La Jornada 28 de septiembre de 1998

Francisco Javier Berganza, virtual candidato del PAN en Hidalgo

Alonso Urrutia, enviado, Pachuca, Hgo., 27 de septiembre Ť Sin contendiente alguno, el diputado y cantautor Francisco Xavier Berganza Escorza se constituyó hoy en el candidato a gobernador por el Partido Acción Nacional. La víspera, el columnista Miguel Angel Granados Chapa envió a la delegación estatal panista una misiva en el que declinaba su postulación y, con ello, su propuesta de ir en coalición con el Partido de la Revolución Democrática en las elecciones de febrero. En tanto, en el PRD corrieron versiones de que el periodista sí contendería por la candidatura de ese partido.

No incluida en su carta de renuncia, pero sí en su columna de un diario nacional, Granados Chapa lanzó fuertes críticas al proceso interno del PAN, que incluso hablan de sobornos a dirigentes municipales panistas para retirarle su respaldo, y así rechazar la posible coalición con el PRD.

Por lo pronto, panistas cercanos a Granados Chapa anticiparon que promoverían impugnaciones ante la dirección nacional del PAN a fin de que se revisen las irregularidades denunciadas y, de comprobarse, se anule el proceso interno. El análisis del proceso compete al Comité Ejecutivo Nacional en razón de que en Hidalgo no existe un comité ejecutivo electo, sino una delegación estatal designada desde el centro.

El resultado de la convención estatal ya estaba cantado. Las arengas a Paco eran abrumadoras en el salón Carlos V de esta ciudad, tanto como los rumores que corren acerca de su estrecha vinculación con el gobernador Jesús Murillo Karam y con el priísmo estatal, que --afirman panistas hidalguenses-- hasta le financió actos de campaña.

Los rumores son muchos, los suficientes para obligar al delegado de la dirección nacional del PAN, Gonzalo Altamirano Dimas, a asumir una actitud prudente y advertir a los convencionistas que el Comité Ejecutivo Nacional deberá ratificar la votación de hoy.

Un resultado ciertamente aplastante: 478 votos a favor de Francisco Xavier y sólo dos en contra.

Sin embargo, el margen de ventaja no acalla las censuras, y no es para menos. Entre el personal allegado al cantautor está Francisco Lechuga, quien hasta hace poco fuera un hombre cercano a Orlando Arvizu, ex precandidato priísta a la gubernatura.

Junto con la votación a favor de Berganza se votó también la posible coalición con el PRD.

Ya triunfante, Berganza fue entrevistado sobre el tema, luego de hablar de la unidad de los hidalguenses para derrotar el cacicazgo priísta:

--¿Declinaría usted a favor de otro candidato en coalición?

--Por supuesto que no, no voy a defraudar el voto de los panistas aquí.

Francisco Xavier llegó confiado en que sería el candidato, pero molesto por el escrito de Granados Chapa. Tres horas de trámites internos para el registro de convencionistas y la aprobación de la plataforma del PAN fueron el preámbulo de su discurso, que dejaría en claro la inviabilidad de la coalición PAN-PRD.

``No necesitamos de ninguna ideología externa'', dice. Habla de su pobreza infantil, ``aunque ustedes no lo crean'', y de sus ``fuertes convicciones panistas'' (se afilió al PAN en 1997), antes de iniciar un round de sombra contra los rumores: que porque es cantante y no es panista sino priísta, y tiene muchos parientes en ese partidoÉ

Nada de que es del PRI, dice, un partido al que acusa de ``haber robado y saqueado'' a Hidalgo. Diez minutos de discurso que concluyen con una arremetida final contra Granados Chapa, en la parte más encendida de su intervención: ``que dé la cara para disculparse; no puede pisotear la dignidad de los panistas dudando de la honestidad de este proceso''.

``¡Que se retracte!'' --grita entre la algarabía de la gran mayoría de los panistas hidalguenses.

Los abucheos no encuentran eco en el delegado estatal, Gonzalo Altamirano Dimas, quien comienza matizando la confrontación:

``Granados Chapa es un respetable columnista queÉ'' Un abucheo generalizado interrumpe la frase. Entonces Altamirano Dimas recrimina la intolerancia de los panistas hidalguenses y continúa su discurso, en el que advierte que el proceso será revisado por el CEN de Acción Nacional.

En esos momentos el rostro de Berganza pierde la sonrisa de satisfacción. No se le mira contento con la participación de Altamirano. En el presidium, el senador panista por Hidalgo, Benigno Aladro, tampoco se ve contento. No lo dice, pero se sabe de su abierta inconformidad con el proceso interno que eligió a Berganza.

Altamirano no omite la inconformidad de Granados Chapas y advierte que el PAN es un partido de leyes e instituciones, por lo que la puerta abierta está para desahogar las denuncias a las que ``habrá de darse puntual respuesta''.