Si no le sirvo a la Cruz Roja, déjenme ir, expresa Barroso Chávez a senadores
Alonso Urrutia y Andrea Becerril Ť En el centro de la polémica de la opinión pública, cuestionado por senadores perredistas y defendido por panistas, José Barroso Chávez, presidente de la Cruz Roja, no aguantó más y lanzó: ``Si yo no sirvo para la Cruz Roja, señores, me hacen el gran favor de dejarme ir. Porque a mí la Cruz Roja lo único que me deja son costos, pérdida de tiempo y ahora, dizque una campaña de desprestigio''.
Barroso no paró ahí. ``Yo no voy a seguir aceptando que se me vea como un sinvergüenza, un gángster, cuando lo único que he hecho es crear una Cruz Roja de Primer Mundo. Además, si me han llamado tres veces a presidirla es porque sirvo para algo ¿no?''.
Comparecencia ante la comisión de Asistencia Social del Senado que no despejó dudas sobre el manejo de la institución y de la emergencia en Chiapas.
``Es una cosa muy orquestada'', dijo Barroso antes de acusar a los medios de difusión detrás de este ataque ``irresponsable'', que reproduce los cuestionamientos de quienes participaron en la conducción de la Cruz Roja.
``¡Qué extraño que después de un año, casi un año (del huracán Paulina). Bueno, si los malos manejos se han hecho, ellos estaban ahí'', dijo en referencia a quienes lo han denunciado.
Pero las denuncias tuvieron eco entre los senadores. Higinio Martínez, de extracción perredista, fue incisivo en el asunto de la pretendida campaña:
`` Yo he leído que lo acusan a usted y no a la Cruz Roja, quisiera que me explicara si es contra usted o contra la Cruz Roja y si es así quién organiza esta campaña, ¿diría usted que es el mismo Presidente de la República, el secretario de Salud o es consecuencia de su posición en torno al condón?''.
Barroso Chávez refutó argumentando que ``si yo acuso a uno de los directivos de la Cruz Roja estoy acusando a la Cruz Roja, porque entonces se dice, ¡ah caray!, si este señor ha hecho una serie de tropelías pues quiere decir que la Cruz Roja no es una organización de confianza. Y esto me parece una cosa muy baja''.
Higinio Martínez fue más directo y cuestionó: ``¿piensa usted renunciar a la presidencia de la Cruz Roja? ¿En estos momentos considera que su salida pudiera contribuir a que no se demeritara la institución? Por lo que está haciendo ahora pudiera estar sujeta a los ojos de todo el mundo''.
Yo le digo a usted, respondió Barroso, que soy un voluntario y dedico más del 90 por ciento de mi tiempo a estas cosas. Según dijo, cuando la Cruz Roja era ``un membrete'' él pagaba los sueldos, porque no había quien los pagara. ``Si fuera yo ineficaz, no me eligen presidente de la Cruz Roja Internacional, no me reeligen y me vuelven a reelegir''.
``Si nosotros llegamos y se necesita comida y la quieren repartir, pues que la reparta el Ejército, nada más que nos conste que la están repartiendo bien. Pero no le vamos a poder decir al Ejército, me firmas que te dimos esto.''
El presidente de la Cruz Roja acusó a los medios de difusión de reproducir las ``maledicencias'' contra la institución. Larga intervención para reproducir sus logros al frente de la misma.
Sería el panista Rosendo Villarreal quien secundaría los argumentos de que existe una campaña contra la Cruz Roja. Tras censurar la ausencia de los secretarios de Salud y de Desarrollo Social y calificarlo como un agravio al Senado, dijo que es necesario ``parar de inmediato esta campaña porque no es justo que nosotros solos acabemos con las instituciones nobles del país''. Si tienen diferencias, resuelvan en privado, agregó.
Barroso reconoció que en algunos casos sí se han detectado malos manejos de algunos presidentes y se han tenido que consignar, ``pero nosotros no vamos a hacer un escándalo de eso, es natural y lógico, no los aceptamos, tratamos de corregirlos''.
El tema del condón traído a debate por el PRD no lo eludió Barroso y ante una comisión mayoritariamente panista ratificó sus críticas: ``Considero que el condón vale para un demonio, porque si sirviera, como dicen que sirve, no había más dudas. Es como jugar a la ruleta rusa''.