochet, el hombre que en 1973 derrocara al presidente constitucional Salvador Allende. Además, medio centenar de artistas, intelectuales y miembros de agrupaciones de derechos humanos se concentraron frente a la embajada de Gran Bretaña para manifestar el agradecimiento de todos los chilenos a los españoles e ingleses por el arraigo de Pinochet, que viajó a Londres, hace dos semanas para someterse a una cirugía de la columna.
La agrupación de familiares Detenidos Desaparecidos bajo la pasada dictadura (1973-1990) criticó la solidaridad oficial con el ex gobernante. ``El gobierno piensa más en el victimario que en las víctimas'', dijo Viviana Díaz, presidenta de la organización.
También dirigentes de la coalición oficialista Concertación de Partidos por la Democracia coincidieron en que la justicia tiene valor universal. El diputado Guido Girardi expresó que la situación de Pinochet no es un agravio a Chile, mientras el legislador Andrés Palma opinó que la justicia internacional ``tiene el brazo largo para castigar el genocidio y los crímenes contra la humanidad en cualquier parte del mundo''.
De su lado, la aviación militar, la marina y carabineros reiteraron ``el apoyo irrestricto a Augusto Pinochet y a su familia, y confiaron en que se restaurará el respeto a la institucionalidad diplomática. Londres ha dicho que la inmunidad diplomática rige no por ser titular de un pasaporte de ese tipo, sino por una notificación previa sobre dicha calidad del gobierno que la invoca
A su vez, la derecha anunció que el diputado Alberto Espina encabeza la delegación de dirigentes de la conservadora Renovación Nacional que viajó hoy a Londres junto con legisladores de la Unión Demócrata Independiente, para reclamar por el ``atropello diplomático'', mientras que la UDI pidió convocar al consejo de seguridad nacional para que se pronuncie ``ante la violación al Estado chileno'' al no respetar la inmunidad de Pinochet.
Los senadores derechistas Carlos Bombal y Andrés Chadwick amenazaron con solicitar un rompimiento de relaciones diplomáticas con Gran Bretaña, si no se otorga a la brevedad al libertad al ex comandante en jefe del ejército chileno.
Dispersan protesta
Ex ministros del régimen militar, por su parte, consideraron la detención de Pinochet como un ``agravio inaceptable a un ex presidente de la República'', y expresaron que las actuaciones de la justicia española y la británica contravienen el derecho internacional, ofenden a las instituciones chilenas y dañan las relaciones bilaterales.
En tanto, una manifestación de cientos de partidarios del ex dictador ante la embajada de Gran Bretaña, para protestar por su detención, culminó en disturbios cuando los carabineros lanzaron gases lacrimógenos y chorros de agua para contener a manifestantes que sobrepasaron los cordones de seguridad, en un intento por ocupar la sede diplomática.
En medio de este ambiente, la hija del diplomático español Carmelo Soria, asesinado bajo el régimen militar de Pinochet, denunció que apenas conocida la detención del ex general, ha recibido llamadas anónimas con serias amenazas contra su vida. Carmen Soria, que tiene ciudadanía chilena y española, anunció que interpondrá un recurso de protección ante los tribunales chilenos.
De su lado, el parlamentario Juan Pablo Letelier, hijo del ex canciller Orlando Letelier, asesinado en 1976 por agentes del régimen de Pinochet, pidió al gobierno chileno dejar actuar a la justicia española, y abstenerse de apelar el arresto. De la misma manera, la alcadesa Sofía Prats, hija de Carlos Prats, ex jefe del ejército durante el gobierno socialista de Salvador Allende, y asesinado en Buenos Aires en 1974, considera una vergüenza que en Chile no se haya podido hacer justicia y se tenga que hacer en el exterior.
A su vez, la diputada Isabel Allende, hija del derrocado presidente, calificó la detención de Pinochet como ``caso histórico'', y agregó que esto demuestra que en el mundo civilizado las fronteras no existen.
En España, el presidente Frei exigió a Madrid el respeto a la legalidad internacional y la soberanía de los Estados, al justificar la protesta de su gobierno por la detención de Pinochet, y comparó la situación con la que se originaría si Chile decidiera investigar la dictadura de Francisco Franco, quien gobernó a España entre 1936 y 1975.
Pero el presidente del gobierno español, José María Aznar, expresó su esperanza de que el arresto de Pinochet en Londres, no altere las buenas relaciones bilaterales con Chile. ``Espero responsabilidad y respeto por parte de todos, porque esto afecta a muchas sensibilidades diferentes y a muchos países distintos'', indicó.