La Jornada 16 de octubre de 1998

El miedo y la ignorancia, aliados del sida, señalan personas infectadas

Angeles Cruz Ť Miedo e ignorancia son la causa de que en México haya miles de personas enfermas de sida y de otros padecimientos de transmisión sexual, que podrían evitarse con el uso del condón. Quienes se manifiestan en contra del preservativo se olvidan de toda la gente que en edad productiva pierde la salud e incluso la vida por falta de prevención, afirmó el Frente Nacional de Personas con VIH/sida (Frenpavih).

``Son más asesinos'' los grupos conservadores que niegan a otros el derecho a vivir, dijo Ernesto Badillo, coordinador de la organización, y se manifestó por que continúen las campañas de la Secretaría de Salud e incluso algunas más fuertes e intensas ``para que la gente entienda, conozca y de una vez por todas se termine con la discriminación de que son víctimas los infectados''.

El Frenpavih se ha encargado en las últimas semanas de organizar asambleas estatales y regionales con miras a la realización del Congreso Nacional de Personas Afectadas por el VIH/sida y al establecimiento de una comisión formal de interlocución con las autoridades gubernamentales para la mejoría en la calidad de los servicios y el acceso a medicamentos.

A partir de esa experiencia, explicó Badillo, la problemática de los enfermos ha sido más evidente y particularmente grave en los estados de la República. En principio, la reticencia a incorporarse por temor a la estigmatización y al daño de que pudieran ser víctimas sus familias.

En el caso de quienes ya padecen sida, por el avance del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) en la sangre, y han empezado a ser víctimas de enfermedades, por lo general llegan a los hospitales con problemáticas tan avanzadas ``que a veces ni con los mejores medicamentos logran recuperar la salud''.

Antes, comentó Badillo, el enfermo ya pasó por un síndrome de desgaste que le impide en forma prácticamente absoluta llevar una vida normal, no puede trabajar, y por lo tanto, tampoco dispone de recursos. La situación empeora y, de hecho, casi nunca tiene solución, si el afectado no está adscrito a alguna de las instituciones de seguridad social, porque tiene que pagar los honorarios del médico y los fármacos que le prescriba.

De acuerdo con información de Conasida, un tratamiento básico para el control del sida tiene un costo mensual de alrededor de 8 mil pesos.

Ante esta situación, asegura Badillo, es un hecho que una campaña de prevención para evitar que más personas sigan contagiándose será mucho más barata que atender a un cada vez mayor número de enfermos.

Sin duda, afirmó, el condón sirve para algo más que prevenir embarazos no deseados, y eso es algo que debe promoverse a todos los niveles, por encima de dogmas y creencias. A nadie, dijo, debe negarse el derecho a decidir la forma de vida que quiere llevar y esto sólo es posible si antes hay información suficiente, verídica y confiable.

Surgido en 1996 a partir de la deficiente atención médica y el nulo acceso a medicamentos para el control del VIH/sida, el Frenpavih cuenta en la actualidad con más de 2 mil agremiados, al menos la mitad sin seguridad social, y que ``todos los días se enfrentan a la discriminación y a un cada vez mayor deterioro de su calidad de vida''.