La Jornada 3 de octubre de 1998

Nunca más se debe usar la fuerza para sofocar un movimiento libertario, sostiene López Obrador

El escritor y periodista Carlos Monsiváis manifestó: ``Hay un deseo de memoria histórica extraordinario en la manifestación. La marcha del 2 de octubre la vivo con emoción, nostalgia y seguridad de que en 30 años esto ha cambiado de modo tan radical que es uno más de los entierros de Gustavo Díaz Ordaz y su grupo''.

El también cronista y autor de diversos libros dijo que le impresionó el número y actitud de los jóvenes participantes de hoy, ``la seriedad con que asumen un movimiento del que la mayoría no tuvo noticia hasta hace muy poco, y las ganas de participar democrática y pacíficamente.

``Valió la pena el 68, no así el 2 de octubre. Después de 30 años, más allá de la matanza, no hay nada. La matanza seguirá viva aún con juicio político a los responsables, pero se tendrá una sociedad más despierta''.

Monsiváis añadió que este 2 de octubre fue más entusiasta y jubiloso que el de hace 30 años.

A su vez, la escritora Elena Poniatowska consideró que la movilización de ayer fue ``maravillosa'', porque reivindica tanto silencio, tanto no hablar durante 30 años. ``Ahora hay más gente participante que en años anteriores; se dice siempre que los jóvenes son muy indiferentes, y yo siempre digo; los jóvenes son iguales, los del 68 y los del 98''.

En tanto, el presidente nacional del PRD, Andrés Manuel López Obrador, dijo en el Zócalo que nunca más el gobierno debe recurrir a la fuerza para detener movimientos libertarios y justicieros.

El perredista subrayó que nunca más debe darse el autoritarismo gubernamental. ``Nunca más --insistió-- debe permitirse la utilización de la fuerza, y mucho menos el uso del Ejército para reprimir al pueblo, y sobre todo a los jóvenes, como fue en el 68''.

En la avenida 5 de Mayo, el diputado perredista y ex líder del movimiento del 68, Pablo Gómez, se salió del contingente para ``mezclarse con la raza. Quiero ver la marcha desde fuera, ver quiénes son los que ahora se manifiestan. Veo que vinen muy entusiastas''. Dado el número de marchistas temió que no cupieran en la Plaza de las Tres Culturas.

Unos metros adelante Cristina Barros Valero, hija del ex rector de la UNAM, Javier Barros Sierra, destacó la gran cantidad de estudiantes de los CCH's y las preparatorias. En una frase resumió su entusiasmo: ``El dolor del 68 ha valido la pena. Debemos estar alegres por haber recuperado la ciudad''.

Mientras tanto, el ex líder del 68 y ahora director del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), Gerardo Estrada, dijo: ``Una vez más la memoria está presente en una conmemoración que aunque no es festiva es importante recuperar, sobre todo por los jóvenes. Obviamente, para mí es difícil recordar lo que pasó, pero vale la pena haber pasado todo eso''.

Por su parte Alejandro Aura, director del Instituto de Cultura del Distrito Federal, celebró que la participación de la gente ``rebasara cualquier expectativa'', y calificó el movimiento como ``mayoritariamente una marcha de jóvenes, de una nueva generación, de aquellos que aún no nacían en el 68, pero vienen a reivindicar a los caídos y su lucha''.

Eduardo Valle, quien salió del evento hora y media antes de concluirse, dijo que en los puntos del pliego petitorio se habla del deslinde de responsabilidades, por ello, insistió, es necesario que se abran los archivos para darle credibilidad a lo que realmente sucedió.

Añadió que es urgente y obligado que el gobierno muestre los archivos del 68 porque debe existir un hilo de credibilidad en los gobernantes actuales, y deben despejarse todas las dudas sobre el movimiento. ``Es obligación de la autoridad actual rendir cuentas'', añadió.

Valle dijo que es importante que haya comités generacionales de libertad y que se manifiesten públicamente contra la represión. ``Qué bueno que los jóvenes de hoy no olviden la lucha y salgan a la calle a reclamar la memoria histórica'', concluyó.