Deplora Del Villar el trato dado en el juzgado 47 a las jóvenes violadas
Humberto Ortiz Moreno Ť No me corresponde evaluar si el caso Tláhuac se ha politizado, manifestó el procurador de Justicia capitalino, Samuel del Villar, quien ratificó su obligación de cumplir con la ley y perseguir con toda energía y firmeza a quienes la violan, como es el caso de las tres jovencitas ultrajadas por 15 policías preventivos.
Responsabilizó a los legisladores de reestructurar las condiciones con que los ofendidos comparecen ante los juzgados a confrontar a sus victimarios.
Y es que, reconoció, el actual marco jurídico constitucional del procedimiento penal induce a diligencias --como la ocurrida el pasado 18 de septiembre en el juzgado 47 penal-- en las que el problema fundamental es que las víctimas deben confrontar a sus agresores.
``Se llevó a un nivel extremo la falta de consideración o de protección a los requerimientos de las víctimas'', lamentó el titular de la Procuraduría de Justicia capitalina, durante una entrevista al concluir la inauguración de la primera de las cinco unidades metropolitanas de Investigación y Seguridad Pública que serán instaladas en zonas limítrofes del Distrito Federal y el estado de México.
Del Villar señaló que aún es preciso enfrentar otro problema: la concepción arquitectónica territorial que ha hecho que los juzgados sean ``apéndices'' de los reclusorios.
Por ello, recalcó, la estrategia del jefe de gobierno, Cuauhtémoc Cárdenas, es desarrollar centros de justicia que dignifiquen a los juzgados y establezcan condiciones adecuadas para la alta función de administrar justicia.
En torno al caso Tláhuac, el procurador aseguró que está acreditada plenamente la responsabilidad de los inculpados, ``no sólo con las declaraciones originales de las víctimas, sino también con las de los propios inculpados; con los dictámenes de los servicios periciales en materia de integridad física, en materia de genética forense, de ginecología...''
Asimismo, remarcó que la obligación del Ministerio Público es cuidar a las víctimas en una circunstancia tan difícil y agobiante en que las colocaron los abogados defensores, amortiguando ``el impacto terrible de estar expuestas durante 16 horas ante los presuntos violadores que las inculparon''.
De haber preguntado la representación social, juzgó, la diligencia hubiera durado 26 horas.
Lo único que ha acreditado todo esto, subrayó el procurador, es ``un poco la ignorancia'' del visitador de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal sobre la función que tiene el MP.
La crisis no es pretexto
Por otra parte, el procurador Del Villar aseguró que las instancias de justicia deben estar prevenidas y poner todo su esfuerzo para que, a pesar de la crisis económica, ``no se nos vayan a incrementar los índices delictivos''.
Igualmente, garantizó que no hay rivalidad entre policías judiciales y preventivos, y afirmó que existe absoluta cooperación de la SSP, que ``le agradecemos''.
Ponderó la disposición de Alejandro Gertz Manero de pagar 300 pesos a los uniformados por cada puesta a disposición que concluya en efectiva consignación del Ministerio Público, y dijo que todo lo que estimule la elevación de las responsabilidades preventivas o persecutorias del delito es positivo.
``Creo que la retribución es sumamente importante, es parte de la política general de gobierno del ingeniero Cárdenas de adecuar las condiciones de prestación de los servidores públicos a los requerimientos de este servicio''.
--¿No significa ponerle precio a las puestas a disposición?
--Son estímulos, generalmente --concluyó el procurador capitalino.