La Jornada 13 de octubre de 1998

La delegación Benito Juárez se opuso al retorno de policías frente a bancos

Bertha Teresa Ramírez Ť La vigilancia policiaca en el exterior de las instituciones de crédito provocó diferendos entre el titular de Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y la delegación Benito Juárez, reveló Luciano Martínez Cortés Luna. El subdelegado de seguridad pública señaló que al tomar el cargo Gertz Manero, ``quiso restablecer la presencia de policías afuera de las sucursales bancarias, pero nos opusimos porque la prioridad es la vigilancia en calles, esquinas y cruceros, donde la comunidad enfrenta el robo de vehículos y a transeúntes''.

En el marco de la descentralización policiaca, la seguridad de los bancos se cubrirá de manera integral, ``por lo que no se ubicará a un policía afuera de cada una de las 100 instituciones de crédito que existen en la demarcación'', señaló el funcionario, quien adelantó que se emprenderán acciones para despejar de vendedores ambulantes las aceras donde hay bancos, para que éstos no tengan frente a sí ningún ambiente que facilite la labor de los ladrones.

A un mes de que en esa delegación iniciara el programa de descentralización de la Policía Preventiva, Cortés Luna dijo que los agentes policiacos en esa demarcación -1,500- deben estar dirigidos cien por ciento a la protección de los ciudadanos, que en esa zona enfrentan la incidencia de delito patrimonial, principalmente robo de vehículos y autopartes, en vez de custodiar empresas y negocios particulares.

Con las empresas y comercios puede haber un tipo de colaboración en la que éstos ``tendrían que aportar recursos y nosotros las acciones operativas, ya que nos proponemos dirimir una clara distinción entre lo que es la seguridad pública y la policía como función privada de seguridad''.

El resguardo de los bancos y la seguridad de sus usuarios es responsabilidad de los bancos. No está de más decir, agregó, que es lógico pensar que en la nueva modalidad del robo psicológico pudiera existir algún tipo de complicidad interna. Primero, habría que creer que efectivamente sucede que un cajero se vea aterrorizado por alguien que le entrega un papel y le exige tal cantidad de dinero, pero hay que desentrañar el misterio de tal clase de robos, ``ya en éstos puede haber intereses ajenos, empeñados en mantener la campaña de que durante la administración de Cuauhtémoc Cárdenas se han cometido más asaltos a bancos de los que se cometieron durante la administración pasada''.

Los bancos deben aclarar por qué no logran atacar este delito, cuando bastaría con que instruyeran a su personal de seguridad, de cajas y a todo su sistema interior para que ese tipo de asaltos ocurrieran lo menos posible.

Por otra parte, señaló que en esa delegación se requieren cuando menos tres mil policías, el doble de los que laboran actualmente, así como duplicar el número de cuarteles y reparar al 50 por ciento de las 200 patrullas que existen en la demarcación.La delegación enfrenta principalmente los embates de una criminalidad violenta que a la menor oportunidad agrede y que es una delincuencia importada de las delegaciones, Cuauhtémoc, Alvaro Obregón, Coyoacán, Iztapalapa e Iztacalco, que opera en más de cincuenta cruceros, considerados peligrosos, donde se registran robos de vehículos y autopartes o robo a transeúntes o incluso a cajeros automáticos.

Dijo que en el caso del límite con la colonia Buenos Aires es cotidiano el que haya bandas que en bicicleta desvalijan las autopartes e inmediatamente cruzan hacia aquella parte de la delegación Cuauhtémoc.