La Jornada 3 de octubre de 1998

Murió Fermín Castro, blanco de la matanza de El Sauzal, Ensenada

Jorge Alberto Cornejo, corresponsal, Tijuana, BC, 2 de octubre Ť La Procuraduría General de la República (PGR) informó que el presunto narcotraficante Fermín Castro, principal blanco de la masacre del pasado 17 de septiembre en el rancho El Rodeo, ubicado en el poblado Sauzal de Rodríguez, falleció este día en el Hospital del Carmen, donde se le atendía luego de haber sido herido por seis impactos de bala.

El delegado de la PGR, José Luis Chávez García, indicó que Castro sufrió un paro cardiorrespiratorio, aunque confirmó que ya tenía muerte cerebral desde el pasado miércoles, como consecuencia de dos impactos de grueso calibre que recibió en la cabeza.

Castro fue uno de los cuatro sobrevivientes de la masacre en la que 18 personas, entre hombres, mujeres y niños integrantes de tres familias, fueron acribilladas en un aparente ajuste de cuentas entre narcotraficantes.

De acuerdo con las investigaciones que realiza la PGR, hasta el momento han sido arrestados 14 sospechosos. Un juez federal dictó auto de formal prisión a 12 por delitos asociados al narcotráfico, pero sus nombres no han sido revelados bajo el argumento de que podrían entorpecerse las investigaciones para dar con los responsables directos del crimen.

Ayer, durante la presentación de su tercer informe de gobierno, Héctor Terán Terán se comprometió a coordinar los esfuerzos entre las autoridades federales, estatales y municipales para esclarecer el multihomicidio, al que calificó como uno de los hechos sangrientos más lamentables de los que se tenga registro en la entidad.

A esa balacera sobreviven dos menores de edad y un hombre de 32 años, a quienes la PGR mantiene bajo protección especial, mientras que nueve de los 14 sospechosos se encuentran bajo arraigo domiciliario en el poblado de Cerro Azul, municipio de Ensenada; el resto está bajo la custodia directa de las autoridades.

Formal prisión al narco Monje Ochoa

Por otra parte, el juez séptimo de distrito en materia penal dictó formal prisión a Julio Monje Ochoa, de 23 años, por delitos relacionados con el narcotráfico, actividad que según la PGR desempeñaba en complicidad con su padre, Víctor Manuel Monje González.

Monje Ochoa fue detenido por primera vez cuando tenía 15 años, al ser sorprendido con 150 kilogramos de cocaína, propiedad del narcotraficante José Contreras Subías, uno de los primeros lugartenientes del cártel de Tijuana.

El martes pasado fue arrestado tras una investigación de la PGR que ha desatado una guerra entre esa dependencia y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), cuando agentes estatales trataron de impedir el arresto del narcotraficante el pasado 11 de septiembre, y aprehendieron a dos del grupo antinarcóticos, a quienes acusaron de extorsión y secuestro. Sin embargo, la PGR afirmó que no se trató de un plagio, sino de una operación encubierta de agentes federales que llevaban una investigación contra Monje, a quien hicieron creer que le comprarían una tonelada de mariguana y para ello le pidieron que llevara una muestra de la droga a un hotel de la localidad, donde ya estaba listo un operativo para su detención, cuando llegaron los policías estatales a rescatar al presunto plagiado.

De acuerdo con las autoridades, Monje es enlace entre el cártel de Tijuana y vendedores de droga al menudeo, quienes enviaban cocaína y mariguana a Estados Unidos ``pagando derecho de piso'' a los hermanos Arellano Félix.

Por su parte, la agencia estadunidense antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés) informó que abrió el expediente del Buró Federal de Investigaciones (FBI) número 557888XA1, en el que se indica que Monje fue arrestado por el Departamento del Tesoro al tratar de introducir a Estados Unidos 12 kilogramos de mariguana el 3 de marzo de 1995.

Asimismo, la dependencia informó que su padre figuraba en el expediente 166290AB4, en el que se asentó que fue arrestado por intentar introducir 50 kilogramos el 9 de agosto de 1995.